Capítulo XVI

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Capítulo XVI: ¿Quien carajos son los De Santis?

Valerie B.

La pregunta de Max me viene dando vueltas en la cabeza y sinceramente eso me está cansando, porque aún no entiendo cómo mierda los De Santis sé enteraron que Jackson había sido quien mató a mi madre. Cuando la información llegó hasta nosotros no lo creímos hasta que supimos acerca del canibalismo de estos, fue inevitable no pensar que él fue parte de ello.

Pero aún más sorprendente era que los De Santis nos lo hicieran saber, pues aún con enviarlo en un anonimato, conocía tan bien el olor de Anthony, que fue cuestión de minutos para saber que se trataba de ellos, ahora la verdadera pregunta era...

¿Por qué querrían ayudarnos? Ya que por lo que tengo entendido Lia está bastante apegada a Dante...

- Valerie ¿creés que los Lightwood también tuvieron algo que ver con la muerte de los progenitores de Anthony? - me pregunta Matt.

- A este punto no se que carajos pensar, desde que regresamos esos hijos de puta no han hecho más que sorprenderme con cada uno de sus secretos. -

- Y algo me dice que esto no es ni la mitad de todo lo que le ocultan al mundo. - opina Max, mientras toma de su copa de vino.

- Pues hasta ahora sabemos que son unos jodidos caníbales, que asesinaron a nuestra madre y puede que también al señor y señora De Santis...-

- ¿Pero porqué? - pregunto mirando a mis hermanos. - Nadie va asesinando a diestra y siniestra solo porque sí.

- Lo de nuestra madre puedo deducirlo como que ella lo rechazó y él no quedo conforme, por lo que tuvo que matarla.... Pero ¿y los De Santis?- pregunta Matt, como si su cabeza no dejará de trabajar intentando atar cabos.

- Algo bebieron saber, tal vez se dieron cuenta de lo que nosotros ahora sabemos y simplemente los mataron para que no hablarán. - asegura Max

- Debe haber algo más. - les digo dudosa. - Algo de lo que aún no nos hemos enterado y que tal vez los hermanitos sepan. - continúo. - Y que mejor ocasión que está, para hacer una visita por Francia.

Me encamino al ala este de la mansión y le pido a la servidumbre que me dejen sola, tomo el teléfono de repuesto y marco su número, suena una... Dos...

- ¿A qué se debe la dicha de tu llamada?... Querida esposa.-

- Necesito verte. -

- Y yo tenerte. -

- No empecemos Darel...-

- ¿No empecemos qué amore?, O acaso me dirás qué el estúpido de tu hermano te lo hace mejor que yo. - sin duda con este imbécil no se puede hablar de otro asunto que no sea la comparación de él con Maximilian.

- Darel no voy a hablar de quién me sacia mejor, así que controla tus malditas ganas de tenerme en tu cama y escucha... -

- Me prende cuando te pones así amore... Pero dime, ¿Qué necesita mi maldita esposa?.

- Tan maldita que no dejas de pensar en mí... Necesito verte en el casino, tengo preguntas y creo puedes ayudarme antes de que me vaya...

- ¿A dónde mierda vas sin mi? Natasha no creas que estoy dispuesto a dejarte escapar una vez más, eres mi maldita mujer y por ello pretendas que te deje ir nuevamente, sigue jugando pero ten en claro que eres libre de mis cadenas porque así lo quiero, y si se me da la gana voy por ti aún tenga que matar a los imbéciles que se hacen llamar tu familia. - este idiota me excita cada que se pone así, y apostaría un millón de euros a que justo ahora está caminando al rededor de la habitación, apretando el puente de su nariz, soy su esposa y por ende conozco cada movimiento de él. - Maldita mujer, ¿qué mierda me hiciste para que no deje de pensar en ti?.

- Te veo en el casino en una hora. - le aviso antes de colgar.

Darel... Darel... Darle, ojalá dejara de pesar en él, como él quisiera dejar de pensar en mí, pero como lograrlo si él es todo lo que necesitó, él es la combinación de Maximilian y el policía infiltrado, un maldito mandatario, un jodido sádico, poderoso y hambriento de mi... Hambriento de su maldita mujer.

Salgo de la habitación, pidiendo que me preparen lo que usaré para reunirme con mi esposo.

Tomo un baño rápido, aliso mi cabello, me coloco el conjunto de encaje negro, el cual hace resaltar el color de mi piel, me adentro en el vestido del mismo color, tomo el bolso  junto con las zapatillas, salgo de mi alcoba, bajo las escaleras, me coloco las zapatillas antes de dirigirme a la Jeep que me espera, le indico a Finn al lugar al que quiero llegar, aclarando que no quiero a nadie jodiendo hasta mañana.

Entro al lugar, siguiendo el camino hasta el bar. Y ahí está él, con ese porte autoritario que solo el posee estando o no en traje, pues todo en el es perfección, lo veas en unos jeans, una básica blanca y una cazadora o en un traje a la medida.

Me acerco hasta quedar frente a el, me toma de la cintura con fuerza, pegando su cuerpo al mío, estamos tan jodidamente cerca que me embriaga el olor de su colonia, paso la lengua por mis labios y eso es suficiente para que el se apodere de mi con tanta pasión que me desestabiliza, me hace arder como solo él puede nuestras lenguas luchan por recorrer la boca del otro, sus manos apretando con más fuerza, mientras siento como su miembro se endurece con cada movimiento.

- Natasha... Déjame en ese infierno que tanto me gusta. - pide, pegando su frente con la mía.

- Antes necesito de tu ayuda. - le contesto, suplicando que este maldito autocontrol dure lo suficiente para no montarme sobre él.

- Maldita sea Natasha, ¿no lo puedes dejar para después?

- No Darel, lo necesito ahora...

- Antes de que preguntes lo que tengas es esa cabecita, primero dame el placer de volver a escucharte cantar para mí.

- No seas idiota Darel...

- ¿Quieres respuestas o no?

Le dedicó una mirada asesina, pero termino por pedirle a la camarera que prepare el escenario para mí, ya que está todo preparado subo a éste colocándome en el centro, las luces del lugar se vuelven más tenues, la melodía inunda el lugar, deleitándome con cada tonada, pensando únicamente a quien va dirigida la canción.

- I tried to wean you off
I tried to leave
To say I quit the drug
To say I'm beat
But the word it chases me around every day
Goodbye can't seem to find my mouth in any way.

Dejo que la música me lleve hasta cada momento en el que estuve lejos de él, convenciendome de que aquello solo había sido pasajero, cuando en realidad él se había vuelto la sangre que necesito beber, él es justamente esa droga que no puede dejar un adicto, él siendo el dueño de cada delirio, de cada sueño, de cada fantasía, el siendo mi esposo.

- So. I'll give you my body.
Just don't tell nobody.
I'll give you my body.
'Cause being without you is impossible,
I'd rather be with you and be vulnerable.
I pretend to my friends in the meantime, or they'll tell me that I'm a fool, but I wouldn't be able to feel love.
If it wasn't for breaking rules, maybe fueling the fire means I'm definitely crazy.
Guess I'm willing to burn if you're the one who comes to save me and the thought it chases me around every day, that you're dangerous, but I can't resist in any way...

El resto de la noche se resume en información detallada de quién son realmente los De Santis y un sexo maravilloso el cual no podre sacar de mi mente por dias...

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Bestie's espero hayan disfrutado del capitulo, se que me eh ausentado mucho, pero no quedaba conforme con nada de lo que escribía, en fin espero les haya gustado tanto como a mí.
I love you y mil gracias por su apoyo, cada día se van sumando mas lectoras y eso me trae loca jajaja.
Sin más que agregar, esperen pronto nueva actualización 🔥

Extraña obsesión.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora