SOMOS UNA FAMILIA (EQUIPO 7)

Capítulo 10

Pequeñas luciérnagas

- ¿Alguien puede explicarme cómo pasó esto? - dice una rubia sentada a la sombra de un árbol, que miraba, con una vena marcada en la frente, a dos hombres adultos sentados delante de ella. En su regazo posaban tres pequeñas cabezas, pertenecientes a los "pequeños rayos de luz" de uno de los hombres a los que miraba con enfado -

- Digamos que cayó en su hechizo, Tsunade-sama - dice mientras suelta una pequeña risita la dulce joven sentada a su lado -

- ¡Vamos, Tsuna! ¡Reconoce que perdiste esta vez! Esos niños son unos pequeños monstruos expertos en el arte de la persuasión ¿No ves lo que hicieron al supuesto "hombre de hielo", "Kakashi el sangre fría"? Lo tomaron, me lo evangelizaron y lo convirtieron en esta bolita cursi y llena de amor, incluso dejó de leer mis amados libr-auch - es interrumpido por un codazo y una mirada llena de odio y advertencia del peliplata. Éste sabía que Sasuke tenía un sueño ligero, y si alguno de sus niños se enteraba de "su pasado oscuro" serían incluso capaces de no hablarle en meses - Ok, ok, me callo - dice frotándose el brazo - Cómo decía: ¿si pudo con el, tú que chances tendrías de oponerte a su encanto? Bajo esa capa de frialdad yo sé que se esconde un alma blando y lleno de ternu-auch ¡Dejen de pegarme! ¡Ya no existe pizca de respeto para un viejo tan sexy? - dice tras recibir un pisotón en su pie pot parte de la rubia que se encontraba avergonzada -

- ¡Deja de decir cosas innecesarias! Era una pregunta retórica - suelta un suspiro y se recuesta más en el árbol, baja la mirada a los niños dormidos y esboza una pequeña y calidad sonrisa acariciando la cabellera del niño con bigotes - ¿Cómo tan pequeñas criaturas pudieron sufrir tanto y volverse tan fuertes a esta edad? Los niños no deberían siquiera saber qué es sentirse tristes - murmura, sin pretender ser escuchada por los demás, pero aún siendolo por estos debido al cómodo silencio en el cual se encuentran sumergidos, mientras su sonrisa se va borrando y su mente la lleva a visualizar a una de las personas que más importancia tuvieron en su vida - ¿Creen que ellos puedan? - les pregunta bajo, sin quitar su mirada de los pequeños, a los dos ninjas pervertidos - ¿Llegarán tan alto que podrán cambiarlo todo? -

~¡Te lo estoy diciendo, vieja! ¡Deja de intentar hacerme cambiar de opinión! ¡Yo seré Hokage! Algún día cambiaré toda esa mierda escondida bajo la alfombra que tiene esa aldea - dice el rubio decidido ~

La Sannin lo mira con prepotencia y altanería mientras su rostro luce una sonrisa burlesca, aunque por dentro se sienta abrumada por la determinación del chico.

Sakura se encontraba furibunda en su interior, mientras que su semblante se mantiene serio sus palabras demuestran sus verdaderos sentimientos. No sólo ella, sino todos los que componen su pequeña familia pensaron alguna vez que estaban completamente solos ¡Naruto había estado siempre sólo! ¡Sasuke, si no fuera por él rubio, aunque esté rodeado de gente, por dentro se hubiera sentido igual, vacío! Y la cereza del pastel: su padre. Él lo perdió todo, y lo único que le quedaba lo apartaba. Por años se sintió cómo la basura más podrida del mundo, e incluso a día de hoy tienen dificultades de hacer que se aprecie a sí mismo. Ella no tuvo tiempo de experimentar lo más desolador de la soledad, pero el poco tiempo que duró se sintió horrible, aunque no tenía ni punto de comparación con los otros tres, aún dolía. Por más ejemplo a seguir que sea para ella y por más que sufrió en su vida ¿Quien se cree esa mujer para decirle a su hermano que su sueño era estúpido? Ella no podía permitirlo, su familia era a lo único que no dejaría que nadie le falte al respeto.