Smile :)

Capitulo 3

Estaba a un día de viajar a mis vacaciones. Ya había terminado el año de clases y pasé a 3° año del nivel secundario, por suerte con todo aprobado.

Hace 2 días ya había guardado casi toda la ropa, siempre que viajo hago la valija mucho antes para no olvidarme nada. Solo faltaban algunas cosas, los aparatos electronicos, mi guitarra y algunas de mis cosas personales como perfumes, auriculares y libros.

Cuando ya tuve todo preparado me fui a acostar sabiendo que casi no iba a dormir, teniamos que levantarnos a las 6, el avión salía a las 8. Estuve toda la noche pensando en como sería la ciudad, como sería la playa, si la casa sería linda.

Mi papá ya había hablado por telefono con el dueño de la casa, se llamaba Mark y también vivía en la ciudad, creo que vivía muy cerca de la casa en la nosotros ibamos a estar.

Cuando sonó mi alarma me levanté de un salto de la cama y la apagué, me cambié y me lavé los dientes. Todo el viaje hasta el aeropuerto y la espera del avión estuve pensando una duda que se me vino a la cabeza en medio de la noche antes de quedarme dormida: No me aburriría? Aunque sea un poco... Las últimas vacaciones fui con una amiga y me la pasaba todo el día con ella, aunque sea así no nos aburriamos. Pero ahora no conocía a nadie y mi inglés no era taan bueno. Yo ademas de estudiar en el colegio, fui muchos años a un instituto en el que enseñaban inglés, sabía mucho pero no tanto. Mi papá es el único que sabe hablar bien el idioma, pero para mi iba a ser un poco un desafío.

Cuando ya me senté en el asiento del avión mi corazón se empezo a acelerar, y mis manos transpiraban mucho, traté de ponerme comoda en el asiento pero no podía, era la primera vez que viajaba en un avión, y había soñado con ese momento tantas veces en mi vida. Cuando era muy chica veía las series o peliculas de magos y quería volar con alas. Ahora que crecí, la única esperanza que me queda es viajar en un avión. Nunca tuve miedo de viajar, porque nunca pensé en que el avión se podia caer o partirse en dos. Ni siquiera me asustan las alturas, es más, las montañas rusas me encantan, porque siento que vuelo, aunque de una forma diferente.

En el momento que el avión se eleva al cielo, yo tengo una sonrisa muy grande dibujada en la cara. Mi mamá estaba el lado mío, me dejó del lado de la ventanilla ya que sabe que a mi me gusta y a ella le asusta, y mi papá esta en el asiento de adelante mio, tambien muy emocionado pero algo asustado como mamá.

Antes de viajar mi tío me dijo que se sentía mucho cuando el avión se elevaba y cuando aterrizaba, y tenía mucha razón, lo sentí mucho. Fue una de las mejores experiensas que viví, fue hermoso ver las nubes y estar por encima de ellas. Despues de aterrizar el viaje ya había terminado, y ahora lo unico que me mantenía emocionada era conocer la famosa ciudad.