SessRin Week 2021

4. Regalos

Línea de tiempo: Post InuYasha - El acto final

Clasificación: K+

Categoría: Romance/Comedia

Total de palabras: 2,734

Sinopsis: Pronto Rin cumplirá dieciséis años, por lo cual, Sesshomaru se ha decidido a darle regalos más que apropiados a la hermosa y alegre jovencita.

💕💕💕

Sesshomaru examinó con sumo detenimiento los diferentes objetos esparcidos en la amplia mesa delante suyo. Sus dorados orbes se movieron de un lugar a otro, incluso se valió de su sentido del tacto. Pasó sus largos dedos por las finas telas, y por el material de las diversas joyas.

A su lado, un muy nervioso Jaken contemplaba las acciones de su amo, estático en su lugar. Analizó disimuladamente los movimientos del yokai, así como también sus apenas cambiantes gestos.

Tragó saliva pesadamente en más de una ocasión. Por más que intentó evitarlo, sus pequeñas piernas lo desobedecieron, temblaron como si fueran unas extrañas gelatinas a causa de la incertidumbre.

— Jaken...

Se escuchó de pronto la varonil voz de su amo. El pequeño yokai abrió su boca ante saberse llamado, logrando ahogar apenas un grito de temor antes de escuchar nuevamente la opinión de su Lord.

— Estos son los adecuados. —El yokai de cabellos plateados tomó los objetos de la mesa con mucho cuidado para después mover sus brazos hacia un costado sin siquiera volver la vista. Jaken trotó para llegar a su lado y tomarlos. Una vez hecho esto, añadió con molestia—: No sé por qué demonios no pudiste conseguirlos al primer intento.

— ¡Es que amo, había muchos monstruos grandotes! Y luego yo...

Una gélida mirada bastó para que el exasperado vasallo cerrara la boca al instante. Jaken retrocedió unos pasos para después hacer una leve reverencia.

— Lleva todo esto a alguna de las doncellas y pídeles que envuelvan todo de una manera presentable. Asegúrate que estén listas esta noche pues mañana iré a ver a Rin. Ahora sal de aquí, tengo cosas que hacer.

— ¡Por supuesto, Amo Bonito!

Sesshomaru entrecerró sus ojos con fastidio al ver como Jaken tropezó antes de lograr llegar a la puerta, algunos de los objetos cayeron inevitablemente al suelo. Percatándose de su descuido, el yokai verde se puso de rodillas en el piso para suplicar por su perdón. Hizo unas cinco reverencias antes de que ya con su poca paciencia agotada, Sesshomaru le ordenara en un sombrío murmullo:

— Ten más cuidado y lárgate de una maldita vez.

En ese segundo intento, Jaken por fin logró su cometido. Tras encontrar a una de las doncellas principales en el palacio y darle las ordenes de su amo, se dirigió a su habitación. Una vez dentro, se dejó caer de rodillas en el suelo y empezó a realizar una de sus escenas dramáticas y exageradas tan comunes.

— ¡Esta vez en verdad temí por mi vida! —Gritó Jaken entre llorosos gemidos. Se hizo bolita en el piso y comenzó a girar de un lado a otro— Creía que el Amo Sesshomaru en verdad iba a matarme.

«Desde que Rin se quedó en la aldea de los humanos cada año antes de su cumpleaños es igual. Él me manda a buscar regalos para la mocosa, regreso a mostrárselos y si no son de su agrado los desecha para después hacerme salir a buscar más.