Flower Crowns || l.s. español

tres

En primer lugar, Harry amaba a Liam, las películas de Disney, Niall, la comida, las flores, las cosas bonitas y la ropa cómoda. En segundo lugar, no quería verse obligado a tener una cita con el amigo de Liam. El pobre Harry ni siquiera lo vio venir, sólo fue a casa a preparar la comida pero vio que había pasta hecha, Aladdin en el reproductor de DVD, un hermoso ramo de petunias, Niall y Liam en el sofá, y un hombre pelirrojo limpiando un vaso derramado. "Me gusta", oyó Harry que decía Niall al entrar. "Limpia sus propios desórdenes. ¿Crees que podría encajar en la habitación de Harry?" Ninguno de ellos había visto a Harry, solo observaban como el pelirrojo limpiaba la bebida (que por suerte era agua, sino a Harry le habría dado un ataque de nervios). Finalmente, Harry se aclaró la garganta con una sonrisa confusa, quitándose la chaqueta ligera y doblándola sobre el reposabrazos del sofá.

"¿Quién es éste?"

"Ed", dijo Liam.

"Eddy", dijo Niall.

"Edwardo".

"E-rizzle".

"E-dawwwg".

"Edwin, el hombre principal", dijo Niall.

Todos miraron a Niall, las manos de Harry en los bolsillos, E-rizzle riendo y levantándose con servilletas en abundancia en sus manos.

"Hola, E-dawwg, soy Harry". Extendió su mano hacia Ed, pero luego la retiró al notar que Edwardo no podía estrechar su mano exactamente. "Aquí, déjame ayudarte. ¿Qué pasó?"

"Estaba tratando de demostrarle a Niall que podía equilibrar un vaso lleno de agua en mi frente. Digamos que ahora le debo diez libras a Niall".

Harry se rió, llevándolo a la cocina y mostrándole dónde estaba el cubo de basura. Ed era bajito y tenía un gran suéter y se veía extremadamente mimoso y lindo.

"Por cierto, no me llamo Edwin. Me llamo Ed".

"Por supuesto, sí. Niall es sólo... Niall", murmuró Harry, cruzando los brazos con una sonrisa tímida.

"Eso extrañamente tiene mucho sentido," Ed rió, sus ojos en Harry con una sonrisa admirable. "Me gusta tu pelo, tan rizado".

Harry sintió que sus mejillas se inundaban de calor, sus ojos se desviaron hacia el suelo para ocultar su sonrisa. Esos pequeños cumplidos hacen que Harry se ponga así; le encantan los cumplidos, le encanta la gente agradable. Ed es simpático, y Liam hizo bien en juntarlo con un tipo simpático como él. Harry no respondió, no sabía qué decir, por extraño que parezca. El más pequeño de los cumplidos lo ponía rojo, nervioso y torpe. Cuando volvió al salón, Niall estaba en el suelo, Liam al borde del sofá, así que Harry le dijo a Ed que se pusiera cómodo donde quisiera, que era al lado de Liam en medio del sofá. Harry se fue a poner su pantalón de chándal y su jersey favoritos. Su jersey era de Grumpy de Blancanieves, gris, y enorme y muy suave. Su pantalón de chándal hacía juego con el color gris oscuro de la sudadera. Ahora está muy contento -nervioso, pero contento-. Harry siempre fue del tipo nervioso cerca de los chicos guapos que se interesaban por él. Aunque Ed era muy lindo, todavía no podía dejar de pensar en cómo Louis se veía adorable con ese brazalete de flores que hizo. Pero ahora mismo, decidió hacer feliz a Liam y probar esto de las citas con Ed, si es que se trata de eso.

Una vez que salió de su habitación y tomó asiento al lado de Ed, Liam se levantó automáticamente y bostezó, estirándose y gimiendo, echando un vistazo a su reloj. "Vaya, estoy agotado. Estoy muy cansado. Tengo un examen mañana, así que mejor me voy a la cama. ¿Niall? Vamos", dijo Liam, pateando el pie de Niall.

Niall gimió, con el codo metido en una bolsa de patatas fritas, y señaló hacia la pantalla del televisor, que empezaba a reproducir la introducción de la película. Cada vez que ponían una película de Disney y empezaba esa música de introducción, el castillo apareciendo, los fuegos artificiales estallando y el polvo de hadas de Campanilla espolvoreando a su alrededor, hacía a Harry no sólo feliz, sino feliz chillón y nervioso. Las películas de Disney son sus favoritas.