Los Ojos De La Luna

Capitulo 15 Una luna algo... ¿drogada?

Poco a poco me explicaron en que consistía el trabajo de una sanadora; resulta que tengo la habilidad de "absorber" todo lo que sea golpes o heridas al tocar a quien esté herido, pero también puedo "traspasarlas", eso que quiere decir, que si soy herida puedo entregarlas a alguien mas, aunque esto requiere de mucha practica y energía. También me dijeron que en algunos casos mis heridas se reflejan en mis oponentes como método de defensa, lo que explicaría porque cuando Maren me atacó ella también tenía las mismas marcas que yo en el cuello.

Me explicaron que todo esto lo podría controlar con el tiempo, que era cosa de practica pero que conllevaba una gran perdida de energía, por lo que este tipo de entrenamiento debía practicarlo solo con supervisión. Esto explicaba de alguna manera el porque me había desmayado, al haberme protegido de Maren y absorbido las heridas de los chicos había quedado sin energía. 

Me pidieron que descansara y que en un par de días debían anunciar que la luna había aparecido, cosa que no me agradaba pero estaba dispuesta a aceptar a regañadientes. Dijeron que no podían ocultar quien era, lamentablemente una luna no puede escapar de su futuro.

Me entregaron unos libros, los cuales leí en mi tiempo libre mientras descansaba, descubrí que no es recurrente encontrar una luna, pero que son muy importantes en una manada y suelen tener marcas características, en mi caso mis ojos de diferente color habían sido una alerta para los demás, por eso me habían traído a este lugar.

La verdad todo esto era demasiado para mi, solo quería ver a mi madre pero me dijeron que lo mejor era que me mantuviera alejada de ella, debían tenerme bajo cuidado y prefirieron que solo me contactara con ella por llamadas telefónicas. Entendía que algunas personas querrían hacerme daño cuando se supiera quien era y querían evitar que cualquier cosa pasara, era mas fácil tenerme segura dentro de este lugar que afuera donde estaba expuesta a cualquier peligro aun que yo estaba segura de que era todo lo contrario.

Pronto haría una ceremonia para anunciar la aparición de la siguiente luna, lo que significaba que el cambio de alfas estaba próximo, ese día me entregarían un collar que aumentaría mis habilidades y me mantendría conectada con la manada y con el futuro alfa, por lo que debía cuidarlo con mi vida. La verdad es que tanta información y tanto cambio me tenia el estomago hecho un lio, no sabia que pasaría después, como reaccionarían todos al ver que la futura luna era solo una persona normal que proviene de una familia mestiza y no una nocturna como a ellos les hubiera gustado.

En todos estos días mi amiga Bri fue un gran apoyo para mi, se quedo conmigo y estuvimos conversando por mucho tiempo, hicimos una pijamada, comimos hasta hartarnos de chucherías, vimos muchas películas y nos arreglamos las uñas y demás.

- Bri, no se que habría hecho sin tu apoyo y tu ayuda, si no estuvieras conmigo creo que me habría vuelto loca -Abrace a Bri como por quinta vez consecutiva.

- Vamos Ali, que tampoco es para tanto, es lo que hacen las amigas - me devolvió el abrazo y al separarse arregló mi cabello - venga, debes estar presentable para la reunión de hoy, además tendrás un conjunto estupendo, digna de toda una luna - sus palabras me hicieron reír, al final la que estaba mas emocionada con todo esto era Bri, yo solo quería ocultarme en mi habitación hasta que todo esto pasara, como si se tratada de un sueño.

Mi madre me había confeccionado mi vestido, dijo que la primera aparición de la luna debía dar un aspecto de fuerza y elegancia, los nocturnos vivían de su apariencia por lo que la primera impresión era lo mas importante.