Smile :)

Capitulo 7

Un par de noches más tarde los Lynch nos invitaron a cenar a su casa como bienvenida. Yo me puse un short medio roto tiro alto con una remera de mostacho negra. Antes de cenar Ryland quiso mostrarme toda la casa. El recorrido finalizó en su habitación, él compartía habitación con Ross, Rocky con Riker y Rydel sola. En el momento en el que Ross abrió la puerta para avisarnos que vayamos a comer ví una patineta detras de la puerta. Cuando Ryland salió aproveché el acercamiento para quedarme viendola, yo siempre quise tener una y aprender a patinar, una vez le pedí una a mi mamá pero le pareció que sería un gasto desperdiciado ya que yo no la usaría mucho. Al parecer me quede un rato largo mirandola porque Ross se acercó a mi y se dio cuenta de lo que miraba.

-Sabes patinar? Si queres te la presto.

-No, no se. Pero siempre quise aprender, mucho equilibrio no tengo.

-Si? Yo soy casi un profesional! -dijo con una sonrisa en el rostro.

-Uuuff! Me imagino...-le contesté ironicamente.

Yo me di la vuelta caminando hacia la puerta mientras que a Ross se le ocurrió una idea.

-Hey!

-Que pasa?

-Mañana vas a suspender tu día de playa para tu primera clase de patineta. Creo que te tocó el profesor Lynch... Que suerte! Me dijeron que es el mejor.

Yo me limité a sonreír. Los Lynch tenían ese sentido del humor que no podía no reirme.

Al otro día sonó el timbre de la casa, era Ross tenía 2 patinetas, una a cada lado de él. Yo le había dicho que si a sus "clases" porque creí que era una gran oportunidad para conocerlo más y además yo quería aprender a andar en patineta.

Salí y se subió a su patineta andando hasta la vereda de en frente.

-Nunca en mi vida me subí a una.

-Por eso no sabes si sos buena, o si te vas a caer de trompa al piso a la primera. Pero hay que intentar- me indicó señalando la tabla con ruedas.

Después de un par de intentos y 45 minutos de práctica, estaba yo arriba de la patineta con ambos pies encima de ella. Ross dijo que primero debía controlar mi equilibrio, así que él me sostenia desde los codos y yo trataba de no caer sosteniendome de sus codos, el caminaba de costado y la patineta debajo mío se movía cada vez con más facilidad. Estuvimos casi toda la tarde hasta que casi anochece. Había logrado controlar mi equilibrio y ya andaba un poco sobre la patineta, pero aún me costaba girar. Ross me dijo que no costó tanto y que tal vez en poco tiempo me pueda enseñar algunos trucos.

No conseguí mucha información que me ayudara a saber que tipo de fiesta le gustaría, pero sí algunas cosas sobre él. Riker tenía razón, Ross es muy inquieto, se mueve la mayor parte del día, hace varios deportes y sabe tocar muchos intrumentos. Al instante me di cuenta de que a Ross le encantaba mucho la música y estaba casi todo el día cantando, así que tuve en claro que su fiesta tendría mucha música.