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Capítulo 8 - No hay tierra de Dios
Polonia, Lublin - Enero 31 de st 1944
Steve estudió la ciudad a la sombra de los árboles, usando sus binoculares. Era un lugar hermoso, blanco bajo la nieve del invierno, lleno de casas e iglesias, calles adoquinadas, estatuas y árboles. Tenía más de 100.000 personas, según la información que le dio Peggy, o al menos tenía antes de la guerra. Era, según todos los informes, un lugar agradable y tranquilo para vivir.
Ciertamente, las apariencias engañan.
No pasó mucho tiempo, especialmente mirando a través de los ojos de un soldado, para que Steve viera señales de la ocupación nazi. Sin gente en las calles, sin niños jugando en la nieve, tanques estacionados en lugares específicos, no solo para proteger, sino para intimidar. Las tropas patrullaban la ciudad, marchando, mostrándose a la gente local. Las banderas de la esvástica estaban por todas partes, meciéndose con el viento.
"Eso es mucha gente", dijo Bucky, también mirando a la ciudad. "No vamos a luchar contra ellos esta vez".
No, no lo eran, convino Steve. Tenían una fuerza abrumadora de 8 personas: él mismo, Bucky, Diana, Dugan, Jim Morita, Jacques Dernier, Gabe Jones y Pinky Pinkerton. Claro, él era el Capitán América, Diana era una amazona y los Howling Commandos eran soldados increíbles, pero Lublin simplemente estaba cautivado por los nazis y los únicos refuerzos que tenían eran unas pocas tropas del ejército soviético a medio día de allí.
Tendrían que colarse, adquirir pruebas sobre la existencia y el poder del arma, destruirla y luego escabullirse de nuevo, con la esperanza de poder llegar con vida al punto de extracción. El problema era que no sabían dónde estaba el arma, no podían caminar por la ciudad sin ser identificados y no tenían potencia de fuego para entrar y salir. Era peor que la situación en Turquía y la última vez que sucedió, Steve tuvo suerte de sobrevivir a un accidente aéreo.
"Jim, radio", preguntó Steve, sin apartar la mirada de la ciudad.
Jim Morita se puso a su lado y se agachó, dejando que Steve usara la radio que tenía a la espalda.
"Peggy, ¿me copias?" preguntó.
Hubo un momento de silencio, y luego ella respondió: "Es bueno saber de ti, Steve. ¿Ya estás en posición?"
"Acabamos de llegar, pero no vamos a entrar sin su contacto. ¿Quién es?"
" Su nombre es Yuri Bierut, o al menos ese es el nombre que me dio. Es un espía soviético infiltrado en Lublin desde hace bastante tiempo. No sé mucho sobre él, pero supongo que si lo supiera, no lo sabría". Sería un muy buen espía, ¿verdad?
"¿Sabe cómo llevarnos al arma?" Preguntó Steve.
" Según él, lo ha estado custodiando durante el último mes, así que sabe dónde está. Te daré las coordenadas del punto de encuentro, está en las afueras de la ciudad. Te ha estado esperando allí para el los últimos tres días ".
Steve marcó las coordenadas en su mapa y le dio las gracias a Peggy. Diana se acercó, mirando el mapa.
"¿Qué vamos a hacer ahora?" ella preguntó.
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Diosa Avenger
Fanfiction"Solía querer salvar el mundo. Este hermoso lugar ... Pero sabía tan poco entonces. Es una tierra de magia y maravillas, que vale la pena apreciar en todos los sentidos, pero cuanto más te acercas, más vea la gran oscuridad que hierve a fuego lent...
