Predestinados |Soukoku| |Shin Soukoku| [Omegaverse]

♦8♦

Un nuevo día, Chuya despertó después de dormir muy cómodamente.

Quien lo diría, el pelirrojo termino durmiendo todo un día, aunque lo más probable es que las molestias empiecen desde el día presente.

Chuya se preguntó si Akutagawa seguía en casa, aunque lo descarto de inmediato, en su reloj de pared marcaba las 10:44 am. Y el pelinegro le menciono el día anterior que empezaría con sus clases hoy, por lo que seria imposible que este en casa.

El pelirrojo se levanto de su cómoda cama, y se dirigió al baño para tomar una ducha tibia. Después de la ducha, seco su sedoso cabello y se colocó ropa cómoda, luego volvió a su cama.

[Casi 5 horas antes]

Akutagawa se despertó por el ruido de su alarma, ese día empezaría a ir a clases por lo que se levantó para alistarse.

Ya listo, bajo al primer piso, no desayuno no solía tener hambre a esas horas.

Decidio no despertar a Chuya para despedirse, el pelirrojo aún dormía y Akutagawa pensó que sería mejor dejarlo descansar.

Kyoyou-san le dejo la dirección del colegio al cual asistiría, estaba algo lejos, pero nada que no pudiera manejar.

Faltando unos cuantos minutos Akutagawa llegó a su nuevo colegio.

Normal... Pensó

Estando ya dentro del establecimiento se dirigió directamente a la sala del director, ahí le dirían en cuál clase debería de estar.

Teniendo todo listo, está vez se dirigió a su salón de clase, algo desanimado, no le había tocado estar junto a Chuya en la misma clase, dejo de pensar en eso, al fin a cabo lo terminaría viendo en el receso, como Chuya le habia dicho anteriormente, al igual estando en casa.

Llegó a su salón correspondiente, todavía era algo temprano así que pensó que lo más probable era que el salón estaría vacío.

Se dió cuánta que estaba equivocado al entrar.

En una esquina al fondo de aquel salón de clases, se encontraba un chico mirando espectante el exterior a través de la ventana.

Noto como aquel chico volteaba y lo miraba directamente a los ojos.

Fue ahí donde Akutagawa lo recordó, había visto a ese chico hace años.

Como si fuera arte de magia todos los demás estudiantes enpezaron a entrar al salón incluído el profesor de la asignatura de esa mañana.

Akutagawa quedó consternado, eso hasta que el profesor lo llamo pidiéndole que tomara asiento, la clase estaba por comenzar.

Se sentó en una de las sillas libres que quedaban en aquel salón.

Todo normal hasta que apenas y el profesor había hablado, el chico al que se le había quedado mirando apenas entrado a aquel salón, se levantó de su lugar empezando a hablar interrumpiendo al profesor.

- Oh profesor Kunikida, como lo siento pero tengo náuseas, creo que iré a la enfermería a dormir, o tomar algún medicamento o lo que sea, gracias y adios.

Dicho eso aquel chico desapareció del salón de clases.

El profesor no pudo más que poner una expresión enojada - muy enojada - y continuar con la explicación de la clase.

Nadie dijo nada por lo que Akutagawa pensó que lo que acaba de pasar era algo normal, pero aún no podía dejar ir ese presentimiento de haber visto a ese chico en algún momento de su vida... Sin mas dejo de pensar en eso y se concentro en la clase.

[...]

Cuando por fin se terminaron las clases por ese día, Akutagawa estaba listo para regresar a casa, mientras recogía sus cosas el salón de clase poco a poco se iba vaciando, fue justo ese momento cuando regreso aquel chico de la mañana.

Al parecer solo regreso para tomar su mochila y volvió a retirarse.

A Akutagawa le pareció algo curiosa esa actitud, no le tomo mucha importancia, quería regresar lo más antes posible a casa para ver cómo estaba Chuya.

Saliendo del salón de clases, paso por unos pasillos con ventanas, al mirar por estas, noto a lo lejos en el patio, como un chico albino caminaba y luego se caía, para luego levantarse y seguir caminando como si nada hubiera pasado.

Akutagawa solo pensó lo raro que se vio eso, no volvería a mirar por las ventanas para evitar mirar cosas raras.

Siguió caminando hasta salir del colegio y llegar a la estación, pasó por el súper mercado para comprar algunas cosas y luego se dirigió a su -por el momento- casa.

Ese día paso muy rápido, para la suerte de Akutagawa.

Una vez llegó a casa, lo primero que noto fue que todo seguía igual a como lo dejo en la mañana, Chuya debería estar en su habitación, pensó.

Primero ordenó la comida que había comprado y lo acomodó en su respectivo lugar, luego se fue a su habitación para cambiarse de ropa a una más cómoda.

Después de eso, fue a la habitación de Chuya para comprobar cómo estaba.

Tocó la puerta un par de veces.

- Chuya-san, ¿Puedo pasar? Compré un poco de comida por si tenía hambre.

No hubo respuesta, así que Akutagawa decidió abrir la puerta para comprobar que todo esté en orden.

Mayor fue su sorpresa al ver que Chuya seguia durmiendo cómodamente en su cama.

Fue ahí que Akutagawa empezó a preocuparse.

Según Kouyou, Chuya debería estar muy activo y con mucha energía haciendo cualquier otra cosa menos dormir, estando en su época de celo.

Akutagawa no se quedaria con las dudas, así que salió de la habitación de Chuya para ir a la suya, tomó su celular y empezó a marcar el número de Kouyou, le preguntaría si era normal el comportamiento de Chuya, pero solo le dirigía al buzón de voz.

Después de insistir unas veces más, termino por enviarle un mensaje.

Talvez solo estaba exagerando, y Chuya solo estaba algo cansado y eso era todo, pero aún así no se quedaba tranquilo con eso, además al parecer Chuya no comió nada durante todo el día, porque la cocina estaba intacta cuando llegó del Colegio, tampoco quería despertar a Chuya.

Decidió mejor despejar su mente, Kouyou terminaría respondiendo su mensaje o llamándolo tarde o temprano.

Fue hacia su habitación después de comer algo, luego de terminar sus deberes escolares se dirigió una vez más a la habitación de Chuya, pera ver si podía despertarlo para que pueda comer algo, pero fue inútil, el pelirrojo solo se quejaba y seguía durmiendo.

Akutagawa decidió que lo mejor sería dormir, ya era tarde, mañana ya vería que hacer, por el momento solo se dispondría a descansar.

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Paso tiempo, pero volvi 
Solo pasaba para decir que por fin estoy de vacaciones, así que ahora podré organizar mejor mis ideas para escribir está historia y actualizar.

No hay más que decir así que esperen con ansias el siguiente capitulo. 

Si leen un error ortográfico les agradecería que me lo hagan saber en los comentarios, eso es todo bye :).   

(1143 palabras)