Un Simple Empleado [NamJin Adaptación]

-Capítulo 2-

Jin picaba cebollas mientras Jimin cocía verduras en una olla, él agradeció a su madre que le haya enseñado a cocinar tan rico como ella lo hacía con sus manos de diosa, dejaba las comidas riquísimas.

-Han tocado el timbre, iré a abrir, deben ser los señores de la casa. -Dijo Jimin, el nerviosismo invadió su cuerpo, conocerá a los dueños de esta gigante casa.

-Okay. -Sólo pudo decir eso.

Jin se quedó tenso picando cebollas, sintió las voces de personas entrar a la casa, no quería asomarse a ver si eran ellos o no, estaba nervioso y no podía ni pensar... Hasta que escuchó pasos que venían cada vez más cerca.

-El es el nuevo empleado que ha llegado hace unas horas atrás señora Taeyeon. -Dijo Jimin señalando a Jin.

-Muho gusto señora Taeyeon. -Jin saludó amablemente a la señora que se encontraba mirándolo de arriba hacia abajo.

-Igual, espero que hagas tu trabajo bien, porque o si no estas despedido. -Dijo fríamente Taeyeon.

-No se preocupe trataré de dar lo mejor de mi. -Dijo Jin ya más nervioso que antes por el tono de su jefa.

Esta no dijo nada y se retiró del lugar, Jin suspiró de alivio y miró a Jimin.

-Ella es así, debes acostumbrarte todos en esta casa son así, menos el niño Soobin, él es un angelito de 7 años, Tae tiene 17 años y NamJoon es igual que sus padres, frío y de un carácter insoportable. -Dijo Jimin mientras se destinaba a volver a cocer los alimentos.

-Trataré de ser lo más amable con ellos, para no tener problemas. -Acotó Jin.

-Deberías ir a hacer las habitaciones, aún no están hechas. -Ordenó amablemente Jimin- Ah, y esta vez tienes suerte, no te harán usar uniforme, porque no tienen más y tienes trabajar con lo puesto, solo con un pequeño delantal en tus caderas.

-Buenísimo... bueno iré a hacer los dormitorios.

Sonrió y se retiró del lugar.

Jin fue hacia el comedor y vió que sus patrones iban saliendo solos sin sus hijos, bueno como toda pareja a veces necesitan su intimidad y pasar ratos solos -Pensó Jin.
Subió las escaleras, al fondo había un cuarto que decía "Tae Tae", el hermano del medio de los Kim, tocó antes de entrar y él abrió la puerta.

-Hola, soy Kim Seokjin, el nuevo empleado. -Sonrió tiernamente al muchacho que se encontraba mirándolo como si hubiera visto un ángel parado en la puerta de su habitación- Y vengo a hacer tu... -El miró hacia adentro del dormitorio- Tu habitación. -Terminó de decir para sonreirle otra vez.

-C-Claro. -Tartamudeó él- Pasa. -se hizo a un lado para que él entrara a la habitación.

-Gracias. -Dijo Jin entrando.

Jin miró cada rincón del cuarto, Taehyung le dijo que iba a la escuela y se retiró de la habitación, Jin se sentó en la cama de aquel muchacho.

¿Qué se sentirá dormir en estos colchones tas suaves y cómodos?, la casa es enorme y tiene una decoración increíble, es hermosa por decir poco, mis padres estarían dichosos de vivir aquí, la cuidaría como un pirata cuidando su preciado tesoro.

Jin ordenó cada objeto del dormitorio, la cama, el escritorio, su ropa, limpió el baño y terminó.

Dió un suspiro de alivio al ver el dormitorio totalmente ordenado, salió del dormitorio para entrar al otro que era del matrimonio donde dormía la señora Taeyeon y el señor JongIn.

Amó totalmente la gigante cama donde dormían 2 pero podían caber 6 personas.

Cerrando la habitación del matrimonio fue al cuarto del pequeño Soobin, sentía curiosidad de conocerlo.

Tocó la puerta de la habitación y entró en ella, el niño estaba sentado en un escritorio donde Jin supuso que estaba haciendo sus tareas.

-Hola pequeño. -Dijo Jin entrando al cuarto.

-Hola. -Sonrió- ¿Quién eres? -Preguntó con curiosidad.

-Soy Kim Seokjin, el nuevo empleado y vengo a ordenar tu hermosa habitación, ¿Me autorizas para hacerlo? -Preguntó el sonriente.

-Si, claro, a mi no me gusta hacer mi cama. -Se quejó Soobin.

-Pues no tienes que hacerla, porque ahora estoy yo.

-¿Te gusta? -Preguntó el pequeño alzando una hoja de block con un dibujo de una familia feliz.

-Está hermoso, ¿Es tu familia cierto? -Dijo Jin tendiendo la cama.

-Si, sólo que hay una diferencia. -El niño agachó la cabeza- Esta familia es feliz, pero mi familia no lo es, ellos siempre pelean y yo tengo que escuchar siempre sus discusiones. -A Jin se le estrujó el corazón al escuchar aquellas palabras del niño.

El dinero no lo hace realmente feliz.

-Eh... ¿Quieres hacer algo entretenido? -Dijo Jin saliendo del tema.

-Prefiero seguir pintando. -Exclamó Soobin.

-Bueno, si es así, iré a hacer mis deberes.

Jin salió de la habilitación del pequeño con una sensación no muy buena, sentía pena por todo lo que aquel chico tenía que aguantar, en esta casa no todo es de color rosa, solo aparentan ser esa familia feliz pero realmente no lo son.

El muchacho entró a la última habitación que le quedaba, tocó pero nadie abrió, así que se decidió por entrar solamente, el cuarto no estaba tan desordenado, solo la cama y unas prendas de vestir que estaban tiradas en el suelo, la pieza era de color negro y blanco, la cama era grande y cómoda. El empezó a recoger cada prenda del suelo y ponerlas entre la ropa sucia y la limpia en el closet, hizo la cama y limpió los muebles de la habitación.

Ahora le tocaba ir por el baño, era asombroso que cada habitación tuviera un baño, un baño para cada uno, en su casa sólo tienen uno y al dia hay muchas peleas por quien usará el baño primero.

Jin iba a abrir la puerta de aquel baño, pero alguien más lo hizo antes...