Cap. 16: Mas Allá de un Límite

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Me encontraba en ese lugar otra vez, no se veía nada solo la inmensa nada, solo se podía ver oscuridad en sí misma, entonces este misterioso dios apareció ante mí.

- ¿Qué es lo que hace aquí?

-Pues solo quería decirte que te estaré observando, aunque ya lo esté haciendo por un tiempo

-Usted es quien me trajo a este mundo, ¿cierto? ¿Cuál es la razón de ello?

-Como dije antes eso no importo en este momento, lo que debería importante mas es eso

Apunto a una imagen, esta era similar a la que los dioses usaban cuando se realizaba un juego de guerra, el aventurero peliblanco vio en esa dirección y pudo ver a sus dos compañeros siendo acorralados por los monstruos, Ais estaba malherida del hombro derecho.

- ¿Cómo salgo de aquí?

Bell tenía muchas preguntas ante la entidad que tenía frente, pero lo más importante era ayudarlos por lo que decidió volver a saber la razón por la cual fue traído a este mundo.

-Solo cruza esa puerta de allá

Dijo apuntando a una puerta que no había visto antes

El aventurero fue rápidamente a ella.

En el piso 59:

Ambos aventureros estaban en sus últimas, unos Dracos, monstruos humanoides con rasgos de dragones considerados de nivel 6, estaban acorralándolos tenían algunas heridas en todo su cuerpo producidas por las garras de los Dracos.

En eso uno de los Dracos usando su cola de manera repentina hizo que la espadachín perdiese su arma, Ais intento recuperar el arma, pero le fue imposible por la cantidad de monstruos, este era su final no le quedaba mucha magia para poder defenderse.

Fue entonces cuando un rayo de fuego fue disparado hacia donde se encontraba, mato a uno de los Dracos, inmediatamente después un aventurero apareció ante ella, este era Bell que recién había conseguido abrir los ojos.

El aventurero rápidamente acabo con los últimos Dracos que quedaban, con la ayuda de Ais, que tenía la espada corta de Bell, y la ayuda de Allen no les tomo mucho tiempo.

Bell estaba muy apenado por lo sucedido, bajo la guarda y dejo que jugaran con él, por la apariencia que tenían posiblemente me haya ido por lo menos por una media hora, en ese tiempo ellos estuvieron protegiéndolo.

-Lo siento es mi culpa que estén así

Seguido de ello saco dos pasiones de curación y se las entregó a los dos aventureros, las aceptaron, uno de mala gana, esas eran sus últimas pasiones, las tenía junto con su daga de repuesto.

Ellos siguieron su camino, pero eso era posible, aunque ya estén curados de sus heridas a Ais no le quedaba magia, no podría usar Ariel por un tiempo. Entonces se le ocurrió una idea descabellada, esta situación ya le era familiar.

Recordó la primera vez que fue a los pisos intermedio junto con Welf y Lili, en esa ocasión sus compañeros estaban heridos y Lili propuso que bajaran en vez de subir, pues les hacía más cerca el piso 18, a subir 15 pisos a la superficie.

Bell propuso lo mismo, solo que, con una gran diferencia, que no sabían cuál sería el siguiente piso seguro, esto en un primer momento les pareció una idea estúpida, pero viendo detenidamente sus dos opciones:

1.Subir por nueve pisos en los que deben de tener mucho cuidado con los poderosos dragones que se encuentran en ello

2.Bajar sin saber hasta que piso encontraran uno seguro, en el que no se generen monstruos

Danmachi-Bell en una realidad diferenteDonde viven las historias. Descúbrelo ahora