Un Simple Empleado [NamJin Adaptación]

-Capítulo 13-

-¿¡Y a ti que mierda te importa!? -Le gritó a Jin.

-¿Ves? ¿Ves como te pones?, estás representando a alguien que no eres. -Detalló.

-A ti no te pedí consejos de cómo puedo ser, deberías dejar de andar espiando a la gente, eres solamente un empleado, no eres mi madre ni nada mío. -Encaró.

-Deberías de valorar a las personas, no por s situación económica ni a lo que se dedica, valorarlas por como es, aprende a ser tú mismo, no seas otro... solo eso te digo. -Aconsejó Jin y se fue.

NamJoon tenía un revoltijo en su cabeza, lo había visto llorar y a lo mejor creería que era un hombre débil, los recuerdos lo atormentaban siempre, aunque quiera olvidarlos, siempre están allí para arruinar su vida, no había podido estar con ningúnhombre o mujer desde el accidente, se sentía culpable por la muerte de su ahora ex novio, lo extrañaba pero sabía que nunca más volvería para estar con NamJoon.
Jin le había dicho que cambiara su personalidad, que se muestre como realmente es, pero: ¿quién es?, si ni el mismo lo sabía, además ¿para qué hacerle caso a una persona de clase baja?, ¿por qué  debería de hacerle caso a una persona como él?, que lo único que sabía era estar espiando a las personas.

[...]

Jin entró a su cuarto pensando en aquella escena, donde lo vio llorando, donde supo que realmente tenía sentimientos y que estaba sufriendo en silencio.

El jamás cambiará, algún día llegará alguien que lo hará cambiar, quizás para bien o para mal.

Se puso su pijama y se acostó en la gran cama, se sentía tan solo, necesitaba a su familia, a sus papás, a su hermano y en esta casa lo único que pasaba era rabia y malos tratos.

De tanto pensar y pensar, se quedó profundamente dormido.

NamJoon, por otro lado, no podía ni cerrar su ojo, estaba inquieto en su cama, estaba que se iba a dar una ducha o a tomarse un vaso de leche para relajarse, le inquietaba que sea Jin el que lo haya visto llorar, seguramente si se atrevía a molestarlo, este saldría con que era una niñita.

[...]

Al otro día, Jin se levantó a ducharse y a vestirse, salió de la habitación para dirigirse hacia la cocina, y quedó anonadado con lo que vio, Kim NamJoon levantado a las 8 de la mañana, tomando desayuno en la cocina, Jin no podía creer lo que sus ojos veían, él levantado y tomando desayuno a esa hora era algo que no se veía todos los días, aunque pudo notar las ojeras que llevaba.

Seguramente no durmió bien anoche.

-¿No quieres comer nada más? -Preguntó poniéndose su delantal.

-No. -Dijo seco.

-Bueno. -Dijo Jin poniéndose a lavar unos platos sucios que habían, hoy le tocaba un día duro, Jimin no estaría porque tenía que ir al médico, por lo tanto tendría el día libre, mientras él se ocupaba de todo en la casa.

-Emm... Lo que viste anoche... -Decía nervioso.

-Sobre anoche, no te preocupes. -Dijo Jin dejando la loza a un lado para mirarlo- No se lo contaré a nadie si es lo que te preocupa, no soy de esas personas, y si piensas que te viste como una niñita frente a mis ojos, no lo eres, yo también soy hombre, también lloro como tú. -Dijo.

-Bueno. -Solo alcanzó a decir eso, ya que todo lo que Jin dijo era lo mismo que NamJoon le quería pedir- ¿Me darías más jugo?, por... favor.

-Claro. -Dijo Jin y depositó un poco en el vaso.

Espera... espera un poco, ¿le había dicho "Por favor"? Eso jamás se lo había dicho, Jin por dentro estaba demasiado sorprendido ante su actitud, ¿le había hecho caso en lo que le aconsejó anoche? No era algo que se esperaba pero si lo tomó, bien por él.

-Cuando termines de lavar eso, ¿podrías hacer mi habitación? Por favor. -Se levantó de la silla- Ah... y te aviso que llegaré tarde a sí que no hagas almuerzo para mi.

-Okey. -Dijo Jin.

Y salió, Jin lo vio entrar a su auto y salir, no tenía idea de hacia dónde iba, pero salió. Un plato menos, eso era bueno, no tendría que cocinar mucho, para Taehyung, Soobin y BamBam. BamBam no era muy de su agrado, lo único que quería era que se fuera lo más pronto posible, se levantaba a la hora qe se le antoje y sólo peleaba con él.

[...]

Ya eran las 4 de la tarde y Jin paseaba por el jardin esperando el furgón de Soobin, quien llegaría de la escuela en un momento más, paseaba tocando las hermosas flores que se encontraban en el jardín, flores de todos los colores, el pasto bien cuidado, todavía se sorprendía de lo hermosa que era la casa, parecía de princesas, de esas que solo salen en los cuentos, películas, telenovelas o libros, se sentía afortunado de trabajar en una casa así.

De repente se le vino a la cabeza la rehabilitación de Jungkook, hoy era jueves y empezaba el lunes con ellas, deseaba tanto que él pudiera caminar y que disfrutara de su infancia como un ni lo normal y no encerrado como lo hacía siempre, le dolía verle así todos los días, sentado en una silla de ruedas, aburrido, ni amigos ha podido hacer porque no le gusta salir y que los niños le vean con su defecto.

Sus pensamientos fueron interrumpidos por la bocina del furgón de Soobin, el cual se bajó y corrió hacia Jin quien lo esperaba con los brazos abiertos.

-¿Cómo te fue pequeño? -Preguntó Jin cargándolo.

-Super bien. -Detallo- Tengo tarea y es de dibujo.

-¿Nesecitas ayuda?

-No, en el dibujo me manejo muy bien.

-Bueno. -Dijo bajándolo de sus brazos- Entonces ve, corre y hazla, te llevaré galletas y un vaso de leche luego.

Soobin asintió con la cabeza y corrió hacia la casa, lo contrario a Jin quien se fue caminando lentamente, a lo lejos vio a BamBam buscando a alguien con la mirada, el castaño poco a poco se acercó.

-¡Eu! -Llamó refiriéndose a Jin.

-¿Qué? -Preguntó Jin.

-¿Viste a NamJoon? Lo ando buscando por todos lados y no aparece. -Se quejó.

-El salió temprano y dijo que no volvería hasta la noche, no dijo hacia dónde sólo dijo eso. -Avisó.

-Se atrevió a salir sin mí. -Decía BamBam como si se fuera a desmayar.

-Tienes que darte cuenta que no todo gira alrededor tuyo. -Jin no supo ni porqué dijo eso pero lo hizo.

-Parece que te quedaron gustando mis cachetadas, ¿no? -Dijo molesto.

-Duele tanto que te digan la verdad. -Dijo Jin.

-¿Sabes? ¿Por qué no te callas la maldita boca empleado de cuarta?, no me rebajo a tu nivel, eres tan poca cosa, no se como te aceptaron en esta casa, no eres un buen ejemplo para nadie. -Dijo el castaño.

-Ni mucho menos tú. -Se defendió.

-Por lo menos tengo dinero y no vivo en una casita de perros. -Dijo retandolo.

-No podré tener dinero, ni una lujosa casa, pero tengo educación, tengo dignidad y no soy hueco y eso es algo que tu no tienes. -Dijo Jin fulminándolo con la mirada y pasando al lado de él rozando sus hombros bruscamente.

El castaño quedó boquiabierto ante lo dicho, no sabía que palabras articular, pero se veía la furia que tenía, ya que estaba rojo.

Jin entró a la casa con una sonrisa en su rostro, le encantó haber dejado sin palabras al castaño, se sintió poderoso por un momento.

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VOLVIIIIIIIIII

Mextrañaron? Porque yo a ustedes si.
Espero y les guste el capítulo.

Próxima capítulo: ????

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