Y quisiera que todo volviese a ser como antes. Que los "buenos días" fuesen buenos de verdad, y que las penas fuesen cosa de cinco o diez minutos, tal vez menos. Que las discusiones no durasen más de dos horas. Que el mundo volviese a ser el que era.
La gente pide muchos deseos, pero el problema es que nadie hace nada para que se cumplan, a la hora de la verdad todo el mundo se queda parado, como si de pronto, todo se hubiese congelado, como si las personas no fuesen más que tristes estatuas de hielo, como si hasta el más insignificante de los animales hubiese decidido no volver a moverse jamás.
Señores, hay que despertar. Tenemos que empezar a movernos por nosotros mismos, dejar de ser marionetas; nadie va a estar ahí el día de mañana para decirnos qué hacer o cómo actuar, nadie, repito, nadie, debería decidir por nosotros. Al fin y al cabo, la vida es nuestra ¿no?
Ojalá la gente dejase de mirarse el ombligo y subiese la cabeza, se fijase en las pequeñas cosas de la vida, a las que cada vez se les da menos importancia.
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Cuestión de Confianza
RandomTodo es cuestión de confianza, o al menos eso dicen ¿no? A medida que vamos creciendo, nos exponemos a ciertos problemas, amores, amistades, nos rompemos y nos volvemos a juntar por nosotros mismos. Confía, todo irá bien. ...