Bienvenido a Mi Mundo (EreRiren )

En Contra

— Ya estoy aquí... llegue tan pronto como pude... ¿cómo está? —

— Ya está mucho mejor, solo fue un roce de bala en el brazo y uno en él piel, le puse algunas vendas y le suturé, está anestesiado así quizá duerma hasta mañana —

— Vale... gracias Connie.—

Un chico de cabeza rapada y ojos claros se levantó para despedirse dejando a un castaño y una pelinegra en la habitación de la casa de Eren, donde un rubio descansaba en su cama mientras él mayor estaba recargado en la pared y la pelinegra lo miraba fijamente mordiendo sus uñas.

— ¿donde estabas? —

— Eso no te importa

— ¡Claro que me importa! ¡Nos dejaste allí en casa de Jean como si nada luego de haber matado a un compañero de Reiner! ¡Era seguro que nos atacarían y tú te vas como si nada! ¿¡QUE CARAJO PASA CONTIGO!?—

Aquel castaño ojiverde que hasta unos momentos había estado sonriendo como idiota, ahora tenía el ceño frunció y los brazos cruzados, manteniendo su mirada esmeralda en aquella pelinegra.

— No soy su puto padre Mikasa, no soy un puto niñero que los va a cuidar siempre, maldita sea ¡Ya basta de depender de mi! ¿¡El día que me maten que mierda será de ustedes!? Yo también tengo derecho a ser feliz y hacer mi vida—

— A la mierda con eso Eren, estamos juntos en esto y si a uno se lo lleva el Carajo, a los demás ¡¡TAMBIÉN!! — La chica pateó una silla de escritorio la cual tenía enfrente lanzándola hasta el otro lado de la habitación mientras gritaba aquellas palabras. El castaño solo rio socarronamente y se dio la vuelta dándole la espalda

— No Mikasa, Si a mi me matan, el plan es que ustedes salgan de esta vivos ¿qué sentido tendrá haber matado a todos esos bastardos si al final tú y ese idiota se darán vencidos tan pronto me mate? ¿Que sentido tendrá haber matado a las familias de nuestros enemigos?... Ya me canse de que no piensen por ustedes mismos, ya estoy harto de tener que darles órdenes de como y que vivir... ya me canse de todo esto mikasa... — Eren hizo una breve pausa dándose al vuelta para mirar a la pelinegra quien lo miraba con lágrimas en los ojos — Yo también tengo derecho a ser feliz... yo no tengo por qué estarlos cuidando... — Eren se acercó a Mikasa sin dejar de mirarla — Ustedes pueden irse a la puta cuando quieran, Jean les dijo que pueden... pero recuerda que le pasa a los soplones...

— No puedo creer que me estés diciendo todo esto solo por aquel tipo con el que te fuiste... —

— ¿Que? —

— No pienses que soy idiota Eren... sé qué hay algo entre tú y ese maldito enano, desde que los rescatamos del enfrentamiento has estado más raro de costumbre y sé perfectamente que te fuiste dejándonos para ir a estar con el

— No te metas con el... ¡el no tiene nada que ver en esto!—

— ¡¡CLARO QUE SI!! ¡¡No es posible que elegirás a un desconocido antes de tu familia Eren!! ¿¡No te das cuenta!? Nos dejaste para ir con ese bastardo a foll—

— ¡¡¡Ya basta Mikasa!!! Siempre estoy con ustedes como putos niños... ya me toca ser feliz y si para ser feliz debo estar a su lado entonces no dudaré en quedarme con él — Eren había tomado del cuello a la chica arrojándola a la cama sin apartar su vista de ella, suspiro profundamente y salió de la habitación sin más tomando tu teléfono.

EN OTRO LADO...

— Ya llegue ... —

— Levi, Dios mío estaba preocupado ¿donde estabas? —