Que difícil es no tenerte.

Capítulo 6.

Abro los ojos y lo primero que veo es a Marta sonriendo, pero la sonrisa se el borra cuando me lanzo encima de ella para despertarla.

-¡Buenos días fea! Despierta que no quiero llegar tarde- Grito mientras se despierta.

-Tía cierra la persiana- Dice quejándose mientras se incorpora.

-Ostias, pues lo de fea es cierto eh- Le digo mientras me río, ella me saca el dedo corazón y pasa de mi.

Nos vestimos y ella lleva una sudadera azul, unos vaqueros blancos y unas converse azules del color de la sudadera, mientras que yo me pongo unas mallas de licra, una sudadera rosa con cremallera y por supuesto, mis Air Max blancas nunca faltan. Me recojo el pelo con una trenza de espigas mientras que ella se lo deja suelto para lucir su larga melena rizada y morena. Desayunamos y nos vamos al instituto, pero por el camino nos encontramos a los gemelos.

-¡Buenos días a las mas guapas de España!- Exclama Jesús llamando la atención de las personas que están en la calle. Todos nos miran y Marta y yo nos sonrojamos.

-¡Es verdad! ¡Y oye! ¡Me he enterado que están saliendo con los mas guapos, menudas buenas parejas deben hacer!- Exclama esta vez Dani, mirando a su hermano y acercándose a nosotras.

-Definitivamente sois imbeciles- Dice Marta mientras Dani se acerca ella.

-Buenos días cariño- La saluda mientras su boca se pega al cuello, y Marta sonríe.

Jesús hace un gesto similar conmigo pero él me deja un suave beso en la frente. Miro la hora y quedan 3 minutos, ¡3 minutos! ¡Y ahora mismo estamos súper lejos!

-¡Corred que no llegamos!- Exclamó mientras salgo corriendo agarrando a Jesús de la mano y tiro de él.

Y como era de esperar, llegamos tarde al instituto, per bueno, Marta y yo tenemos cara de buenas, llega a ser por los otros dos... La mañana pasa rápida, estoy sentada en el sofá de mi casa con el móvil, cuando mi padre entra por la puerta, con traje y chaqueta.

-¿Qué tal el trabajo papi?- Le pregunto con inocencia mientras dejo un beso en su mejilla.

-Bien hija bien- Me dice con cansancio. -¿Y tú?¿Cómo te ha ido?- Me pregunta esta vez él.

-Pues bien, aunque si me pagaran como a ti sería mejor. Ostras papá, ¿sabes qué? ¡Han vuelto Jesús y Dani!

-¿Ah sí? Tendré que quedar con Eva y Juan Carlos algún día. Yo sonrío y él se sienta a comer.

Mi padre es el único miembro de la familia que conozco, mi madre murió en mí parto, pero no uso eso como método de dar envidia, en realidad no me da pena porque no llegué a conocerla aunque me gustaría tener una pero para es tengo a la madre de Marta o a Eva. Digamos que dinero no me falta, mi padre es empresario y gana bastante, además, solo somos dos, todo el dinero es para nosotros. Subo a mi habitación leyendo los Whats App que tengo, grupo de la clase, grupo de mis amigas, mensaje privado de Marta, de Jesús y un grupo nuevo que al parecer es de los cuatro, pero me fijo en uno característico, uno que normalmente no está. Es un número desconocido acompañado de un "más te vale no contar nada, pero tu mejor amigo y el novio de tu mejor amiga no es lo que parece, un beso" con una foto de dos personas besándose, consigo reconocer al chico.

-¿DANI?