Catorce

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- Valen. - dijo Daniel intentando despertar a Valen.

- ¿Qué pasó? ¿Qué hora es? - preguntó Valentín un poco alterado.

- Tranquilo, vamos a comer, es la una y media, aún tenemos tiempo.

Valentín, una vez que supo eso, se calmó y se estiró un poco en la cama de Daniel, hasta que recordó el por qué estaba ahí.

- ¿Porque me llamaste a las cuatro de la mañana? Me asustaste boludito. - dijo dándole un pequeño golpe por asustarlo.

- Oh sí, eso, perdón. - dijo un poco tímido, no pensó que Valentín se fuese a preocupar así de él - Ayer volví a tener una pesadilla y creo que me dio un ataque de pánico, no supe que hacer y te llamé.

- Ay dios, perdón Dani, estaba durmiendo y no pude contestarte. - se disculpó Valentín.

- No pasa nada, supuse que estarías durmiendo y colgué, después me pude calmar un poco, no te preocupes. - le sonrió Daniel.

- ¿Querés dormir hoy conmigo? Así si tenés la pesadilla te puedo ayudar y no dormís solo. - le preguntó Valentín.

- Bueno, de acuerdo. - asintió.

- ¿Está tu papá?

- No, se fue al trabajo. - explicó Daniel - Tenemos que bajar o se va a enfriar la comida. - apuró a Valentín.

- Ya voy, ya voy. - dijo estirándose en la cama.

Ambos bajaron al comedor y empezaron a comer lo que Daniel había cocinado mientras veían bob esponja en el televisor.

- ¿Y posta viniste hasta acá para ver cómo estaba?

- Y sí boludo si me re asusté. - dijo a lo que Daniel rió - Tampoco está tan lejos tu casa de la mía.

- Ya sé, pero eran las diez de la mañana, ¿qué hacés despierto a las diez de la mañana?

- Qué sé yo, me desperté sin más, últimamente me estoy despertando temprano.

- El día que dormí con vos dormiste mucho. - dijo señalándolo.

- Porque estaba re cansado.

- Na, yo creo que fue por mis poderes seductores. - dijo Daniel peinando su cabello con sus dedos.

- Si vos decís. - dijo Valentín un tanto nervioso. Capaz Daniel sí que ayudó un poco en que Valentín durmiese mejor.

Ya que Valentín suele despertarse tarde porque durante la noche se despierta varias veces sin razón alguna, pero últimamente ya no le estaba sucediendo tanto y por eso se despertaba más pronto, dormía un poco mejor.

- ¡Valen! - gritó Daniel, quien llevaba llamando a Valentín varias veces pero parecía en trance mirando algún punto fijo.

- Uh perdón, me re fui pensando.

- ¿Estabas pensando en mí? - dijo irónicamente Daniel.

Valentín se puso nervioso de tan solo pensar que era cierto.

- Oh sí, sí, no tengo nada mejor en qué pensar. - dijo también irónicamente - ¿Qué querías?

- ¿A qué hora nos vamos?

- ¿A dónde? - preguntó, es tan despistado, pensó Daniel - Oh sí, al cinema, nos vamos a las tres y media.

Ambos se fijaron en la hora, eran las dos y media.

La hora que faltaba se la pasaron viendo bob esponja. Jamás se cansaban de esos dibujitos, los veían desde chiquitos pero los seguían amando.

- Nos tenemos que ir ya, Danu. - lo avisó una vez que se fijó en la hora.

- No quiero ir. - dijo con un puchero en sus labios.

- No va a pasar nada, ya te dije que no te van a juzgar ni van a pensar nada malo de vos. - le aclaró Valentín, ya sabía por qué no quería ir.

- Es que, Valentín, conocer a gente nueva me pone muy nervioso.

Valentín lo vio muy tenso, se trababa al hablar y no iba a obligarlo a ir en esas condiciones.

- Si querés les digo que lo dejemos para otro día y pasamos la tarde juntos.

- Perdón Valen, ves vos si querés.

- No, no, no, si vos no vas yo tampoco.

Viejos amigos;; WosaniDonde viven las historias. Descúbrelo ahora