Agua con chocolate

05

    —Ya te dije que está bien...

    —I'm really sorry! I know he's immature and doesn't think about what he does, but believe me... (¡Realmente lo siento! Sé que él es inmaduro y no piensa en lo que hace, pero creeme que... Que... Que...)— No parecía tener una excusa para eso— I'm so sorry, on behalf of ame (Lo siento muchísimo, en nombre de Ame).

  Canadá ya le había comprado un helado y se había asegurado de pagar todo lo que ella quería. En un inicio México trató de detenerlo, pero se rindió al ver los ojos del chico "Por favor, debo hacer esto" decían.

  Se detuvieron un momento en algún parque, sentandose en una banca. Todo era perfectamente tranquilo, quizás ninguno de los dos hablaba pero eso no significaba que se sintieran incómodos, México y Canadá podían relajarse... Hasta que algo detrás de ellos saltó.

    —Quick Canada, the world needs you! (¡Rápido Canadá, el mundo te necesita!)— De entre los arbustos, Estados Unidos brotó, cómo mala hierba.

    —De quoi parlez-vous? (¿De qué hablas?)— Gritó Canadá sorprendido y asustado, pero dispuesto a ayudar.

    —Come on, the world is me and I need help! (¡Vamos, el mundo soy yo y necesito ayuda!)— Sin preguntar arrastró a Canadá lejos del parque.

  México ni siquera se molestó en intentar detenerlos, solo siguió comiendo su helado; Estados Unidos es infantil y egoísta, siempre que ella se quedaba sola con Canadá, él aparecía de la nada y se llevaba a su hermano.

  Era claro que ambos tenían una obsesión por el otro.

    —Я сказал ему, чтобы он этого не делал (Le dije que no lo hiciera)— México respiró el helado, exhaladolo por la nariz. Ella golpeó su pecho, mientras tocia.

    —¡CHINGADAMADRE...!

  Luego del susto, México volteó a ver a su derecha, que antes estaba vacía, pero de alguna forma ahora había alguien.

    —¿Qué chingados haces aquí, Rusia?— México apretó los dientes, evidenciando su molestia por el susto.

    —Это просто совпадение, не принимайте этого внимания (Solo es una casualidad, no le tomes importancia)— Dijo con su voz monótona.

  ¿Casualidad? Acaba de decir que le advirtió a USA no hacer "eso" es obvio que venía con él.

  Pero sin muchas ganas de reprocharle nada, continúo comiéndo su helado; aún que al hacerlo, le recordaba la sensación anterior, de respirar algo tan frío por un susto.

«Canny lo compró para tí, acábatelo»

  Con ese pensamiento acabó su postre.

    —¿Te quedarás aquí?— Le preguntó a Rusia, levantándose para tirar la basura que le quedaba.

    —Нет (No).

    —Bueno, ¿Suerte?— Se preguntó si debía invitarlo a caminar.

  México comenzó a su viaje de vuelta al edificio aburrido, hasta que notó que Rusia la seguía.

«Es igual de aterrador que Urss»

  Pensó algo incómoda.

    —¿A dónde vas?— Volteó Medio cuerpo.

    —Где-нибудь (A algún lado).

«Aun que es de menos palabras...»

  Sin ganas de discutir (Aun que no habría mucho que decirle) México comenzó a caminar sin rumbo, comprobando que Rusia la seguía.