Su primer amor, su primer dolor ✨

177 20 0
                                    

Keanu y Leonard volvían de la charla con Robert, completamente en silencio. La charla no había sido buena, y Keanu temía que la cosa siguiera así de tensa, ya habría mas enfrentamientos y tiros que nunca.

—Tendré que tomar otras medidas con respecto a Montoya — habló Leonard al fin

— Tranquilo señor — lo calmó — Todo va a estar bien. Solo tenemos que aprender a manejar un poco más la situación.

— No puedes prohibirle a River ver a Greta...

—No tenía pensado hacer eso, ellos son libres  de hacer lo que quieran, y si necesitan apoyo... No estarán solos. Pero me preocupa lo que Montoya pueda llegar a hacer.

— Robert lo va a entender tarde o temprano, hijo

—Eso espero — susurró el castaño

Cabalgaron hasta detenerse frente a la casa grande. Leo se bajó con cuidado y se giró al verlo

— Quiero que hoy cenes con nosotros — le dijo . Keanu frunció el ceño. Seguro que se estaba refiriendo a él y a la pareja.

—¿Le parece señor? — inquirió

— Si... Quizas te lleves una gran sorpresa

—Está bien — asintió

Leo entró a la casa. Keanu soltó un lento suspiro y miró hacia el cielo. La noche estaba completamente despejada. Aquel manto de estrellas era un espectáculo. ¿Cuántas veces se había tirado a intentar contarlas? Miles...¿Lo habia conseguido? Nunca. El infinito universo sobre su cabeza, lo llenaba de una cierta alegría. En ocasiones hacía que el mismo se sintiera infinito. Jamás llegaba a conocerse del todo. Siempre le aparecía una faceta nueva, un sentimiento nuevo, un miedo nuevo, una pasión, una nesecidad.

No podía evitar pensar en la nota que había encontrado casualmente en el pequeño valle. Sonrió levemente y cerró los ojos para recordarla. Jamás había conocido otra niña con una sonrisa tan bonita como la de ella. Jamás le había gustado, siendo un niño, tomar de la mano tanto a una niña como a ella.

Y de repente aquel día en el que se marchó entró a su cabeza aquel sentimiento que lo habia invadido jamas volvió a sentirlo. Se había sentido totalmente desolado, angustiado, perdido. Era como sie se día le hubiesen arrancado un pedazo de corazón, así sin más. Y recordó sus lágrimas, recordó el dolor en su linda mirada... Ella no quería irse, entonces ¿Porqué no volvió? Un año despues de su partida el la había estado esperando... Pero jamás llegó. Tampoco le escribió como lo había prometido, tampoco lo llamó.

Quizás ella si se olvidó de él.

Sonrió con amargura, era completamente ilógico que él todavia pensara en ella... Lo más ilógico era que todo el día había estado así. Jamás se le había ocurrido preguntarle a Leonard  que había sido de la vida de , ______ Sheep. Lo poco que sabía era gracias a su madre, y tampoco era demasiado. En los ultimos años ella ni se le había asomado por la cabeza, pero al parecer hoy estaba completamente incrustada en su mente.

Se bajó del caballo y se quitó el sombrero. Se secó el sudor de la frente y se observó a si mismo. Estaba hecho un desastre. Tendría que ir a areglarse si si jefe quería que cenara con él esta noche.

Tendría que fijarse en la ropa adecuada para una cena. Lo único que él solia utilizar eran camisas que terminaban sucias, pantalones desgastados buenos para cabalgar y sus siempre, cómoda botas. Talvez vez ir asi vestido a cenar... No iba a hacerse mucho problema.

Entró a la cocina sobresaltando un poco a su madre. Está se giró a verlo rápidamente con la mano sobre el pecho.

— Me asustaste — le dijo exaltada

Salvaje || Keanu ReevesDonde viven las historias. Descúbrelo ahora