Un un rinconcito cerca del cielo.

Dientes de Leon

A la mañana siguiente ambos despertaron abrazados en forma de cucharita, los rayos de luz invadieron las finas frazadas, ocasionando que ambos comenzaran a despertar.

Jeon fue el primero en abrir los ojos, sus brazos estaban abrazando la fina cintura de Tae, no hizo ningún movimiento para cambiar de posición, al contrario, se acerco más a él para comenzar a darle pequeños besos por su cuello y orejas, haciendo que el contrario comenzara a despertar.

Th- Mmmgh- Comenzó a quejarse.

Jk- Vamos, cielo. Es hora de comer.

Tae cubrió su rostro con las frazadas, haciéndose bolita, deseaba dormir al menos 5 minutos más. Kook por su parte, tampoco deseaba pararse, pero quería tratar a Tae de la forma más hermosa posible, pues sin duda, la noche anterior él castaño le había mostrado cuan hermoso era tener a alguien dentro del corazón.

Después de que ambos se despertaran y desayunaran Kook hizo una llamada interesante.

(LLAMADA)

Jn- Mande

Jk- Necesito que me prestes tu cabaña por una semana...

Jn- ¿Para?

Jk- Para nadar, seguramente.

Jn- Mmmm bien, pasa hoy por la llaves.

Jk-Te amo.

Jn-Te pones raro a veces

Al colgar la llamada, le mando un mensaje a Tae, pidiéndole que hiciera maletas para una semana, una vez hecho, subieron al auto.

Th- ¿ A donde vamos?

Jk- Te voy a llevar a un buen sitio.- Redacto con el alta voz de el celular.

Th- Me pondré a leer.- Dijo el azabache de cabello castaño.

El contrario solo asintió y siguió en su trabajo de conducir.

Cuando llegaron, el sol estaba comenzando a ocultarse, los chicos solo bajaron las maletas y entraron a la pequeña cabaña, donde el olor a madera no les hizo esperar más, las luces eran tenues y todo era demasiado acogedor.

Th- ¿ Qué hacemos aquí?

Jk- Es un regalo, espero te guste pasar el rato aquí- Sus manos creaban ademanes que significaban cada palabra que deseaba.

Th- Es hermosa.

Jk- Como tú.

Incluso si esto es demasiado cliché, Jungkook deseaba poder darle lo mejor a ese chico de ojos color miel que tanto le volvían loco.

(Chat)

Th- Solo hay una recamara.

Jk- Puedo dormir en el suelo, si lo deseas.

Th- Yo... Quiero dormir contigo.

Jk- ¿Estas seguro?

Th- Sip <3

Jk- Bien, arregla la cama, hare un poco de comida y después iré a programar la Tv del cuarto.

Th- Si Kookie.

Y así fue, hicieron esos pequeños deberes, tal vez, mañana organizarían las maletas o solo las dejarían tal cual. No había prisa, era su momento, donde podrían demostrarse el uno al otro que el amor que se sentían iba mas allá de las barreras sociales que imponía la gente.

Th- YA TERMIDEEEE

Kook fue a la recamara, con una bandeja llena de comida, sándwich, galletas, leche y un rico té de manzanilla.

Jk- Aquí están.

Los coloco en el buro que estaba a un lado de la recamara y se dirigió a la Tv para comenzar a programarla una vez hecho se dispusieron a mirar caricaturas.

Tom iba persiguiendo a Jerry mientras que algo se escucho, un pequeño gruñido salio de los belfos del castaño, asombrado, Kook volteo a verle y valla sorpresa se llevo, el chico estaba hecho bolita abrazando la pierna de Kook, mientras un poco de saliva salía de sus labios, su cabello alborotado y esa hermosa pijama de ositos, joder que mas necesitaba Kook a su lado, si con él tenia todo.

Decidió que era hora de que lo acomodase en la cama, apago la tele y cargo suavemente a tae para llevarlo a su lado de la dichosa cama, estaba a punto de irse de ahí, de hecho, su plan era dormir en el sofá de la sala, pero la mano del contrario lo detuvo antes de que pudiese zafarse de él.

Th- Debesh momi aquí...

El contrario solo soltó una pequeña risita nerviosa.

Jk- Shh descansa pequeño- Deposito un dulce beso en la mejilla del contrario.

Y así fue como termino cediendo a dormir junto al pequeño Tae lo abrigo bien y se aseguro de que nada le dañase.

Y como un diente de león, comenzaron a crecer emociones nuevas, apenas era un hermoso tallo verde, que dentro de un tiempo seria esa característica flor amarilla que termina convirtiéndose en diente de león. Un amor voluble y lleno de emociones.