Te Cuidaré Siempre, Incluso Si Muero

Y....¿si esta no es la realidad?

–¿Porqué no me sorprende, Jihyo?.– Pregunto Jisoo.

–Por que sabias que ella tarde o temprano tendría una familia, querría hijos, una pareja y más, ¿porqué mejor no te vas ya?.–Pregunto Jihyo.

–Por que algo de mi dice que ella me necesita.

–Ya no estás junto a ella, ¿Cómo te necesitaría Jisoo?.–Pregunto frunciendo el entrecejo.

–No lose, pero no sabes cuánto daría por volver a abrazarla, sentirla, besarla. –Dijo con un semblante melancólico.

–Entiendo..

–Pero tengo algo que me dice que esta no es mi realidad– Hablo mirando el cielo con seriedad.

–No sabría decirte, Jisoo, insisto, supongo que no tienes nada que hacer aquí.– Comento Jihyo colocando una mano en el hombro derecho de su contraria.

Jisoo suspiro profundamente y empezó a caminar por el solitario parque dejando a Jihyo sentada sola en una de las bancas.

Se preguntaba si todo lo que quedaba de ella seguiría enojada con él, ¿por qué? Se preguntaba cada vez que daba un paso hacia la Empresa de su "Esposa", ¿Porqué no la dejo luchar con todas sus fuerzas? ¿Que acaso ers débil, lo suficiente para morirse?, por otro lado, algo que estos 5 años la a estado atormentando, aparte de Lisa, ¿Y si no son 5 años?...

Iba absorta en sus pensamientos cuando vio a Lalisa pasar entre ella, se notaba muy enojada y daba pisadas...uff, iba maldiciendo por lo bajo, le entró la curiosidad y miró la empresa que quedaba poco para llegar y luego fijo la vista hacia Manoban, volvió a mirar la empresa y luego a Manoban hasta que se decidió ir tras Lisa.

Corrió un poco hasta alcanzarla, y empezó a caminar a un lado de ella,Lisa iba enojada, sus mejillas tenían un todo rojizo leve, el entrecejo fruncido, y su mandíbula tensa.

–No es una buena manera de iniciar el día Manoban, te puedes enfermar si haces mucho coraje, los berrinches ya no están para ti, bueno, mejor cierro la boca que para berrinches no soy la indicada.–Decía hablando aunque nadie la escuchara.

–¿Porqué cuando ya no está Kim en mi camino llega un niñato huérfano a la vida de Mi novia?.– En ese momento Lisa paro su camino y Jisoo igual, volteo a mirar a aquella Rubia con el entrecejo fruncido.

–¡¡Mira Rubia oxigenada, ese niño es lo mejor que le puede pasar a Rosie, y yo se que con él estará mejor que contigo, si tan solo pudiera tocarte para partirte la cara!!!.– Exclamaba muy enojada.– ¡AAHHH! ¡TE DETESTO MANOBAAAN!.

Lisa siguió caminando dejando a Jisoo algo perpleja en medio del camino, decidió caminar a la empresa mientras iba cabizbaja.

Tenía ganas de llorar de la impotencia, comenzaba a creer aún más que Lisa no era para nada lo mejor para Rosé.

Caminaba derramando unas cuantas lágrimas traicioneras que bajaban por sus mejillas blanquecinas, nariz levemente rojiza, sus ojos se empezaban a hinchar.

–¿Porqué?, ¿Porqué?.–Repetia consecutivamente mientras limpiaba sus labrimas.

Ni cuenta se dio cuando cuando ya había entrado a la Empresa.

Siguió caminando hasta llegar a esa oficina.

Suspiro profundamente al entrar, miro hacia adelante y vio a Jennie, Rosé y a un pequeñín bastante lindo que yacía en los brazos de Rosie.

~

Aunque este sea una gran pesadilla de la cual pedía a gritos despertar, no quería seguir en una realidad la cual era parte de su imaginación, de un mal sueño, no quería seguir con algo que estaba a nada de matarla. Pedia despertar de ese profundo sueño pero había algo que se lo impedía y no saber el por qué la ponía muy mal. No estaba muerta, eso era una total y vil mentira. 5 años eran muchos, ella misma se había encerrado en una realidad la cual no era y su mente le jugó mal, muy mal. Luchaba con sus fuerzas por lo menos saber que está realidad no era la suya, ya estaba cansada de tantos intentos fallados. Pero escuchar la voz de su amada la hacía seguir aguantando y aceptar de una vez que ya no había manera de volver a vivir...estaba muy equivocada, haya afuera había alguien que a diario la esperaba con tanto anhelo y emoción pero también a cuán tristeza que se adueñó de aquel rostro matando todo rastro en el que alguna vez hubo felicidad.

...