Perdóname

7

Estaba acostumbrada a ver titanes y ver como se comían a los humanos, sonaba horrible, pero no era la primera vez que veía algo como esto. Muchos de mis compañeros me veían como alguien valiente, pero por dentro tenía mucho miedo.

Estaba concentrada en atacar a los titanes pero pude divisar una cabellera rubia que conocía bien, estaba en un techo de un edificio cerca de mí. Fui hacia él y mientras más me acercaba podía ver su cara, mientras más cerca, podía ver perfectamente esas facciones en su cara llena de terror, tenía una mirada perdida, una mirada que había visto en tantos soldados. Era una mirada llena de emociones, una mirada que solo puede ser plasmada cuando estas frente a la misma muerte.

- Armin, ¿Qué paso? ¿Qué haces aquí arriba? ¿y tu equipo? – pregunte intentando sonar tranquila pero parecía estar en shock -

Pronto llego Connie junto a Ymir e Historia.

- ¡¡ARMIN!! ¡¡ARMIN!! ¡¡REACCIONA DE UNA PUTA VEZ!! - grito Connie agitando a Armin -

- Connie... - musito Armin aun con aquel semblante de horror -

- ¡¿ESTAS HERIDO?! ¡¿HOLA?! ¡¿QUE LE HA PASADO A TU EQUIPO?! -pregunto Connie subiendo su tono de voz -

- ¿Equipo...? - pregunto el rubio nuevamente en un susurro -

- ¡EH, CONTROLATE! ¡¿QUE HACES PARADO AQUI SOLO?! - volvió a preguntar Connie - ¡Estas empapado! ¡¿Pero que mierdas ha pasado?! – pregunto con más desesperación -

La cara de Armin cambio a una llena de todo tipo de sentimientos. Era fácil para mi darme a la idea de lo que había pasado, su equipo, claramente, estaban muertos.

- Connie, están muertos - respondí con neutralidad, no era la primera vez que perdía a algún compañero -

Armin empezó a gritar como loco, gritando cosas como que era un inútil y que él debía morir. Me sentía mal por él, ellos no habían experimentado la muerte en estas condiciones, devorados por titanes. Aparentaba ser fuerte, pero ver destruida a la persona que me devolvió un poco de esperanza en la humanidad, era algo que me rompía desde lo más profundo de mi ser.

- Lo siento - me disculpe mientras abrazaba a Armin - En verdad, lo siento mucho. Todo esto es nuestra culpa - solté sin pensar en lo que decía, por un momento se me olvido que ellos no sabían de los titanes cambiantes y que cuatro de ellos éramos sus compañero -

- ¡¿COMO SABEMOS QUE ESTAN MUERTOS?! TAL VEZ ESTAN AYUDANDO A ALGUIEN, SI LOS BUSCAMOS – interrumpió Connie intentando convencerse de que aquel equipo ya no estaba con nosotros -

- Están muerto Connie, acéptalo de una vez, no podemos perder tiempo - respondí mientras seguía abrazando a Armin que no dejaba de llorar -

- ¡¿POR QUE ES EL UNICO QUE QUEDA?! - pregunto con confusión -

- Probablemente lo confundieron con un cadáver, no tenemos tiempo de lamentarnos ahora, si se los comieron es porque son débiles y si sigues así tú serás el próximo que morirá por tu incompetencia - respondí con severidad, aunque más que nada era una advertencia -

- Zorra de mierda ¡¿QUE TE PARECE SI ME ASEGURO DE QUE NO VUELVAS A ABRIR LA BOCA NUNCA MAS?! - amenazo Connie perdiendo los estribos -

- ¡¡CALLENSE YA LOS DOS!! - grito Armin mientras se separaba de mi -

- Bueno. No podemos dejar las cosas así ¿vamos Armin? - pregunto Connie intentando ayudarlo a pararse -

- Discúlpenme por ser un estorbo. Voy a unirme a la retaguardia - anuncio el rubio mientras se dirigía a la retaguardia con el equipo de maniobra -

- ¡ARMIN! - grito Connie intentado que se detuviera -

- Richter ¿Dónde está tu equipo? - pregunto Jean en el momento que llego hasta nosotros -

- Muertos – respondí con tranquilidad aunque no lo estaba - Deben moverse, les destinaron el frente – mencione mientras me alejaba con el equipo de maniobra -

Es cierto que yo también debería ir pero si me quedaba con más gente tendré más problemas por salvarlos y no podre matar titanes o salvar a la gente de Trost.

No paso más de 20 minutos para que las campanas sonaran, dando la señal para la retirada. Me fije si tenía gas para llegar a la muralla, no quería exponerme a que un titan me devorara o que tuviera que usar mi titan como último recurso.

- No me queda mucho... – susurre al ver que no me quedaba gas para llegar a la muralla -

Nadie de suministros estaba llevando gas y cuchillas a ningún escuadrón porque se estaban escondiendo en el cuartel. Muchos ya habían muerto gracias a esos incompetentes. Empecé a moverme y busque a mis compañeros. Después de moverme un poco los pude encontrar, me dirigí hacia ellos y al estar cerca del techo en el que se encontraban mi gas empezó a escasear.

- Mierda- exclame mientras caía hacia el techo pero gracias al entrenamiento que se medio, estaba preparada para ese tipo de caídas - A veces agradezco losentrenamientos de Marley - susurre mientras me paraba limpiando mi uniforme