Llévame al lugar en donde quise encontrarme con sus ojos. Llévame a donde sea que esté ahora, para atraparlo y no soltar su mano de nuevo. Llévame a marzo, para no dudar en robarle un beso, y no titubear en colgarme de su brazo. ¿Cómo haré para dormir esta noche? Sabiendo que no tengo derecho a soñarlo. Que es una quimera. El simple hecho de recordarlo, el simple suspiro de su mirada acariciando la mía, es hoy un trozo de su alma que no quiero devolverle. Llévame tres años atrás, y déjame muy cerca suyo, para no volverlo a soltar. Y confesarle, a diario, que el corazón no lo va dejar de amar.
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Mi príncipe de ojos canela
PoetryLa vida va, los sueños mueren. ¿Realmente importa si dos personas se quieren? Los poemas presentados en esta antología, son una de las tantas reflexiones al centro del universo, la fuerza que mueve al mundo: el amor.