Never Not (TAEKOOK)

Te lo prometo.

Mientras Taehyung corría despavorido de aquel lugar, su mente no podía dar crédito a lo que había vivido allá atrás, su Kookie, su Alfa lo había negado, estaba con los lobos más despreciables de toda la provincia. ¿Acaso su Kookie se había convertido en un ser despreciable???

-----Noooo, no podía ser cierto, mi Kookie es bueno, él siempre juró que me protegería. ¿Acaso no me había reconocido? ¿Acaso ya no me recordaba?.

Dudó por un momento y quiso regresar para encararlo y decirle lo tonto que se veía al no reconocerlo que lo extrañaba, que era su Osito, que era Tae, que ya no se separarían nunca más, que la vida sin él había sido un infierno, que se moría cada día por tenerlo consigo, quería regresar, pero sabía que no había escuchado mal, el era el comandante de esa bandada de bestias que tanto daño han hecho a todos los Omegas, que asesinaban a sangre fría y que obligaban a los más débiles a trabajar y a Omegas a parir hasta la muerte. Sus ojos se humedecieron y quería gritar, quería saber porque su Kookie había cambiado tanto, quería saber porque lo había negado.

Taehyung divisó la cabaña a lo lejos, se sentía mareado, estaba temblando, su cuerpo no le respondía, se sentía con nauseas y su pecho dolía, dolía grandemente. La cabaña estaba cubierta de mucha vegetación y una especie de plantas medicinales que adornaban todo el techo y lados de la cabaña.  Se adentró en ella, era muy reconfortante estar en ese lugar, tenía una pequeña mesa, un fogón, una pequeña cama, y muchas plantas que adornaban la vista de aquel pequeño lugar.

Su cuerpo no podía más, estaba exhausto, su ser estaba al límite, se tumbó en la pequeña cama, cerró sus ojos, esperando que al despertar su Kookie estuviera a su lado y que le dijera que todo fue un mal sueño, que todo estaba bien y que nunca se separarían.

Taehyung se desmayó y un sonido de sus labios se hizo resonar--Kookie---

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Yoongi estaba lastimado por el encuentro que tuvo con los Alfas que había matado momentos atrás, tenía un brazo quebrado y la cabeza le sangraba por la herida que yacía abierta al lado izquierdo de su oreja. Su pecho tenía innumerables heridas, sus ropas rasgadas y sucias hacían ver al chico de tez pálida, como un muerto viviente.

Había sido un caos total, Yoongi había tomado su hacha con veneno para ponerle fin a la vida de ese estúpido alfa que pronunció de su sucia boca el nombre de su amado Tae. Empuñó su mano para terminar con el ya nombrado cuando uno de los secuaces de éste se lanzó sobre su hombro. Yoongi con su daga de plata logró hacer una herida en su estómago abriendo a este por un costado haciendo que cayera. Lo eliminó sin piedad.

Pudo observar como otro lobo se llevaba al estúpido alfa y antes que pudiera arremeter contra ellos, sintio como tiraban de él por los cielos, haciendo que cayera contra un árbol.  Yoongi se levantó con furia, corrió hasta su hacha y la lanzó hasta clavarla en la sien del alfa que lo había embestido. Dos alfas más venían hacia él; pero Yoongi estaba dispuesto a matar a todo aquel que se atreviera a querer hacerle daño a su precioso Tae, no podía permitirlo, a demás, la aldea no se encontraba lejos de ahí, si ellos la descubrían toda su familia y amigos estarían en manos de esos despreciables, y eso era algo que él jamás permitiría. 

 A duras penas logró derribar aquellos alfas que se abalanzaron sobre su cuerpo, logrando tomar su hacha impregnada de veneno para poder neutralizarlos y así poder acabar con ellos. Le costó mucho, casi su vida, pero no se permitiría dejar solo a Tae, el juró que siempre iba a defenderlo.

Llegó a la cabaña, encontró la puerta entreabierta, Yoongi vió la hermosa figura que yacía en la cama, era Taehyung, su hermoso TaeTae.  Se acercó levemente para no despertarlo, pero un gemido salió de la boca  del omega.----JUNGKOOK.

Taehyung estaba repitiendo una otra vez ese nombre, repetía entre quejas y lamentos, Yoongi se estremeció al escuchar a su amado nombrar a alguien más, él sabía que entre Tae y él no había pasado algo más que un roce de labios que tontamente habían tenido, pero eso era suficiente para que Yoongi sintiera que entre ellos había más que una amistad.

Dió dos pasos atrás dolido, no por las heridas causadas por la pelea, sino por la herida del alma que le había causado el saber que su chico deliraba por alguien más.

Estaba dispuesto a retirarse de aquella cama cuando una mano alcanzó su brazo.

--Yoongi, estás aquí!!!! Dijo el peli castaño mirando al chico que se encontraba a su lado, más al darse cuenta que éste se encontraba herido quiso levantarse para poder ver sus heridas, pero un fuerte mareo hizo que se sentara de golpe en la cama.

 --¿Qué te pasa Tae?¿Qué tienes?¿Te sientes mal? dime ¿te hiciste daño? dijo Yoongi despreocupandose de sus propias heridas para revisar de pies a cabeza al menor, cuando tocó su cuerpo este estaba ardiendo.

---Tae por la diosa Luna, tienes mucha fiebre!!!! 

--Yoongi, mi cuerpo se siente extraño, me siento con mucho calor, yoo.. me duelen mis piernas y mi......Necesito que me abraces por favor, no sé que me pasa, solo siento que te necesito demasiado.

---Yoongi estaba pasmado al saber lo que estaba pasando, su cuerpo se puso tenso y de repente él también sintió calor, no era la primera vez que veía a un omega en celo, y eso era lo que Tae estaba experimentando en esos momentos, pero joder, ver a Tae ahí, moviéndose dulcemente por las sábanas hicieron que dejara de sentir su propio cuerpo, estaba decidido a arrojarse a abrazar a su amado, pero su parte humana decía que no era el momento adecuado para estar con el chico que amaba, ya que después podría arrepentirse y él quería que Tae lo amara por voluntad propia y no por un celo.

Yoongi se resistió ante el encanto del castaño y salió presuroso de la cabaña, no importando cuanto dolían aquellas marcas y heridas que aún le hacían desvanecer.

Preparó un remedio como Jin tiempo atrás le había indicado, sabiendo que el castaño algún día de esos tenía que pasar por esa etapa crítica, sabiendo que los omegas necesitan en tiempo determinado un lobo para satisfacer su lado felino, pero con esos remedios, lograban apaciguar un poco su estado.

--TaeTae, despierta, necesito que tomes esto, por favor.--Dijo Yoongi, levantando la cabeza del menor para que pudiese tomar el remedio que  le había preparado.  

Taehyung tomó por sorpresa al mayor, encerrando el cuello de este en sus brazos, frotó su nariz contra la suya.  

--Yoongi, eres muy lindo conmigo, siempre estás ahí para disipar mi tristeza, no se que me pasa ahora, han sido tantas emociones en un día, pero de algo si estoy seguro. Te quiero conmigo el resto de mi vida, Yoongi, prométeme que jamás me vas a abandonar, Prométemelo.

Yoongi abrazó a Taehyun por sus caderas y lo envolvió en un caluroso abraso--TaeTae, Jamás te voy a abandonar, pase lo que pase prometo estar contigo por el resto de mi vida y por el resto de la tuya, se que no tengo un lobo interior que pueda satisfacerte, pero te prometo que te amaré con toda mi alma y con mi vida si es necesario. Te lo prometo.