Regreso a la vida

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Desperté a media noche a causa de un sonido fuerte fuera de mi sueño el cual me exaltó, era mi hermano Max tocando la puerta.

--¿Qué quieres?, pregunté molesta un poco dormida aún. 

-Mamá me pidió que te despertara no quiere llegar tarde por tu culpa- ¿o ya olvidaste la última vez que salimos de viaje?- preguntó Max en un tono un tanto molesto. 

--No! no lo he olvidado, y sabes que no fue mi culpa que perdiéramos el vuelo.

-Sí, pero ella no lo cree así.

--Ya vete, déjame arreglarme, dile que bajo en 2 minutos.

*Max sale y cierra la puerta*

Odio viajar a media noche, es tan pesado, quiero dormirme otra vez, pero no puedo, si mi madre pierde el vuelo, esta vez sí me asesina, no soy su hija favorita y claramente solo está esperando una razón para hacer algo conmigo. 

Tomo mi equipaje ya listo desde del día anterior, lo colocó en la puerta del dormitorio mientras voy al baño para arreglarme un poco, solo lavare mi cara y dientes, me iré en pijama, pienso dormir todo el vuelo, son 6 horas de regreso a casa y no tendré nada mejor que hacer que dormir.

Salí de la casa de mis abuelos, y veo a mis padres en el auto esperando para volver a la asquerosa realidad que vivimos, me gustaria quedarme a estar con mis abuelos toda la vida, pero eso sería hacerme feliz y mi madre no puede permitir eso, mi padre instigado por mi madre suena la bocina del auto para que me apure, me despedí de mis abuelos con un suave beso en sus mejillas y un abrazo como si supiera que ese sería el último que les daría. 

Subí mi equipaje al auto y me senté junto a mi hermano en la parte de atrás, él muy intenso es mayor que yo, pero se comporta como un niño de 6 años, Max, va todo el camino jugando en su celular y haciendo ruidos extraños cada vez que gana, no me deja ni cerrar los ojos, cada vez que los intento cerrar para dormir un poco, grita, quiero pegarle para que madure pero si lo hiciera no sería mi hermano. 

Tardamos una media hora en la autopista, una media hora que juraría fue eterna, pensé que jamás llegaríamos, mamá estresada, papá conduciendo con la música más horrible de la historia y Max jugando, no es una buena combinación para el sueño o la vida. 

Al fin llegamos al aeropuerto, y ahora debemos hacer todo el proceso de embarque es muy tedioso, lo único bueno es que al ser en la madrugada no hay tantas personas y todo el proceso es más rápido. En el avión me toca sentarme junto a mi hermano, y otro chico que luce algo extraño, mis padres están unos asientos más adelante, solo estaba esperando el despegue para dormir en el vuelo.

Una vez el avión había despegado intente dormir pero no podía, era imposible Max estaba más intenso de lo normal, cada vez que me colocaba los audífonos me hablaba y tenía que quitármelos para poder escuchar lo que decía interrumpiendo una y otra vez lo iba a ser el mejor sueño de mi vida, llegó un momento en el que me cansé de escuchar cada bobada que le llegaba a la mente y me coloque los audífonos ignorando cada toque o cada moviendo que hacia, amo a Max con mi vida pero en este preciso momento puede morir junto a mi y no me girare a mirarlo. Cuando al fin pude encontrar la paz y logré cerrar los ojos Max me toca un poco para tirarme hacia él, me quedé inmóvil ignorandolo, al ver esto Max me sacudió un poco haciendo que me girará molesta hacia él. 

--¿¡Qué quieres intenso!?- pregunté molesta ¿¡Qué no ves que intento dormir!?

-Sí, si veo que te quieres dormir - Contestó en un tono desinteresado y despreocupado.

Masajee mi sien molesta intentando encontrar la paz en mi interior para no soltarle un buen golpe en todo el rostro -Pues entonces!! ¿qué tanto molestas? Déjame dormir ¡YA!-

-No me importa, prestame atención, lo que te quiero decir es que cuando lleguemos a casa- Comentaba mientras intentaba sacar algo de su bolsillo -la llevare para que conozca nuestros padres ¿Qué opinas?- Terminó de decir mostrandome la foto de una chica, una hermosa chica. 

-En primer lugar- Comente girandome por completo hacia él ¿Quién es ella? Y en segundo lugar ¿para qué quieres mi opinión si me acabas de decir que la vas a llevar?

-Jena, no te pongas en plan hermana celosa es Juliette, mi no...

-Novia- Interrumpi terminó la palabra por él - O sea, que ya tienes novia ¿Por qué no me lo habías dicho antes? le pregunté con cara de indignada.

-Si, es mi novia, es un año mayor que tú, va en la universidad conmigo, no estés celosa, Jena, Juliette es buena persona, cuando la conozcas te darás cuenta.

--Cómo digas! ¡ya no me importas! Me perdiste. -- le dije enojada.

-Jenaa...! No te molestes porque tengo novia, deberías estar feliz, ¿o no estas feliz por tu hermano? 

A sangre fríaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora