𝐓𝐇𝐄 𝐐𝐔𝐄𝐄𝐍 ──── 𝐓𝐇𝐄 𝟏𝟎𝟎

•21•

KRISTEN

Dos hombres, en caballos, me llevaron de vuelta al campamento, abrieron las puertas y ellos se fueron, Clarke se acercó a mi corriendo y me abrazó.

—¿Qué pasó? ¿Si habrá tregua?—suspiré y luego sonreí.

—Sí—Octavia se acercó junto con Bellamy—Tendremos una tregua pero...

—¿Qué sucede?

—Tengo que quedarme con ella. Si queremos una tregua, debo ir con ella. Mañana al amanecer unos hombres vendrán por mi.

—¿Qué? No.

—¿De qué demonios estás hablando?

—Esa es su oferta.

—Esa no es una oferta.

—Es una locura—dijo Octavia.

—¿Si nos rehusamos?

—Atacarán. Es la única manera, iré por mis cosas—caminé hacia la carpa que compartía con Clarke y empecé a meter mis cosas en mi mochila.

—No, tú no te irás—Murphy entró a la carpa junto con Octavia, Bellamy y Clarke.

—¿Por qué te quiere con ella?

—No lo sé. Dijo que para ayudarla a tomar decisiones—colgué la mochila en mi hombro e intenté salir de la carpa pero Clarke se puso n frente.

—No vayas, por favor.

—Solo será un tiempo, creo—murmuré—Volveré, la convenceré de luchar contra Monte Weather.

Caminamos hacia las puertas.

—Espera, Kristen. Debe haber otra manera.

—No lo hay, iré y punto.

—Podemos esconderte—dijo Octavia, agarrando mi mano.

—No, esconderme lo empeorará.

—Kristen, por favor.

Vi que los hombres en caballos estaban allí, esperándome y volteé para verlos.

—No vemos en... no lo sé, ¿unos días?—dejé un beso en los labios de Clarke y luego en los de Octavia.

—¡Abran las puertas!—gritó la mayor Bayne y antes del salir del campamento se escuchó un tipo de alarma, los hombres se alejaron.

—¡Vigilen el bosque! ¡Busquen movimiento!

—¡Movimiento en los árboles!

—¡No disparen!

Ví a Kane aparecer.

—Debemos estar cubiertos. Ir a un lugar seguro.

—Es seguro por el momento. Vamos. Tenemos que hablar. Me las arreglé para conseguimos un poco de tiempo.

—¡Cierren la puerta! ¡Vamos!

Entraron a la nave, Finn, Octavia, Murphy, Clarke y yo nos quedamos afuera. Bellamy se acercó a nosotros.

—Kristen, te tienes que ir.

—¿E ir a dónde?

—Podemos protegerte en la nave hasta que solucionemos esto, planearemos algo, la Comandante no puede llevarte porque quiere—empezamos a caminar pero yo pare y ellos me miraron.

—No, es parte de la tregua, si no voy no hay tregua. Tengo que ir—caminé hacia la salida de la nave pero Octavia y Clarke se pusieron en frente—Muévanse.

—Tomen sus cosas y vayan a la puerta de Raven. Ya se está encargando de cortar la energía de la cerca—dijo Bellamy, ignorando lo que dije.

—No, chicos—acomodé la mochila en mi hombro y suspiré—Debo ir. ¿No quieren tener una tregua?

—Si, pero no así—Murphy me cargó en su hombro y caminó hacia la puerta de Raven, Clarke y Octavia caminaban detrás.

—¡Murphy, bájame!

—No vamos a discutir sobre esto.

(...)

Murphy caminaba por el bosque, aún conmigo en su hombro, Clarke y Octavia vigilaban y yo me había rendido en hacer que me suelte, mis brazos y mis manos colgaban como si fuera una muñeca de trapo.

—No pesas nada—se burló Murphy.

—Ajá—murmuré, cerré mis ojos y sentí como algo me golpeaba, abrí mis ojos y vi una herida en mi mano.

—Ten más cuidado, no es una bolsa—escuché que dijo Octavia, la miré, agarró mi mano y la revisó—Te curaremos cuando lleguemos—asentí y volví a cerrar los ojos mientras tarareaba una canción.

—¿No han pensado en cómo era la Tierra antes de todo esto?

—Habrá sido hermoso y después alguien vino y lo arruinó todo—dijo Clarke sin dejar de caminar, mirando hacia todos lados.

—Tenemos que hablar—me susurró Octavia y asentí.

—Toda la sangre se va a subir a mi cabeza—dije.

Murphy me bajó, vi a Raven, Bellamy y James.

—Trae vendas—le dijo Clarke a Bellamy y él corrió a buscar, le dijo que traiga más cosas pero no presté atención.

—¿Qué te pasó?

—Casi caigo, me choqué con un árbol con espinas y ella también.

Clarke me curo y vendo la mano y nos sentamos.

—¡Tenemos compañía, ven acá!—todos salimos con armas.

—Agáchense. Terrícolas—nos pusimos detrás de unos pedazos de árboles caídos y miramos hacia todos lados, vi terrestres corriendo de un lado a otro.

—Estamos rodeados.

—Chicos, tengo que ir. Se va a enojar y será peor—susurré.

(...)

—No se están acercando.

—Se mantienen fuera del alcance. Probablemente esperan que oscurezca.

—Si los atacamos ahora, al menos los tomaremos por sorpresa—dijo Murphy y Octavia se sentó a mi lado.

—Ni siquiera sabemos cuántos hay ahí afuera.

—No escucho una idea mejor, Clarke.

—¿Dejarme ir?—dije, tapando mi cara con mis manos.

—No, Kristen, no irás con ella.

—Bien, Murphy, James, vigilen arriba—dije y ellos subieron—Ustedes vigilen afuera pero no salgan del campamento—me acerqué a Clarke y la abracé—Que nos veamos otra vez—susurré y al separarnos me miró confundida.

—Lo haremos—dejó un pequeño beso en mi boca y sonrió.

—Sí—salió de la nave para vigilar, me acerqué a Octavia y la besé, abrí una puerta en el suelo—Ten cuidado.

—Tú también—iba a bajar pero ella agarró mi mano—Después de lo que pasó la otra noche, ¿qué somos?—sonreí de lado.

—Te lo diré cuando vuelva—besé su mano y bajé.

Narrador omnisciente

—¿Ves algo?—le preguntó Raven a Octavia.

—No.

—Alguien viene. Allí.

Vieron a Kristen ponerse en la entrada del campamento y se levantaron.

—¿Kristen?

—No—ella volteó para mirarlos y les sonrió.

—¡Kristen!

Unos terrestres aparecieron, la subieron a un caballo y se la llevaron.