En nunca jamás el tiempo no existía para el resto, pero en mi caso si lo hacía. Con cada día que pasaba mi desesperación me consumía. Han pasado ocho años desde que traje los huevos a nunca jamás, logré crear una isla donde coloque aquellos huevos lejos del alcance de los niños perdidos.
Mientras usaba mis poderes para observar con lujo y detalle a la joven Targaryen, al principio me pareció indefensa e ingenua, a medida que el tiempo paso pude ver una de mis visiones realizadas, al ver a la joven entrar a una hoguera por la muerte de su esposo y con los tres huevos, lo que más me sorprendió y me dejó helado es que no ardió bajó las ardientes y potentes brasas. Su inocencia fue desapareciendo con cada conquista que realizaba con un gran ejército de inmaculados y sus tres hijos ( ya que durante la muerte de su esposo perdió su embarazo a manos de una bruja dejándola sin la posibilidad de tener hijos y de la hoguera salió ella con esas tres criaturas que los hace llamar sus hijos).
Los años pasaron, las bestias crecieron y ejercían miedo y temor por cada lugar al que van. La joven Targaryen fue nombrada por muchos títulos a medida que conquistaba varias ciudades, hasta que por fin llegó a westeros con su ejército de Dothraki quiénes cruzaron el gran océano estrecho siguiendo a su reina y más atrás el ejército de inmaculados y sin olvidar el ligero detalle de las tres bestias, todos los acontecimientos conllevaron a qué Dainerys se conociera con Jhon hijo de una Stark y de un Targaryen juntos marcharon a la capital para destronar a la reina Lannister, la cual logro escapar con su hermano que también era su amante (estás personas tienen problemas mentales). Lograron llegar hasta su castillo familiar con un gran ejército protegiendo los alrededores y listos para atacar, mientras que la Targaryen y el Stark se proclamaron rey y reina de los siete reinos.( Se lo que piensan, ¿Por qué me interesa tanto la vida de estás personas? Pues la respuesta es obvia necesito a la madre de dragones osea a la reina Targaryen, ya que, ella es la única que puede hacer que las bestias nazcan, pero no he tenido posibilidades de llevármela hasta nunca jamás), el tiempo pasó y los reyes se dieron una tregua con los Lannister, el rey y la reina gobernaban con sabiduría. (Esto me enferma) la reina Daenerys se encargaba de los reinos, el rey Jhon se encargaba de reunir un ejército para proteger a los siete reinos de cualquier amenaza. Los años seguían pasando y mientras la reina permanecía en el desembarco del rey, y el rey se la pasaba en el Norte dejándola sola en aquel castillo (bueno no sé encontraba sola del todo).
Un día la reina se encontraba en sus aposentos, mientras una de sus acompañantes le acomodaba el cabello dejándolo en una hermosa trenza, la acompañante sin previo aviso tocó uno de los pechos de la reina provocando que está se sorprendiera y enojara.
-¡Qué estás haciendo!- está observo a su acompañante con el seño fruncido y una mirada amenazante
-Lo lamento mucho mi kalesi. Pero su cuerpo está cambiando-está posó su mano en el vientre de la reina con una enorme sonrisa en el rostro-los Dioses la han bendecido.
-Eso es imposible- la reina se encontraba atónita y asombrada por aquella noticia-No puede ser posible Las palabras de la bruja no sé han cumplido- en ese momento la joven reina comenzó a susurrar hasta el punto que su acompañante no la escuchara( pero yo si podía oírla) -cuando el sol salga por el oeste y se ponga por el este. Cuando los mares se secaran y las montañas volaran como las hojas. Cuando su vientre se hinchara de nuevo y tuviera un hijo vivo. Solo entonces, él volverá, no antes.- la joven reina se quedó paralizada con los ojos en blanco perdidos en sus pensamientos.
-No se altere mi kalesi eso no le hace bien en su estado. Podemos esperar para que lo compruebe, le recuerdo que soy una dohtraki y tengo experiencia en el tema, le buscaré un te de hierbas, ya regreso- la acompañante se incorporó y le regaló una sonrisa a su reina antes de retirarse.
La Targaryen se quedó sola en sus aposentos mientras acariciaba su vientre no podía creer lo que le habían dicho, sus ojos se centraron en su vientre y soltó una pequeña sonrisa forzada y comenzó a pensar y su mirada se perdió nuevamente.
Esto sería una gran oportunidad para mí, con esta noticia no tendría que llevarme a la madre de dragones, sino al futuro príncipe que lleva consigo.
- ¡Guardias!- mis pensamientos fueron interrumpidos por la voz de la reina, quien miraba su vientre con una sonrisa y lo acariciaba con sumo cuidado.
-¿Se le ofrece algo mi reina?- el soldado miró a la reina detenidamente, esperando la orden.
-Quiero que preparen el castillo de roca dragón.- el soldado la miro sorprendido por la respuesta de su reina.
-¿Su alteza ocurre algo? ¿Porque quiere ir allá?-
-¡Eso no es de tu incumbencia, cumple con mi orden y dile a Missandei que venga!-
El soldado sin decir mas hizo una reverencia y le ofreció sus disculpas a su alteza antes de retirarse.
Al rato entro la acompañante más confiable de la reina, quién la miro preocupada por las órdenes anteriormente mencionadas. Está sin preguntar comenzó a preparar los vestidos de la reina Dainerys, mientras la reina acariciaba su vientre y miraba por el balcón de su habitación dandole la espalda a su confidente.
-¿Mi reina se encuentra usted bien?- la joven morena de cabello castaño oscuro, rompió el silencio incómodo que se encontraba posado en la habitación, la reina desvío la mirada de la ciudad para ponerla en los ojos castaños y oscuros de su acompañante.
- Mi querida Missandei nos vamos por un tiempo- la joven morena se sorprendió ante la respuesta, pero no hizo ningún comentario al respecto- a ti no te puedo ocultar nada, eres mi mayor confidente y parte de mi familia una de las primeras personas que confío en mi y me acompaño durante mi camino, mi más fiel compañera- la reina se acercó hasta la castaña. Tomando las manos de Missandei para luego colocarlas con sumo cuidado sobre su vientre- estoy esperando un príncipe y no puedes decírselo a nadie-
La castaña puso los ojos en blanco al escuchar la noticia, su emoción fue creciendo a medida que los segundos pasaban- mi reina deberíamos dar la noticia-
-¡No! Podré ser la reina pero en este lugar estoy rodeada de enemigos, la forma más fácil de hacerme daño es por medio de mis hijos, lo mejor es que vayamos a roca dragón por un tiempo al menos hasta que nazca mi hijo-
- ¿Qué hay del rey Jhon?-
-No le diremos nada, él no volverá hasta que las cosas mejoren en el Norte, dile a gusano gris que hoy nos iremos-
-Si mi reina-