Consecuencias III

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Algunos días después de haber brindado por no haber tenido más problemas, las chicas vulpinoides avisaron a los tiernarth que debían ponerse algo casual para bajar a la piscina donde no tardaba en dar inicio una reunión del ya nutrido grupo que ahora vivía en casa de Arsinoe; luego dejaron esa habitación para ir a la de ella en donde se asearon, arreglaron y bajaron a la fiesta. En tanto que después de hacer lo propio Baphy y Vrex se encaminaron a la reunión, aunque al ver a Cronwald en donde estaba la barra, Baphy converso con el primero acerca de lo que fue para su padre ser un noble en el ahora mítico mundo de Jurra y comenzó a escarbar en su relación con la bella Eleanor, pero el se desvió al hablar de la perdida ex esposa de él mismo y de como las kyrie del mundo ahora perdido de Jurra, al no tener varones lo usaron como a otros tantos hombres, esto sorprendió y excito en cierta manera al muchacho sobre todo cuando el mismo Cronwald le refirió el hecho de que en sí esas kyrie solían ser bisexuales, fue en ese momento en el cual Baphy le sugirió que tal vez la misma Arsinoe tuviera relaciones sexuales con Vrex; ante tal revelación el padre del chico le contestó que de ser cierto eso, le encantaría ver aquello.

Ambos fueron entonces con los demás, y después de unos tragos Baphy volvió a ir por su cuenta hacia la alberca en donde se encontró sentada en la orilla a Eleanor quien lo vio llegar con una mirada depredadora, entonces ella le dedicó una sonrisa sin malicia y dando alguna palmadas en el suelo a un lado de ella, le invitó a sentarse.

—Hola Baphoreth buenas tardes en este caluroso día, –le saludó Eleanor, quien estaba ataviada con un traje de baño de color blanco de dos piezas las cuales dejaban ver casi toda su hermosa piel apiñonada en la cual aún se podía apreciar el brillo del bronceador la cual la hacía lucir más sensual.

—Buenas tardes hermosa Eleanor, –Le dijo con calma mientras se sentaba.

De una sola mirada Baphy recorrió aquel cuerpo estilizado, aunque lo que le llamo más la atención fueron los ojos violeta metalizado que hacían juego con su rostro afilado, sin mencionar sus labios carnosos, además de sus pechos redondeados y bien proporcionados, ante tal vista Baphy solo acertó a suspirar y le dijo:

—Realmente no había observado a una mujer más bella en toda mi vida.

—Gracias amorcito, tu no te quedas atrás sabes, siempre me han gustado los hombres con una musculatura como la tuya, –Contesto con tono sugerente Eleanor.

—Sabes creo que hace poco que ayude a renovar un lugar para mi y supongo que sabrás también para Vrex.

—¿De verás querido?, apuesto a que deben de divertirse mucho en él.

—Si, aunque creo que no veo a mamá y a Vrex por acá, lo cual es raro.

—¿De verás Baphorethcito?, ¿y que podemos hacer nosotros al respecto?, –le preguntó acercando su rostro al de él,  poniendo una de sus manos en uno de los muslos del chico.

Sombras sobre la Galaxia ElípticaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora