Lady Stark

Capítulo 73

Lady Stark

Capítulo 73

Eddard Stark estaba preocupado. Pensó que descansaría más tranquilo cuando lucharan contra los caminantes blancos. Tontamente pensó que encontraría alivio una vez que los caminantes fueran derrotados. Solo había dos opciones. Moriría luchando contra los monstruos o volvería con Cersei y su hijo pequeño. Esperaba que Bran regresara una vez que terminara la guerra. Ned no tuvo tal respiro. El señor de Winterfell aún podía recordar cuando vio a su hijo mayor en la cama con la niña Targaryen hace unos meses. Se desesperó toda una noche pensando en la imposibilidad de la situación. Ned intentó razonar con su hijo. Después de todo, Jon siempre fue razonable, si no terco.

Lo intentó, tal vez Cersei hubiera tenido mejor suerte. Siempre se las arreglaba para que los niños hicieran lo que le pedía ,Bran para bañarse y Robb no tenía bastardos. Ned entonces pensó en su hijo mayor montado en un jodido dragón. 

Quizás eso fue lo más preocupante. Solo los Targaryen montaban dragones. Parecía que solo Tyrion y él entendían la magnitud de la situación. La Gente Libre pensaba que su hijo era un hombre intrépido. Los señores de Westeros pensaban que era digno de montar un dragón y también valiente. Los inmaculados pensaban que su hijo era un buen guerrero. Muchos hombres le tenían envidia y las esposas de muchos acudieron en masa a su lado y lo buscaban para pasar una noche con él. Jon, por supuesto, disuadió sus avances. Se acostó con una reina todas las noches desde la batalla. Ned sabía, por supuesto que sabía que su hijo abandonaba la tienda en cuanto se le presentaba la oportunidad. Lord Stark ya no podía tener la pretensión de compartir alojamiento. Jon levantó su propia tienda de campaña tan pronto como él y los Targaryen se reincorporaron al campamento.

Eddard recordó la mañana después de la gran batalla. Después de que Jon y la realeza montaron los dragones. Tyrion se había mostrado sombrío, pero esperó hasta que estuvieron solos en la tienda. Jon no estaba a la vista. Robb entretuvo al príncipe Aegon. Visitaron a las mujerzuelas  al igual que muchos de los señores westerosi y hombres libres. Fue una bendición que el príncipe no pareciera tener ninguna intención de buscar a su tía todavía. Estaba él y su cuñado en la tienda. Debían marchar a la Fortaleza de Craster en unos días. Eddard quería tener a los más heridos y sus señores llegando primero a Westeros.

Tyrion le había ofrecido vino que tomó con mucho gusto. Su cuñado se sentó frente a él y le preguntó sin preámbulos: "¿Con quién te acostaste  Eddard? ¿Quién es la verdadera madre de Jon?".

"Una moza de taberna, se llamaba Wylla" . Respondió Ned. No hubo más tiempo para la timidez. Tyrion siempre había sido muy inteligente. Necesitaba que Cersei le diera sentido a esta situación.

Tyrion negó con la cabeza, "Ese chico tiene tu apariencia. Puede ser tuyo, pero solo si te acuestas con una chica bastarda de Targaryen, lo cual dudo. Todos los bastardos de Targaryen se sentían cómodos en la corte de Westerosi, no con crecer como moza de taberna o prostituta ".

Ned miró a su cuñado y permaneció en silencio.

"Ese chico montó un dragón frente a nuestros ojos. El campamento puede creer que es lo suficientemente valiente como para montar un dragón. La reina y el príncipe pueden creer eso también. Él es un Targaryen. Solo los Targaryen montan dragones; nadie más puede hacerlo. Nadie más lo ha hecho. Ese chico tiene sangre Targaryen ".

Ned podría haberle mentido a Tyrion, pero el peso de este secreto era demasiado abrumador. Temía por su hijo. Tyrion era digno de confianza y astuto, a veces más astuto que Cersei.