Donde Louis Tomlinson pide la mano del hijo menor del Rey del Reino Gilius, Harry Styles. Un Omega que donde sea que vaya tiene la atención de las personas, un Omega inteligente y astuto.
Un Omega único en su Reino.
"Sabes Louis, yo nunca seré algui...
El sonido de una pisadas suena por el pasillo mientras por este pasaba él príncipe y sus guerreros. La puerta del salón del palacio se abre dejando ver a un Omega rizado y a dos Alfas que lo están escoltando.
—¡El príncipe Harry hace acto de presencia, majestad!—Grita avisando él beta encargado de avisar de quién entraba y salía de la presencia del Rey.
—Oh Dioses, Harry—El príncipe Ali pone su mano es su rostro tapando sus hermosas facciones, sorprendido.
—Hijo—Susurra el rey, se levanta del trono, mientras Harry hace una reverencia en forma de respeto al Rey.
—Padre—Dice él Omega neutral, Ali al ver su hermano menor se levanta y lo abraza, asombrado por ver a su hermano después de tanto tiempo.
—Harry, estás vivo, gracias a los Dioses—Pone sus manos en el rostro del Omega, mirando su rostro asegurándose que no esté herido, mira el cuerpo del rizado viendo que no contiene ninguna herida.
—¿Como les fue hijo?—Pregunta.
—Ganamos, Padre—Informa, el rey y los príncipes gritaron de felicidad al oír la nueva victoria del reino, el Omega se queda viendo como su Padre y hermanos se abrazan por la felicidad al oír la noticia, los miraba neutral como si le importara lo más mínimo que sus soldados que fueron liderados y combatieron con él hayan ganado. El Alfa mayor desvía su mirada para ver a su hijo menor, lo mira y nota que este no tiene ninguna emoción en su rostro.
—No te ves feliz, hijo.
—Lo estoy, Padre—Le asegura. El nombrado suspira, mira como su hijo menor los observaba. Su retoño se comportaba como un Alfa, sabe que es su culpa él lo crío pensando que lo iba a hacer. La sorpresa que se llevó cuando hace unos años atrás, cuando su hijo hizo acto de presencia por primera vez con un profundo olor a Omega en su cuerpo. No debió hacer oídos sordos a los avisos de su difunta esposa.—¿Puedo retirarme, Padre?
—Oh, claro hijo retírate, seguro que este duradero tiempo que estuvimos bajo contienda fue muy extenuante para ti —Ve a su hijo asentir con su cabeza dándole la razón.
—Con su permiso—Dice para empezar a dar pasos hacia atrás, hace un movimiento elegante y fluido dándole la espalda a la corona. Empieza a caminar, le ordena con su cabeza al sirviente para que le abriera el acceso que da al pasillo. Este lo hace mirándolo con admiración, adoración. Harry estuvo a punto de rodar los ojos pero se contuvo. Pasa por el lado del sirviente y le susurra un "gracias" de forma bajita.
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Harry descansaba en su habitación, después de mucho tiempo de no hacerlo. Escucha el llamado que le hacen. Estaban esperando su afirmación para poder ingresar a sus aposentos. Gruñe sabiendo quienes se encontraba detrás de esa puerta. Se levanta, y empieza a caminar con sus pies descalzos, no tuvo la fuerza para poder ponerse su calzado. Deberían entenderlo, estuvo en una guerra, con calzado la mayoría del tiempo. Sus pies necesitaban un descanso.