Capítulo 14

735 22 2
                                    

¿Solo un sueño?

Carlota.

El sonido de su alarma la hizo removerse en su cama con fastidio, la luz del brillante sol pegaba en su rostro.- mierda... asquerosa mañana.- se levantó con pereza y se dirigió hacia donde su despertador.- estupido...
 
Una vez completamente despejada giro en su cama notando que estaba vacía.- que... - bajo de esta buscando cualquier rastro de la menor pero no lo  había.- acaso... ¿fue todo un sueño?.- se sonrojo recordando aquello.- no puede ser eso posible... se sintió tan real.- toco sus labios con la punta de sus dedos.

- podría jurar el sabor de su boca aún en mi.- se sentó en la orilla de la cama un poco desanimada, un ruido en la cocina  la saco de sus pensamientos.

Bajo con calma hasta que diviso a la rubia frente a la estufa vistiendo una camisa holgada que cubría hasta la mitad de sus gluteos dejando ver sus muslos, un calor extraño comenzó a crecer entre sus piernas.

Se acercó con cautela por detrás, una vez cerca pudo notar chupones en ambos glúteos y piernas confirmando la noche anterior, una vez que estuvo detrás la tomo por la cintura.- buenos días.- hablo un poco ronca en el oído de Yolotl provocando que esta se sonrojara.

-Buenos di-as... Lota.- contesto con nerviosismo.- ¿por que no estabas en la cama?.- hablo en un tono dominante.- Quería pre-pararte el desa-yuno...- hablo sumisamente.

La castaña soltó una pequeña risa.- ¿Te gustó lo de anoche?.-  la mano de Carlota se deslizó desde el muslo de Yolo hasta su vientre bajo.- si...- respondió en un suspiro.- me alegro escuchar eso.- comenzó a esparcir besos húmedos en el cuello de la rubia.

la mayor recorrió toda su mano hasta los suaves pechos de la rubia.- Car-lota...- soltó en un gemido al sentir que acariciaba su seno derecho.- ¿quieres que pare?.- hablo mientras su mano contraria se adentraba a los patines de la menor.- no hare nada si no quieres.- detuvo sus movimientos en seco.

la tención se sentía en el aire.- podemos pasar a otro lugar....-hablo la rubia con un enorme sonrojo.- lo que digas.- con ambas manos la hizo voltear quedando cara a cara, notando su rostro totalmente rojo y sus labios hinchados, aquella simple expresión hacia poner húmeda a Carlota.

se acercarón a la barra de la cocina donde la castaña cargo a la menor con ambas manos y la acomodó encima .- te confieso... tus piernas me vuelven loca.- comenzó un camino de besos desde su pantorrilla hasta sus muslos.- esta parte de ti  es muy sexy...- deposita un par de besos en las marcas moradas.

Con sumo cuidado saco la enorme camisa de Yolo dejando sus pechos al aire.- no habia notado lo lindos que son.- se acercó a sus pequeños botones rosados delineando los con la punta de su lengua.- tan dulces.- hablo sin despegarse.- y suaves.- brindo mordiscos sutiles que desbordaba los agudos gemidos de la chica.

-Lo-ta...- soltó entre jadeos, mientras la mayor empezaba a crear chupones en sus pechos.- no quiero... que nunca estés con alguien más de esta manera.- hablo Carlota algo dominante en su oído.- no te harán sentir como yo lo hago.- una vez separadas abrió sus piernas haciendo de lado sus bragas dejando a la vista su intimidad húmeda.- chupa.- ordenó mientras acercaba un par de dedos a su rostro, a lo que Yolo respondió obedientemente metiéndose los dedos de Carlota a su boca.

- nunca estarás tan mojada para alguien como lo estas para mi.- arrebato sus propios dedos y con estos húmedos paso ambos por su vulva jugueteando un poco con el clítoris de la rubia.- no quiero que nadie te escuche desvanecer de placer como ahora.- Carlota se sentía excitada ya que los gemidos y jadeos de la contraria se encontraban tan cerca.

-Lo-ta... me-telos por fa-vor .-apenas pudo hablar.- esta bien,  ayudaré con esto...- paseo sus dedos por el rededor de toda su vagina.- di que eres mía y te haré tocar el cielo.- soltó maliciosamente con una sonrisa de lado.

La menor bajó su cabeza y muy despacio, casi en un susurro se pudo escuchar.- Soy.. toda tuya.- Carlota se sonroja ante tal oración adentrando sus dedos a la menor.- Adoro tu cara en este momento.- comenzó penetraciones suaves haciendo temblar a la menor.

-hmmm... más ra-pido...- pidió la rubia.- jajaja... tan sexy pidiendo por más.-  aumento sus movimientos mientras la tomaba del rostro robándole un beso.

-aah... hmm lota.- respondía entre el beso.- más...- subió uno de sus pies a la barra quedando completamente expuesta.- por fa-vor.- suplico en un tono agudo a lo que la contraria respondió intensificando sus embestidas.

Después de unos segundos el cuerpo de la más pequeña comenzó a temblar en señal de su próximo orgasmo, se abalanzó sobre Carlota robándole un salvaje beso mientras el éxtasis recorría su cuerpo.- Lota... ghmm.- solto un gemido sonoro.- ah... lota.. ah.- su respiración entre cortada, su hermosa cara extasiada y sus rodillas temblorosas, aumentaron el ego de la castaña.- tomemos una ducha.- ordeno dominante la mayor.

Más tarde...

-aah.. mh-g.- gemia la rubia contra la pared.- pro-metis..te que se-ria... solo u-na ducha.- hablaba entre jadeos Yololt mientras los dedos de Carlota la penetraban.- mentí... tal vez un poco.

Ambas se encontraban en la ducha siendo empapadas por el agua del grifo, La ojiverde estaba contra la fría pared del baño mientras Carlota se encontraba a sus espaldas tomándola con una mano por la cintura y con la otra embistiendo sus dedos en la intimidad de la menor.- si-siento que... aah Carlota... mierda... no pa-res.. hmmm.

Al contrario de la noche anterior la rubia ya no reprimía sus gemidos.- en ese caso...- hablo la castaña poniéndose de rodillas.- hazlo en mi boca.- comenzó a lamer con la punta de su lengua el clítoris de la más pequeña sin deja de embestir.- hmmm... si... ya no pue-do más.- tomo la cabeza de la mayor intensificando el oral.

Una ola de placer distinto Inundó su cuerpo, su vientre coquilleaba y sus rodillas temblaban más que la noche anterior.- aa-ah.- un gemido agudo anuncio su orgasmo junto con una descarga abundante de fluidos.- mierda... mira esto... parece un grifo.- no paraba de expulsar fluido, salían disparados al los pechos de Carlota.

Una vez termino la menor, Carlota pasó su lengua por todas sus piernas  probando un poco de aquel dulce néctar, al levantar su mirada divisó a la rubia cubriéndose la cara con ambas manos.

Se levantó a su altura quedando  cara a cara.- ¿Que sucede? ¿Te lastime?.- hablo con preocupación al no recibir respuesta de Yolo.- Lo siento Lota... creo que me e orinado.- solto débilmente.

La castaña la miro con confución.- Pero que dices... - soltó una ligera risa al captar la poca experiencia de Yolo.- Cariño... no te orinaste.- beso sus labios con ternura.- se llama squirt, sucedió por que tu cuerpo se sentía muy bien.- la abrazo por la cintura.- no tengas vergüenza... lo hiciste genial y te confieso que me siento halagada al producir esto en ti.

-se giro tomando un poco de shampoo entre sus manos para huntarlo en el cabello de la rubia.- ¿nunca antes habías experimentado uno?.- lavaba su cabello con calma.- no...- susurro completamente avergonzada.- pues me alegra que lo sepas ahora, por que vendrán muchos más.- esto último lo susurro en su oído a lo que la menor respondió con un pequeño golpe en su hombro.- claro si tu me lo permites.- hablo sin dejar de masajear su cabeza con la abundante espuma.

Cuando ambas terminaron su ducha se dirigieron de nuevo a la cama pero esta vez en la habitación de Yolo.- Sabes... no e cumplido la promesa de pintar el cielo estrellado aquí.- la castaña miraba al techo mientras la menor se acurrucada en su pecho.- no es necesario, con tu compañía me basta.- la rubia se adherio a la contraria como un koala.- lo e prometido y es mi deber hacerlo.- Carlota volteo correspondiéndole el abrazo a la ojiverde.- esta bien... deseo algo muy lindo.- cerro los ojos se sentía un tanto cansada.

-¿Volverás a dormir? No son ni las dos de la tarde.- respondió la Morena.- estoy un poco exhausta, además me gusta dormir contigo.- contesto sin abrir los ojos.

Ambas decidieron tomar una siesta pero esta se vio interrumpida por una bola de pelos que se adentraba en su abrazo.- pelusa ven aquí, duerme un poco con nosotra.- acomodo al pequeño gato entre ambos cuerpos.

Durmieron abrazadas, corazón a corazón, se sentían como si después de mucho tiempo estuvieran devuelta a en su hogar.

Placer, Dolor y Gloria.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora