Smile :)

Capítulo 4

Yo no paraba de moverme de la emoción. Al salir del aeropuerto pedimos un taxi que nos llevó hasta la casa en la que viviríamos los próximos 3 meses. Mis ojos no podían creer que el paisaje que veía pasar fuera tan igual a las fotos o vídeos que había visto por internet. Era algo hermoso. Pasamos por el centro de la ciudad y muy cerca de donde se podía ver la playa. Estaba ansiosa por ir a todos lados de la ciudad, pero primero debíamos ir a hablar con el dueño de la casa, después desarmar las valijas y descansar un poco del viaje. Eso me decepcionó un poco, ya que yo estaba muy activa, y la emoción no se me iba a ir hasta que me divirtiera descubriendo California.

Cuando el taxi paró en la puerta de un casa muy grande nos bajamos y también la cosas. Era algo incomodo tener que ir a un lugar con todo lo que habíamos llevado, hubiera sido mas fácil dejar todo en la casa y luego visitar a el dueño.

Mi papá tocó timbre, la verdad es que la casa por fuera era muy linda, yo deseaba que la nuestra fuera tan linda como esa, pero mucho mas chica, ya que nosotros somos solo tres personas, y en esa casa no tengo ni idea de cuantas personas podrían vivir.

Abrió la puerta un hombre castaño y un poco canoso, debía tener unos pocos años más que mi papá, era bastante alto y sonrió al vernos.

-Hola, vos debes ser Ignacio- le dijo a mi papá (en inglés) aún sonriendo y haciendo un gesto para que pasemos. La verdad es que estaba ansiosa por entrar a esa casa, si hubiese sido por mí, hubiera entrado corriendo, pero no lo hice, entré tranquila a la par de mi mamá observando cada detalle de la casa.

Obviamente era como las casas de las películas o series que veo yo. Era grande, saliendo de la entrada se veía un living muy lindo con sillones, la tele y muchos parlantes. Sobre el sillón mas grande había una guitarra y una campera rosa de mujer. Supuse que Mark tenía hijos ya que de la consola de Play Station que estaba encendida había 3 controles que la manejaban, pero igual no habia nadie jugando. También lo imaginé por el tamaño de la casa, no me parecio que en una casa tan grande vivieran solo 2 personas.

Entrando en la cocina, apareció una mujer rubia aproximadamente de la misma edad de Mark. Ella tenía una sonrisa muy dulce, parecía de las tías tiernas que te miman y siempre te cocinan. En ese momento la mujer estaba cocinando y lo dejó de hacer cuando escuchó las voces de mi papá y de Mark hablando. No presté atención a la charla, pero por lo que pude oir no me fue difícil entender. Tal vez no sería tan complicado entender el inglés en un país diferente.

-Ella es mi esposa, Stormie.

-Gusto conocerlos- saludó ella dandonos un beso en la mejilla a cada uno de nosotros, nunca despegó la sonrisa de su rostro.

Después de un rato de haber saludado y hablado un poco. Mi papá estaba hablando con Mark sobre la casa en la que viviriamos, mientras Stormie nos servía un jugo de naranja recien exprimido que mi mamá y yo la ayudamos a hacer, y unas galletas de vainilla y chocolate muy ricas. Yo moría de hambre, hací que no tardé en comer algunas.

-Hací que es su primera vez en la ciudad- comentó Mark dirigiendose a nosotros tres.

-No solo en la ciudad, en el país- contestó mi papá un poco exhausto.

-También en el continente- dije yo queriendo probar si mi pronunciación en inglés era buena, y al parecer me entendieron perfecto.

-Mica, que edad tenes?- me pregunta Stormie con mucha curiosidad al oírme hablar.

-13

-Ooh! Yo tengo una hija de 16 años que seguramente le encantaría pasar tiempo con vos, si vos queres...- lo dijo con una sonrisa muy amable. Claro que yo si quería, nesesitaba relacionarme con alguien aproximadamente de mi edad y me puse muy feliz al oirla decirlo- También mi hijo menor tiene tu misma edad! Tal vez sepas que la casa en la van a estar esta justo en frente de esta, así que cuando vos quieras podes venir, sos bienvenida!

-Gracias!!!- volvió la emoción al oír que tal vez podía hacer amigos y no iba a estar tan sola. Me sorprendió lo mucho que pude entender del inglés, mantuve una charla con Stormie sin tener que parar a pensar cada palabra. Es posible que sin darme cuenta entienda mas el idioma de lo que yo creía.

-Sabes? Yo le dije a Rydel que iba a venir una chica cercana a su edad y le gustó la idea de mostrarte lo que pueda de la ciudad. Está en su habitación pasando ese pasillo a la derecha.