𝙃𝙖𝙨𝙩𝙖 𝙦𝙪𝙚 𝙦𝙪𝙚𝙙𝙚́ 𝙨𝙤𝙡𝙤 𝙮𝙤 ꧁𝚂𝚊𝚒𝚘𝚞𝚖𝚊/𝚙𝚛𝚎𝚐𝚊𝚖𝚎꧂

Prólogo.

Todo estaba nublado.

Es ese típico día que está nublado, con nubes oscuras que parece que lloverán en cualquier momento, y ese frío que te obliga a llevar un abrigo. Ese típico día que suelen odiar todos, pero yo no. Ese frío, esa apariencia de aud va a llover, me satisface de una manera ¿extraña? No se si es normal para otros, aunque para mi es ligeramente agradable.

Me levanté de la cama sin ánimos, ya que era lunes. Debía regresar a mi clase llena de gente mugrosa, sin gusto. Era un año nuevo, así que sería una oportunidad para conocer gente nueva, eso piensan todos.

Me vestí con mis pantalones negros, camisa blanca con corbata verde y chaqueta negra. También me puse mi gorro negro. Bajé las escaleras para desayunar algo, lo primero que viera, pues no tenía ganas de cocinar nada. Mi tío estaría fuera de casa por un tiempo, así que me las apañaré solo. Agarré una pequeña maleta negra con un llavero de danganronpa y salí de la casa, para ir camino a aquella escuela.

Al llegar, pude ver bastante gente, a la cual ignoré. Llegué a un tablón donde me decía dónde estaba mi clase y subí sin rodeos. Era en la planta 3, así que debía subir varias escaleras. Al llegar el aula estaba vacía, así que aproveché para sentarme al fondo, lugar en el que podría leer plácidamente sin destacar. Como aún faltaba media hora para las clases, aproveche para ponerme a leer. Habia llevado un libro de detectives y asesinatos en serie.

Por desgracia esa tranquilidad no duró mucho.

Mientras leía tranquilamente, pude ver a un chico entrar en el aula. Era bajito, con el pelo morado con forma de medias lunas. Le llegaba por los hombros, y visto a sus movimientos parecía ser alguien tímido. Venía acompañado de otro chico, él era más alto, tenía unos cuantos piercings y el cabello verde. Al parecer venían platicando cómodamente, así que solo les eché una mirada y continué leyendo.

Al rato la clase se llenó de gente, todos se sentaban en sus mesas y hablaban de diversos temas.

𝗦𝗶𝗻 𝗻𝗶𝗻𝗴𝘂𝗻𝗮 𝗱𝘂𝗱𝗮 𝘆𝗼 𝗻𝗼 𝗲𝗻𝗰𝗮𝗷𝗼 𝗮𝗾𝘂𝗶̀.

Me sumergí en la lectura, intentando ignorar el ruido que había a mi alrededor hasta que alguien me tocó el hombro, haciendo que me sobresaltara por unos segundos.

Le miré con una sonrisa forzada.

Sin previo aviso extendió su mano y sonrió.

— Soy Kaito momota, ¿tu eres? — Al parecer se estaba presentando, ¿no tiene nadie más con quien hablar o qué?

— Yo soy Suichi Saihara, supongo que es un placer — Le sonreí un poco forzado y mire hacia el libro, mostrando total desinterés.

Derrepente el colocó una mano alrededor de mis hombros y me levanto de mi asiento. Le miré algo enojado por esa acción, mientras él estaba con esa sonrisa, esa horrible y estúpida sonrisa.