LO QUE NUNCA TE DIJE.

41 0 0
                                    

Hoy viernes me he levantado con una energía tan positiva, bajé para desayunar, y comencé a revisar la correspondencia y tenía una carta de Joshua. Mi mente rápidamente empieza a hacerse ilusiones, tiene meses que no hablo con Joshua, ¿Estará bien?
Leeré la carta después de desayunar, cuando terminé subí a mi habitación, tome mi celular, me puse mis auriculares, y empezó a sonar »Dejémolso así, Edith Márquez« comencé a abrir la carta, y la comencé a leer.

De: Joshua
Para: Nathan

Nathan... Todo comenzó con un sueño, como una simple travesura. Una tarde, en un parque, al principio, quedé pasmado ante tí, y al momento de que me hablaste quedé helado, tu hermosa sonrisa, es algo que siempre voy a tener en mi recuerdo. Al principio de nuestra relación yo te dominaba, yo te confundía en el sexo, pero, conforme pasaban los días, tu llevabas el control, tomaste el poder en la manada, y sin darme cuenta, te convertiste en mi líder, obedecía tus reglas, las cuales eran hermosas, ni siquiera eran reglas. Tú ritmo y tú pasión, tu romanticismo y la hermosa pasión que me dabas, era algo agradable, demasiado agradable diría yo. Hacíamos daño juntos, me diste un poco de tu maldad, un poco de tí. Las canciones que cantabas para mí, las noches de ternura y dulzura que me diste, las caricias, los besos.
Nathan, que difícil es decidir, cuando tú mente dice que renuncies a todo, y el corazón te pide a gritos un último intento.
Nathan, a veces pienso en ti, en lo mucho que te quería y en lo mucho que aun te sigo queriendo.
Una canción correcta, la canción correcta siempre fue Acaríciame, el sentimiento de perderte me provoca tanta melancolía, Nathan realmente te quiero demasiado, te amo.
Eras mi sueño, eras todo lo que tenía y todo lo que quería, eras en lo que creía cuando todo se ponía complicado, eras mi especie de salvación.
Todas esas noches mientras no podía dormir, veía las estrellas con demasiada pasión. Con tanta pasión como la que tú tienes.

Nathan, me hubiera gustado decirte de frente, pero, sabes que no hubiera tenido el valor para verte a los ojos, para ver esos ojos, para verte tan ilusionado con mi regreso, por eso he decidido hacerlo de esta forma, mediante una carta. No hubiera podido soportar verte llorar, o ver tus ojos con lágrimas.
Nathan, ¿Sabés?, Justamente hoy, es nuestro mes 25 de ser novios, Nos conocimos un 12 de Julio del 2015, estos 25 meses, han sido tan hermosos, me enseñaste lo mejor de la vida, me enseñaste a amarme, y tú, tu aprendiste a ser romántico por mi, ni siquiera merecía tu amor, no merezco tu amor, ni tus lágrimas ni mucho menos tu tiempo. Soy un ser demasiado idiota.
Nathan, te digo adiós, quizá no te voy a olvidar, pero te digo adiós. Estoy con Ernesto, sabes, que el fue mi primer amor, y no lo puedo olvidar así de la nada, este tiempo que he estado en Monterrey me ha hecho ver el pasado, cuando salíamos a caminar, cuando salíamos a cenar, sabés que con el tuve una relación estable desde que estuve en Monterrey, y a pesar de que ya tiene 2 hijos me llevo muy bien con ellos, me duele dejarte así, pero, es lo mejor para los dos. Jamás hubiera querido que esto hubiera terminado así, pero, no hubiera tenido el valor para hablarte de frente, soy un cobarde, siempre tendré en cuenta todo lo que vivimos, esas hermosas salidas, nunca olvidaré las cosas que me hiciste sentir, jamás olvidaré tu olor, jamás olvidaré tu sonrisa, tus ojos, tus labios, tus besos. Tengo lágrimas en los ojos, pero es lo mejor para los dos, aparte yo nunca podría haberte dado la vida a la cual estás acostumbrado.
No quiero que pienses que solo jugué contigo, nosotros muchas veces la pasamos increíble, nunca faltaba tu increíble sentido del humor, tu carismática sonrisa, tu sarcasmo y tu ayuda incondicional. Lo de nosotros es y será, un amor prohibido y será el mejor error que hayamos cometido.
Por favor no me busques, no me llames...

Gracia por todo lo que vivimos, gracias, por tus besos, tus abrazos. Gracias Nathan, hasta pronto.

Por favor no me busques, no me llames.

EL DÍA QUE TE VÍDonde viven las historias. Descúbrelo ahora