¡¡ꜱᴏʀᴩʀᴇꜱᴀ!! [ＫｏｏｋＮａｍ]

01. I'm Fine

"NUESTRO FUTURO SOLO
TENDRÁ FELICIDAD."

Kim Namjoon era el típico chico que su familia siempre creyó que sería un gran alfa. Pero, para su suerte o desgracia, la vida le tenía otro destino. La familia sufrió una gran decepción aquella tarde en la que el único miembro de la manada sin rango se presentó como omega a los quince años. Sin embargo, tras un primer momento de sorpresa, su madre y su hermana menor lo apoyaron incondicionalmente y juntos decidieron mudarse a un lugar lejos de prejuicios.

Namjoon, con el tiempo, se convirtió en un omega con un aroma único y exquisito a cerezas. Sus facciones se suavizaron y su figura cambió, destacando ahora una cintura delgada y estilizada.

A diferencia de otros omegas, Namjoon no tardó mucho en encontrar a su pareja destinada: el alfa Jeon Jungkook, un hombre que parecía tallado por los mismos dioses del Olimpo, la envidia de muchos alfas.

—Namjoon, cuidado, tienes los cordones desatados —le advirtió una de sus amigas de la escuela, a unos metros de distancia.

—¿Qué dijiste...? —preguntó distraído, antes de tropezar y derramar su bandeja de comida sobre quien pasaba frente a él.

La cafetería quedó en completo silencio; todos los estudiantes observaban expectantes, esperando ver cómo reaccionaría el alfa.

Namjoon alzó la mirada, con las mejillas encendidas de vergüenza. Vio la camisa del chico frente a él, manchada de salsa y fideos. Al mirar su rostro, sintió un impulso de querer desaparecer; acababa de arruinar la ropa del chico más guapo que había visto en su vida.

El alfa frente a él parecía bastante molesto.

Sin duda, no fue el mejor comienzo para ambos.

Tiempo después...

—¡Feliz cumpleaños, hyung! —exclamó Jungkook emocionado, colocando un libro frente al omega, adornado con un lazo rojo.

Namjoon miró el regalo, un libro de poesía, y luego dirigió la mirada al alfa, quien le sonreía con las mejillas sonrojadas y una sonrisa adorable.

—Kookie... No tenías que hacerlo —dijo, notando el brillo en los ojos de Jungkook.

—Solo... ábrelo, ¿sí? —murmuró Jungkook, nervioso, mientras bajaba la mirada y jugaba con sus manos.

Namjoon desató el lazo con curiosidad y abrió la portada del libro. Lo primero que encontró fue una nota, escrita en una caligrafía hermosa que decía:

"Omega lindo... Tu sonrisa ilumina mis días. ¿Me dejas ser tu novio?"

El lobo de Namjoon no pudo contener su felicidad, y él sonrió dejando ver sus adorables hoyuelos mientras emitía feromonas de alegría. Sus ojos se encontraron con los de Jungkook, quien esperaba ansioso una respuesta. En lugar de hablar, Namjoon le regaló una de sus sonrisas más sinceras.

En su boda…

—¡Felicidades a los esposos! —gritó el padre de Jungkook, entusiasta.

Las familias de los recién casados celebraban sin medida. Jeon sostenía del brazo a su ahora esposo mientras los invitados les lanzaban pétalos de rosas blancas al salir de la iglesia.

Solo faltaba un último detalle: la marca en el cuello de Namjoon que sellaría su vínculo definitivo. La felicidad parecía completa.

Nada podía salir mal… al fin y al cabo, Jungkook era su alfa, ¿verdad?

Editado: 06/11/2024