Capítulo 10: Un hombre furioso es muy peligroso.

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Usui disfruta mucho de hacer sufrir a mi hermano, en todo este encuentro él no ha hecho más que esquivar y bloquear los ataques de este loco, en el proceso se ha llevado varios cortes, unos más profundos que otros.

-¡Hermano defiéndete! No te preocupes por mí-

-Sabes que eso me es imposible, jamás te haría daño Akina-

Arremete contra mi hermano una vez más y este retrocede, esta agitado y cansado, le cuesta un poco de trabajo respirar, pero aun así sigue sin desenfundar su espada.

-Vaya, que fácil será matarte- Se ríe, levanta su espada y está listo para atacar una vez más.

Justo cuando va a soltar otro ataque, se detiene repentinamente, Usui me suelta y escucho como suelta un gruñido de dolor, me alejo de él y veo que una espada le ha atravesado un costado de su abdomen.

-Eres todo un idiota Usui, ¿Creíste que de verdad te dejaría sin supervisión?-

Miro en dirección a la voz y veo al señor Shishio, se ve muy furioso, saca su espada del abdomen de Usui y luego le mete un puntapié haciendo que este caiga al suelo. Él se acerca a mi preocupado mientras me revisa con sus ojos.

-Lamento haber tardado mucho, al final...-

-Me elegiste- Digo en voz baja mientras lo abrazo con fuerza y hundo mi cara en su pecho.

-Tsk... eres una chiquilla bastante problemática, te envío a ponerte a salvo y te involucras en un gran embrollo-

-Lo siento, sabes que no puedo evitar meterme en problemas- Rio un poco mientras me alejo de él.

-Bueno Usui, tantas ganas tienes de enfrentarme adelante-

Mi hermano me toma del brazo y me aleja de ellos, ambos hombres se ponen en posición de combate, las espadas chocan de forma constante para luego ver como la espada de Usui se rompe a la mitad.

-Eres un inútil y débil, no mereces vivir-

-¡Makoto espera!- Detengo su mano antes de que clave su espada en el pecho de Usui.

-¿¡Por qué lo proteges!? Te estuvo usando como un escudo y tú... tú simplemente me detienes para no matarlo-

-¡Por que no está bien matar a las personas!- Me pongo entre los dos hombres. –Sé que no merece vivir y que es una persona horrible, pero señor Shishio sé que usted es mejor que él-

Antes de que pueda contestarme, él me hace a un lado y detiene el ataque de Usui antes de que este me apuñale por la espalda, mi sangre se hela al ver como este no se detendrá hasta cumplir con su objetivo.

-¿Ahora si me dejaras matarlo? Él no tiene remedio, siempre será un asesino-

-Igual que usted señor Shishio, ¿Realmente cree que caí en ese absurdo cuento de su esposa? Estoy seguro de que usted la está usando únicamente para mantener a raya a su hermano y cuando todo esto acabe se deshará de ella como si fuera una basura-

-La verdad es que me importa muy poco lo que pienses Usui, siempre fuiste un imbécil que no puede contener su sed de sangre, creyendo en la estúpida ilusión de que podrías vencerme algún día- Se burla de él mientras le hace retroceder poco a poco. –Ya han pasado 3 años desde que te dejé ciego, juraste que te harías más fuerte y me matarías, pero yo te sigo viendo como ese debilucho que se puso a llorar por su vida en aquella ocasión- Se parte de risa mientras arremete contra el hombre ciego.

El pobre hombre no puede hacer nada más que defenderse ya que Makoto le golpea sin tregua con su espada, el sonido del metal chocando retumba en mis oídos una y otra vez; Pensé que con su espada rota Usui se daría por vencido, nunca me imaginé que fuera a sacar otra.

Un amor extrañoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora