Capítulo 6

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Tras aquel extraño y repentino suceso, las tortugas quedaron confundidas, Donatello se acercó claramente con la pelinegra en brazos, el equipo miraba como la azabache trataba de mover el tanque con todas sus fuerzas, pero era prácticamente imposible moverlo, cuando la enmascarada se acercó trataba de ayudar igual, pero en el instante en que puso sus manos en el tanque una imagen llego a su cabeza y miro hacia una de las ventanas rotas para ver como salía una chica de cabello castaño con una computadora cargando, claro que al salir esta se veía pálida, obvio por el tremendo susto del impacto del tanque en el lugar donde ella estaba escondida

-Nota para mí, no entrar al sistema de los tanques- dijo la castaña mientras se enderezaba y miro al par de chicas –Ja!, en sus caras!, les dije que estaría bien, claro que ignorando la parte del tanque mortal que casi me mata- dijo sonriendo confiada pero antes de poder decir algo sintió como la azabache la abrazo con fuerza –Ya, ya, ya, estoy bien, No me paso nada- le decía mientras le daba leves palmadas en la espalda – y perdiste tu audífono, tendré que hacerte otro que sea aprueba de agua la próxima vez- termino de decir cuando la azabache se separó de ella

-No nos des esos sustos!- le dijo la enmascarada acercándose más relajada para revolverle el cabello sonriendo –increíble que esa cosa no te aplastara- dijo con una sonrisa mientras se recargaba en la cabeza de la castaña haciendo notar la diferencia de altura

-Ya sabes que no se libran de mi tan fácil- volvió a decir la castaña para quitar a la enmascarada de sobre ella, aunque veía la mirada de preocupación de la azabache y solo le acaricio la cabeza con suavidad –Estoy bien, solo grite por el susto, pero logre cubrirme y estar completamente a salvo- le explico con una sonrisa para ver cómo está la volvió a abrazar

-HABIA ALGUIEN AHÍ?!?!- Gritaron todos los del equipo cuando bajaron de los postes de luz mirándolas, aunque se asustaron cuando la enmascarada y la azabache les lanzaron una mirada de muerte al grupo más que nada porque eran los culpables

-Sé que normalmente eres pacifica, pero- sonreía la enmascarada con un cierto toque de muerte mientras miraba a las tortugas –Creo que si se merecen una muerte rápida- dijo al final mientras los apuntaba con su katana

-No rápida- hablo la azabache con un tono bajo pero mientras caminaba y los miro bastante seria –Muerte Dolorosa- dijo con un tono sombrío, el cual si fue lo suficientemente alto que lo escucharon todo el equipo

-Sabía que hablabas!, aunque da miedo- dijo victorioso Leonardo pero aun así un poco asustado, pero al ver como esta salto hacia ellos esperaba el impacto, pero su sorpresa fue ver como la se detuvo justo frente a leo –eh?, cambiaste de opinión sobre matarnos?- pregunto nervioso pero cuando vio como le salían como pequeñas chispas de su cuerpo se preocupó un poco – O-Oye, que te- fue interrumpido cuando Rafael lo aparto de la azabache con brusquedad

Cuando la tortuga de enorme tamaño aparto a su hermano de estar cerca de la azabache vieron como esta fue electrocutada, sacándole un gran grito que reflejaba su dolor, pero una vez acabo eso la azabache cayó de espaldas como si la hubieran apagado, la castaña corrió hacia ella levantándola un poco, era como si la azabache estuviera desmayada o más bien apagada

-la única persona que le puede hacer eso es- dijo la enmascarada cuando vio una luz que provenía detrás de ella, al darse vuelta miro como era un portal de gran tamaño, y como de este salía Big Mama junto con los botoneros y su leal aunque misterioso guardaespaldas –Doña Araña- dijo al mirar a la mujer peliblanca

-Hola querida- hablo sonriendo la peliblanca mientras que camino unos pocos pasos para verlos –Lo siento, tendrás que seguir tu trabajo sin mis juguetes- dijo para chasquear los dedos y sus botoneros rápidamente rodearon al par de chicas dejando a la enmascarada fuera de aquel circulo humano

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