𝕀𝕟𝕗𝕚𝕝𝕥𝕣𝕒𝕥𝕖 (Gaara y Tú)

⁵

—_____ — la voz gruesa de Sasori habló — ______ es hora

Me talle los ojos y me levanté sentandome en la cama mire a Sasori quien se encontraba a mi lado, sus ojos aún estaban llorosos.

—Todo saldrá bien — dije estirando mis brazos y dando un gran bostezo, y me acerque a darle un pequeño beso en la mejilla a el — enseguida pude notar una sonrisa, lo cual me pareció muy lindo

—Bien tengo todo elaborado — sonreí — no pasará nada de lo que tengas que preocuparte, me encantaba este lado de Sasori, por qué cuando era despiadado hasta a mí me daba miedo.

Me levanté sacudí mi ropa y tome mi mochila, que ya estaba preparada, tome una bocanada de aire dejando salir después un suspiro, Sasori me miró y me dedico una sonrisa una tierna, solo nos iremos el y yo, pronto seremos solo los dos.

Salimos de la habitación afuera se encontraba Deidara quien nos miraba raro y soltó una pequeña carcajada.

—Callate, no hables — dijo Sasori

—Lo lamento Sasori pero me da mucha risa como eres con los demás (descripción gráfica👿👹👺😠😤😒)
Y como eres con ________ (🥺😍☺️😳❤️😻)

Solté una risita, era toda la verdad eso, pero me gustaba mucho.

—Basta — dijo Sasori molesto y salimos de aquel lugar que había podido llamar hogar desde hace mucho tiempo, pareciera que fue ayer cuando llegue, no soy muy mayor que digamos, pero si lo suficiente para cuidarme sola, pero no solo soy yo si no también lo que llevo dentro.

Después de caminar varias horas llegamos a aquel desierto, mire a Sasori y Deidara quien me veía con tristeza igual.

Tome mi mochila — Aquí se separan nuestros camino, los mantendré al tanto de lo que suceda — ellos asintieron —nada malo puede pasar

Ellos sonrieron y comencé a correr en dirección de aquella entrada, al correr mire de nuevo hacia atrás a aquellos largos árboles mientras las figuras de mis amigos desaparecían, tenía miedo, de pronto caí, un ardor recorrió mi rodilla la mire tenía mucha sangre no me importó, seguí corriendo hasta llegar a ver dos grandes rocas con una grieta enmedio, varios hombres me miraron.

—Ayuda por favor — dije desesperada —Ayudenme — dije — me vienen persiguiendo unos tipos, acaban de asesinar a mis padres — comencé a llorar, los hombres se miraron unos a otros mientras pude notar a un pelirrojo mirarme de forma extraña, todos tomaron sus armas y apuntaron hacia mi.

Me tire de rodillas al piso y con las manos hacia arriba.

—Solo necesito un poco de ayuda — un tipo se acercó a mí y comenzó a buscar en mi cuerpo sin sacar ninguna arma

—Esta limpia — dijo el hombre mientras me tomaba del cuello

—Bajala, si necesita ayuda la ayudaremos — oí la voz ronca del pelirrojo

—Pero Lord Kasekage — dijo uno — si es una trampa

—Es una chica indefensa sin armas, llévala con el médico, pero no dejes de vigilarla, después que se vaya

Asintió mientras me tomaba del brazo, agache mi cabeza hacia el Kasekage, era por quien venía, esto va a ser más sencillo.

—Muchas gracias Lord Kasekage — dije limpiando mis lágrimas con el ante brazo, el se limito a mirarme.

Ya estaba aquí, no podía echarme para atrás

Al cabo de unos minutos me encontraba en la cama de un hospital, mientras limpiaban mis heridas.

Enseguida entro el kasekage, atrás de él una chica de cabello amarillento y otro vestido de negro con la cara pintada, los tres me miraron raro mientras el Kasekage me examinaba.

—¿Quien eres y por qué has venido? — la arena comenzó a girar a su alrededor mientras esté me miraba desafiante.

—Hui de casa por unos tipos me querían matar han matado a toda mi familia y yo solo corrí llegué hasta aquí, no se en donde estoy — dije confundida y asustada, mientras yo solo encogia mis piernas

—Gaara basta — dijo la chica

—Solo déjame quedarme unos días y me iré de aquí — dije

—Una semana, es todo lo que te doy, después no quiero que vuelvas, oíste — me dijo y yo solo asenti nerviosa mientras por dentro estaba victoriosa de que lo había conseguido