Delta ♯「𝙨𝙤𝙤𝙟𝙪𝙣」[EDITANDO]

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BeomGyu había acompañado a YeonJun a su casa junto con SooBin, quien solo lo hizo por mero compromiso al ver al alfa en un estado tan deplorable, sabía que algo le estaba pasando al mayor... Y sabía que la culpa era totalmente suya.

Ambos llegaron y Jeon se despidió con la escusa de que quería centrarse en sus trabajos esa tarde, YeonJun y BeomGyu quedaron solos... El Omega ayudo al de cabello rosado a llegar a su habitación y que se acostara en su cama.

—Hyung, ¿Seguro de que está bien? Realmente se ve cansado... ¿Acaso su celo está por llegar? — No, claro que no... El celo de YeonJun fue hace mes y medio, aún no era momento de que llegará.—Hyung, deberá ir al médico, no quiero que esté enfermo...

—BeomGyu-nnie, estaré bien, solo me sentí un poco mal. Pero mira, ya verás que se pasará pronto. — El aún lo seguía mirando, sabía lo que esperaba... O tal vez lo que quería.— Faltan muchos meses para mí celo, bebé... Y realmente ahora asoló quiero dormir —en realidad el lazo entre el Delta y el le estaba afectando un poco. No sentía la necesidad de coger con alguien, y aunque implorará de rodillas con lágrimas en los ojos por no hacerlo, solo se sentía bien cuando pennsaba en el falso beta que lo marcó en la misma cama que ahora estaba acostado.

Tomaba su cuerpo y lo tiraba bruscamente a la cama, sabía que había pasado abajo... ¿Pero en que momento lo había desbordado?. La traviesa lengua del supuesto beta recorría su pecho y su abdomen, masticaba y torturaba los pequeños botones que ya se encontraba erectos.

—Eres demasiado sensible, YeonJun...—Le dijo, quiso reclamar, pero la gloriosa lengua del menor ya estaba haciendo de las suyas, había comenzado a lamer la punta de su miembro, despues bajaba y de ves en cuando lo mordía, sabía que le gustaba escucharlo gritar... Pero él no quería complacerlo en ningún aspecto.

Ahora la lengua de Jeon estaba invadiendo su entrada, estaba temblando mientras con las pocas fuerzas que tenía disponibles estaba siendo tocado por el más alto.

Lloraba y forcejeaba, nunca había sentido tal dolor como tener el miembro de alguien en su interior, ahora admiraría más a los omegas... Pero no tuvo tanto tiempo para pensar, pues las embestidas del peliazul habían iniciado, a pesar de ser lentas dolían hasta el alma. Sentía que el cualquier momento iba a desmayarse, por más placentero y excitante que haya comenzado a ser, el no quería sentirlo... Ahora mismo quería estar entre los brazos de su madre quien le cantaba una canción de cuna para dormir.

Lo peor estaba aún por venir, cuando los afiliados dientes del Delta se clavaron en su blanquecino cuello sabía que había hecho algo muy malo, había traicionado a su novio, a su familia y a todos los alfas de su familia, pero el menor aún no salía de el.

Había un cambio en la sensación que estaba atendiendo, como si el miembro de SooBin hubiese crecido.

—Oh, Dios... L-Lo siendo hyung, realmente lo quería hacerlo, mi cuerpo sol–

—¡Vete, lárgate, aléjate!

—YeonJun h–

—¡V-Vete de una maldita vez SooBin!

Despertó del sueño con lágrimas en los ojos, ese día se supone que iría al médico, pero el punzante y repentino dolor en su parte baja le hizo el batallar para caminar... Pero lo peor aún de todo esto era la jodida pesadilla que había tenido.

Quería olvidarlo todo