La luz de tus ojos ~Deacury~

Capitulo 25: Nos vemos en el cielo.

—Pim ya es tarde ¿No voy a ir a la escuela?—
—¿Mm? No nena, espera a que te diga que hacer ¿De acuerdo?—
—¿Tas bien? Es que te veo truste y a Vati cuando salió también.—
—mira nena ahorita no te puedo decir que pasa, espera a que llegue.—respondió sonriendo tristemente.
—entonces tampoco vas a ir tu a la escuela ¿Verdad?—
—no Steph, ven aquí quédate a desayunar.—
Steph sin duda notó que algo andaba mal aunque no descubría que era, sin embargo decidió hacer caso.
—mira Steph tengo que salir, no tardo mucho ¿De acuerdo?—
—ta bien te espero.—
El pequeño mundo de Steph estaba de cabeza pero no comprendía la situación y se puso a jugar con sus juguetes improvisados.
—Pim ni te tardaste.—
—bueno nena, tienes que cambiarte porque cuándo llegue tu Vati vamos a ir a casa de tu abuelito.—
—peyo hoy es Martes.—
—por favor has lo que te digo Steph.—
—está  no te enojes, tu no te preocupas yo ahorita me cambio.—
Después de un rato llegó Freddie y se abrazaron fuertemente pues era algo que necesitaban, no era fácil.
—Vati ¿Qué pasa? Pim no me quiso decir.—
—¿No le dijiste?—
—no pude cielo.—reconoció mientras agachaba la cabeza.
—no te preocupes, yo ahorita le digo.—respondió sonriendo sin muchas ganas.
Después se fueron sin hablar mucho, aunque Steph hacía muchas preguntas.
—¿Por qué tenemos que ir de negro?—
—yo tampoco lo entiendo nena.—
—no desayunaron y les va a doler la cabeza.—
Eso les sacó una pequeña sonrisa pero aún así estaban realmente tristes, sobretodo Freddie y no era para menos, fue una gran perdida.
Había bastante gente pues había sido muy querida, incluso Brian y Roger hubieran estado ahí pero la escuela.
El padre de Freddie tenía la vista perdida y Kash se esforzaba por no llorar pero le era imposible pues las lágrimas resbalaban por sus mejillas.
Para John era algo nuevo pues era una religión totalmente diferente a la suya entonces muchas cosas variaban.
—creo que Steph tenía razón, si me duele la cabeza.—
—ay cielo, deja busco algo cualquier cosa para que comas.—
—tu también debes comer.—
—no te preocupes por mi, deberías ir con tu hermana, te necesita.—
—creo que si, tu quédate con Steph.—
Cada vez llegaba más gente, familiares que inmediatamente tomaron el primer avión para llegar allá rápido y que venían de muy lejos.
La casa que siempre radiaba felicidad ahora estaba con un ambiente apagado.
—hermano ayúdame con el pan.—
—de acuerdo ¿Dónde lo pongo?—
—aquí, ¿Qué se supone hagamos ahora?—
—no lo se Kash, supongo que deberíamos solo seguir adelante en si honor.—
—una vez te dije que no sabías dar motivación, creo que mejoraste un poco.—respondió en tono de broma pero recuperó seriedad.—supongo que no queda de otra.
—es tiempo de aplicar lo que nos enseñó.—
—quisiera dejar de llorar pero no puedo, es horrible.—
—lo se hermanita, por ahora tal vez es tiempo del duelo y después será tiempo de seguir adelante o que se yo.—
—ahora la cuestión es animar a papá.—
—vaya que si, pero tampoco te dejes de lado.—
—primer día y se siente una eternidad.—
La cantidad de personas superaba la cantidad de espacios que había así que por ende muchos buscaban donde hospedarse.
—mi amor andaba pensando en que alguien podría quedarse en la casa, si compartimos habitación con Steph queda una cama libre.—
—me parece bien cielo, pero come algo anda que llevas mucho tiempo sin comer.—
—no tengo hambre mi amor.—
—yo lo se pero te va a hacer daño.—
—está bien, deja busco algo.—
—Pim ¿Puedo tomar poquito cafecito?—
—pregúntale a tu tía Kash si tiene mucho café.—
—tía Kash ¿El café tiene mucho café?—
—pues si Stephy, pero mira ven aquí te hago uno con muy poquito ¿Qué te parece?—
—me parece bien tía, abacito para animarte.—
—ay linda muchas gracias, mira te regalo un pan pero no le digas a tus papás ¿De acuerdo?—
—chi, gracias.—
—gracias a ti Stephy.—
La presencia de niños era casi nula, habían muy pocos niños menores de 5 años y los que seguían tenían más de 16.
—miya Pim, me dio un vasito con poquito.—
—¿Qué estás comiendo nena?—
—es tu imaginación porque no como nada solo tomo mi cafecito.—respondió riendo.
—mira Steph no te quiero ignorar pero ahorita no puedo hacerte mucho caso, lo siento nena.—
—tu no te preocupas yo se que Vati y tú están ocupados.—
—ve a jugar tus primos Matthew y Valentine pero no hagan mucho ruido ¿Si?—
—lo juro por la manita Pim, no te preocupas por mi.—
—sale ve, yo buscaré la manera de hecharte un ojo.—
Steph fue con sus primos que a pesar de ser más chicos que ella eran tíos/primos.
Pasaron todo el día ahí, e incluso un buen rato de noche.
—tengo sueño Pim.—
—ay Steph, ven aquí duérmete.—
—mi amor, siempre si va a ir la tía Molly.—
—¿Ella sola o también está el tío Parker?—
—ella sola mi amor, ¿Qué hora es?—
—son las diez.—
—quien diría que mientras ayer fue un día muy lindo...—
—lo se cielo, entiendo como te sientes.—
—ahora siguen habiendo muchas cosas por hacer.—
—vaya que si.—

Al día siguiente fue todo igual de callado y aún con la tía Molly que era conocida por hablar bastante y hacer reír.
—bueno niños hay que apurarnos porque se hace tarde.—
—tía Molly ¿Me puedes pasar mi peluche por favor?—
—claro que si nena, ten.—
—muchas gracias, ahora chi.—
La pesadez en el ambiente se notaba bastante y aunque no hubo entierro pues fue cremada se seguía sintiendo raro.
—todo está como de cabeza.—
—así es cielo, pero la vida sigue aunque sea difícil.—
—me preocupa bastante papá, aunque confío en Kash.—
—yo te apoyo y Steph también.—
—eso es más que suficiente.—

Pd: de nuevo actualizar cada 3 días pq regresó la inspiración.

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