La cruda verdad

Capitulo dieciocho

*** HP

George se escabulló a los pies de la cama de Harry donde había estado cuidando a su compañero y hermano dormido y se paró protectoramente entre la cama y la puerta con su varita en la mano. Podía escuchar una conmoción viniendo hacia ellos y no iba a permitir que nadie lastimara a Harry por lo que le había hecho a Dumbledore. El viejo bastardo se merecía lo que consiguió.

"Baje su varita, Sr. Weasley."

Los hombros de George se relajaron cuando Remus entró caminando al ala médica con un gran perro negro pisándole los talones. "Mis disculpas, profesor." Dijo, guardando su varita en el bolsillo. Sabía que Harry tenía sus dudas en lo que respecta a Remus y Sirius, pero confiaba en que ninguno de los dos heriría intencionalmente a Harry.

Remus levantó la mano. "Nunca te disculpes por proteger a Harry. ¿Cómo está?"

Con una sonrisa, George se hizo a un lado cuando Canuto corrió a su lado y se lanzó a la cama de Harry. Después de oler a su compañero y hermano, el sombrío se sentó y ocupó su lugar a los pies de la cama. "Todavía está fuera de sí. Su ataque mental a Dumbledore tan pronto después de que la maldición con la que el viejo bastardo lo golpeó drenó su núcleo, pero Madame Pomfrey dijo que estará bien después de un poco de descanso y comida."

"¿Y tu hermano?"

Haciendo una mueca, George se rascó la nuca. "Puede que le haya dejado un sueño sin sueños, pero lo necesitaba. Se enojará cuando despierte, pero estaba casi tan mal como Harry".

Remus observó la apariencia demacrada del joven y los círculos oscuros debajo de sus ojos, el bromista normalmente de ojos brillantes parecía muerto de pie. "¿Cuándo fue la última vez que dormiste? Te ves horrible".

"¿Qué es dormir?" George bromeó secamente. "Siento que no he dormido en semanas".

Remus llevó al adolescente a una cama vacía. "¿Se rumorea que estuvo con mi cachorro en Estados Unidos, sin visitar a su amigo, el Sr. Jordan?"

George no armó un escándalo cuando Remus le indicó que se subiera a la cama. Estaba tan cansado. "A donde va Harry vamos, ha sido así desde que lo conocimos. Descubrimos dónde estaba Harry y luego le pidió a Lee que nos cubriera. Teníamos que asegurarnos de que Harry estuviera a salvo y feliz".

"No soy ciego, George, sé que tú y tu hermano cuidan a mi cachorro de una manera más que fraternal. Desde que les enseñé aquí, sé que ustedes están enamorados de Harry. Soy un hombre lobo, es casi imposible engañar a nuestros sentidos ".

George ni siquiera trató de negarlo u ocultar su sonrisa. Asintiendo con la cabeza, miró hacia donde Harry y Fred dormían uno al lado del otro. Al ver un movimiento proveniente de los pies de la cama, miró para encontrar a Padfoot moviendo sus cejas de perro hacia arriba y hacia abajo. "No voy a mentir, hemos estado enamorados de Harry desde el segundo en que lo vimos. Él es nuestro alma gemela."

"¡Alma gemela!" Remus jadeó. "Eso es muy raro. ¿Estás seguro?"

"¿Estás seguro de que eres un hombre lobo?" George respondió con irritación, no le gustaba que la gente cuestionara sus sentimientos por Harry.

Remus miró a Sirius cuando le dio un ladrido de risa como un perro. "Me disculpo por cuestionar tus sentimientos hacia mi cachorro, es que encontrar a tu verdadera alma gemela es casi imposible, incluso para criaturas como yo. ¿Por qué no descansas un poco y nos permites mirar a Harry?"

George quería protestar, pero si no dormía un poco se iba a desmayar. No había dormido bien desde que Harry le puso un cuchillo en las muñecas. "No dejes que nadie más que Madame Pomfrey se acerque a Harry, y si hay un problema, despiértame de inmediato."