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—¡Santo Dios, que genial por ti Deku!— Celebró Uraraka—. Seré sincera, ¡tengo tantos celos! Me hubiera encantado ser Aurora.

Ambos chicos reían y platicaba en la cafetería, pero aquel comentario de Uraraka había llamado la atención de más de una persona.

—Midoriya.

El corazón se le aceleró, si dos personas había en toda la escuela que movían su corazón de tal forma, uno era Shoto Todoroki. Con esos hermosos ojos heterocromicos, y su cabello mitad blanco y mitad rojo, con una piel tan blanca como la nieve.

—Uh, Shoto-Kun, ¿ocurre algo?

—¿Es cierto que te dieron el papel de Aurora?

El ojiverde enrojecio, Todoroki lo veía fijamente y con una tierna sonrisita en los labios. Izuku tartamudeo antes de contestar.

—Si, ¿audicionas para el príncipe entonces?

—No tenía muchas ganas pero, bueno, digamos que cambió algo

—¿Ah si? ¿Qué?

—La princesa con la que bailare no es otro que tú, eso es suficiente motivación.

Sin más, el heterocromatico se fue, dejando solos a ambos amigos.

—¿Viste como te miró?—. Suspiró Ochako

—No se, ¿fue especial?—. Tartamudeó el chico, emocionado y también lleno de vergüenza

—Yo creo, que le gustas mucho, ha intentado robarte un beso en más de una ocasión

—No estoy seguro de eso, pudieron ser malentendidos.

Fueron interrumpidos por Katsuki Bakugou, el rubio había llegado y estampado la mano con fuerza en la mesa. Se había inclinado hacia Izuku, su mirada carmín clavada en los irices esmeraldas del muchacho.

Y si, la segunda persona que le daba taquicardia al corazón era claramente Katsuki Bakugou. Con hermosos ojos rojo carmín, y cabello rubio cenizo siempre mal peinado.

—Oi, Deku, el papel de príncipe es mio, no te imagines bailando con otro.

Y así, sin más, el chico se fue tan rápido como había llegado.

—¿Fueron mis ideas o Bakugou acaba de declarar amor por Izuku?—. Bromeó Mina Ashido, iba llegando con su bandeja de comida y en compañía de Tsuyu e Iida

—¡Kacchan y yo solo somos amigos!—. Deku moría de la vergüenza, primero el malentendido con Todoroki y ahora con Kacchan.

Sus amigos reían, claro que no le creían nada, pero se sentía tan bien eso. En el fondo, si tuviera que elegir, sabía que en realidad no podría.

...

—Mira, ¿que te parece?

Era el traje más bello que hubiese visto, y si en el boceto ya era bello, no podía esperar a tenerlo con el.

Unas suaves medias negras ajustadas a sus torneadas piernas. La parte de arriba era una especie de camisa azul con botones de plata, aunque eran más un mero adorno pues la camisa debía tener medio pecho abierto. Las mangas tenían corte hasta por debajo de los codos, como si hubiesen sido arremangadas. De la cintura salía una delicada falda de gasa, era únicamente para su parte trasera, y era larga hasta sus pantorrillas, con un tierno corte asimétrico de varias capas. El conjunto era azul rey con ribetes y detalles plateados.

—Estas son tus nuevas zapatillas, usalas una o dos veces para acostumbrarte a ellas, no vayas a gastarlas—. Le aconsejo la costurera, entregándole un par de zapatillas plateadas.

Like Love And DanceDonde viven las historias. Descúbrelo ahora