Historias contadas

por un límite

Son crecientes las ocasiones en las que estoy ausente,
de este entorno terrenal frívolo y endeble,
nada fiable,
donde sí todo es rentable,
y el dinero es un boleto para que el diablo te hable.
En una urbe con fariseos en metástasis,
científicos que buscan vida después del génesis,
es que esta vida hay vivirla como frenesí,
pero nadie ha declarado un estado de catarsis.

Somos alma que el cuerpo abandona,
armas que disparan en tiempos de virus corona,
sí,
la tierra rumbo a su apocalipsis,
hasta que por justicia retributiva llegue nuestro némesis.
Mientras tanto los gremios elitistas,
agrupados en partidos con programas narcisistas,
que se culpan unos a otros de nuestras desgracias,
pero la culpa es nuestra por creerles todas sus falacias.
Pero esto a poco les incomoda,
mientras haya alcohol Internet cigarros y drogas,
una perfecta excusa boba,
para una sociedad que rinde pleitesía a quienes más le roban.

Las CRUZADAS también suman precedentes,
lucha por hegemonía entre dioses contendientes,
traducida a control de fe,
indulto de pecados,
por culto al fanatismo,
trajo el cataclismo esperado.
Quien decide la verdad si esta tiene un velo,
y los medios no comunican inoculan miedos,
así vagan reos de una ideología,
como voz de una supremacía,
que solo batalla por egos.
Así vamos ciegos e intolerantes,
a gusto con nimiedades adulando a farsantes,
los cambios son imperantes,
todo tiene límites,
incluyendo nuestro aguante.

dedicado a cristhianorozco13