1°.

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Otro día normal tenía el omega WangJi quien estaba preparando a su hijo para irse a la escuela y él a trabajar como todos los días.

"Bien mi amor, ya estás listo", le dijo una vez termino de peinarlo.

"Gracias mami", se bajo de la silla y caminaron al comedor para desayunar.

Salieron del departamento, rumbo a su destino correspondiente, tomaron el autobús para ir a la escuela del pequeño pero como siempre, un alfa trato de propasarse del omega.

Le tocó ir parado porque ya no habia lugares pero su hijo si se tomó lugar en el último asiento disponible.

Todo estaba bien cuando un tipo comenzó a pasar una de sus manos por su espalda de forma lasciva, incomodando al omega y como pudo se alejo del tipo.

El trayecto fue un tanto incómodo pero soportable hasta que algo fue la gota derramó el vaso, ese tipo se sobrepasó y fue cuando WangJi reaccionó de manera agresiva a aquello.

"¡¿Qué rayos te pasa imbécil?!", le grito enojado y le soltó una bofetada.

El hijo de WangJi se dio cuenta de eso y ayudo a su mamá obligándolo a sentarse con él en sus brazos, la presencia de aquel pequeño fue la tranquilidad del omega.

Cuando llegaron a la parada correspondiente, tanto madre como hijo bajaron del autobús, después de aquel momento horrible volvió la calma y WangJi dejo a su hijo en la escuela.

"Portate bien Sizhui, nos vemos al rato", le dio un beso en su coronilla.

"Si mami", dicho esto, entró al instituto.

WangJi miró su reloj y vio que todavía tenía tiempo para llegar a su trabajo, no quedaba tan lejos de la escuela de su hijo por lo que se fue caminando.

Llegó sano y salvo a la cafetería, saludo a sus compañeros y se colocó en su lugar una vez se puso su delantal.

Acomodó algunas cosas en el mostrador para después escuchar que la puerta se abrió pero no volteó en ningún momento.

"Buenos días", saludo aquella persona de manera amable.

"Buenos días joven, permítame un momento, enseguida lo atiendo", lo dijo terminado de acomodar.

"Claro, no te preocupes cariño", aquel apodo estremeció al omega pero se supo controlar.

Una vez terminó de arreglar las cosas, tomó una libreta y bolígrafo para tomar la orden de inmediato.

"Solo dame un express por favor", lo dijo de forma amable y un tanto coqueta.

"Claro señor, enseguida se lo traigo", camino a la cafetera y ahí hizo todas las cosas hasta que termino.

Cuando se lo llevó, pudo al fin mirarlo a la cara, olvidalo, fue el peor error.

"Oh, nos volvemos a ver Lan Zhan", aquel apodo ya se le habia olvidado.

Trato de controlar las ganas que tenía de golpearlo, estaba en su trabajo y no era ético hacerlo tampoco.

"Serían 2 yuans", ignoró todo de él.

"Oh, Lan Zhan, que malo eres, ¿acaso ya me olvidaste?", se hizo el herido.

"Conocí a mucha gente joven, es ilógico que recuerde todos los rostros", lo dijo sacando cambio.

"Lan Zhan...", no lo dejo terminar la oración.

"No me diga así, no somos cercanos", le dijo un tanto indignado, "aquí tiene, que tenga un lindo día", lo dijo por cortesía ya que el día de él se habia ido por el caño cuando lo volvió a ver.

"Me voy pero no creas que te dejaré huir, te volví a encontrar y no planeo dejarte ir de nuevo", aquello le puso la piel de gallina a WangJi, eso es malo y lo sabía.

"Suerte con eso joven Wei", le dijo al final, ya no podía seguir fingiendo que no lo conocía.

"Ya verás que si mi hermoso omega Lan Zhan", le guiño el ojo para salir de la cafetería.

Finalmente, se derrumbo en el piso, se controló por completo de lanzarse a él para impregnarse de sus feromonas y decirle que tenían un hijo, no, nunca se iba a enterar de eso.

Logró calmarse y volvió a trabajar hasta que la hora de ir por su hijo llegó, por lo regular lo llevaba con él a la cafetería.

Ya iba a llegar cuando el sonido de un claxon lo asusto y miró para gritarle a la persona que le había hecho eso, se arrepintió casi de inmediato.

"¿A dónde vas Lan Zhan?, si quieres te llevó", era lo que menos quería que hiciera.

"No es necesario", dicho eso, huyó de aquel alfa lo más rápido que pudo.

Logró perderlo y soltó un suspiro de alivio, llegó a la escuela para recoger a su hijo.

Logró visualizarlo y no venía solo, estaba acompañado de alguien más lo cual le sorprendió ya que no suele tener muchos amigos.

"Sizhui", lo llamó y este al verlo corrió hacia el.

"Mamá", lo abrazo con fuerza y este lo recibió amorosamente.

"Hola mi A-Yuan, ¿cómo te fue hoy?", acomodó su cabello de la frente.

"Bien mami, hoy llegó un nuevo alumno y me hice su amigo", lo dijo animado a lo que el omega solo pudo sonreír.

"Me alegra cariño, ¿y cómo se llama tu nuevo amigo?", no pudo responder la pregunta el pequeño porque aquella voz se hizo presente de nuevo.

"RuLan", llamó a alguien aquella persona.

"Será mejor que nos vayamos hijo, no puedo tardarme", tomó su mano y lo jaló sin mirar detrás de él pero algo lo detuvo y eso lo obligó a voltear.

Esto ya no le estaba gustando nada, tenía que alejarse de aquel alfa que le hizo daño lo antes posible.

Reencuentro (XianWang) [Omegaverse] AU ModernDonde viven las historias. Descúbrelo ahora