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nine: impulsive decision

— ¡Ya basta, Taehyung!

Me estremezco ante el tono enojado que Jimin utiliza y su mirada irritada dirigida a mi persona.

— ¡Deja de compadecerte y déjalo ir! — bajo la mirada a mis zapatos y muerdo mi labio inferior en un intento de suprimir un sollozo. — Estoy hartó de verte llorar por alguien que no te merece. Si él no te ha escrito aún cuando le pediste disculpas (lo cual detesto que hayas hecho porque tú no tienes la culpa), entonces es porqué él no quiere hablarte. Déjalo ir y deja de sufrir, Taehyung, no te lo mereces.

Levanto mi cabeza para apoyarla en la pared, cierro los ojos y suelto un suspiro.

— Lo sé, Jimin... Sé que debo dejarlo ir, pero...

— Pero nada, Taehyung, te la has pasado llorando todo el tiempo, ya no sales con los demás y constantemente estas revisando tu teléfono para ver si Jungkook te ha escrito.

Abro mis ojos y lo miro con dolor, sus honestas palabras me duelen, y aún más al saber que es verdad.

Él suelta un suspiro y pone una mano en mi rodilla mientras me mira a los ojos compadeciéndose.

— Sé que duele, Tae, y no digo esto para que te alejes de él y yo pueda enamorarte, se que... Sé que entre nosotros no va a suceder eso. — sonríe con tristeza y yo solo vuelvo a cerrar los ojos al sentir una punzada en mi corazón de culpa. — Estoy pensando en tu bienestar. Mírate, Tae, estás más delgado y pálido, con ojeras y un dolor permanente en tu corazón. ¿No estas cansado de llorar? ¿No estas cansado de esperar algo que simplemente no viene? Deja de sufrir, Tae, déjalo ir y si él vuelve es porque realmente te quiere.

Lágrimas se deslizan por mis mejillas y tapo con mis manos mi rostro que se distorsiona en uno de dolor al comenzar a dejar salir pequeños sollozos.

— Es di-difícil, Jimin... muy difícil... no puedo simplemente...

— Si puedes, Tae, sólo... déjalo ir, yo te ayudaré a superarlo y verás que todo mejorará.

— Pero yo no quiero dejarlo ir.

— Taehyung...

— ¡No! ¡Escúchame! Sé que él y yo jamás seremos algo más que amigos. Estoy bien, perfectamente bien, solo... Solo quiero hablar con el, eso es todo.

Jimin se acerca a mi y trata de agarrar mis manos.

— Taehyung, no...

Pero las alejo y lo miro con enojo y decisión.

— ¡Basta, Jimin! Tienes razón, no me quedaré aquí a compadecerme, voy a llamarlo hasta que me cansé, lo llamaré hasta que no tenga más opción que contestarme y arreglaré toda está mierda que yo mismo creé. No dejaré que nuestra amistad se destruya por mis sentimientos hacia él.

Me levanto y me voy de allí con pasos decididos y una meta que cumplir, sin mirar atrás y ver la sonrisa orgullosa que se posaba en los labios de mi amigo.

— Buena suerte, Tae.
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autor(a) original: rosesrubies
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