La casa en el árbol | Tanzen

Capitulo V || Aniki ||

Kaigaku nunca fue una persona muy sociable, más bien su comportamiento era un poco frío, no le interesaba mucho la opinión de las demás personas sobre como se comportaba.

Eso no aplicaba del todo en cierto chico rubio, desde que era un bebe y el pelinegro tenía apenas cumplidos los 6 años se molestaba con facilidad, todos los llantos que pegaba el niño rubio y no lo dejaban dormir, las múltiples veces que no quería comer y aventaba la comida, realmente lo fastidiaba, el pelinegro parecía ser un explosivo y zenitsu un niño con un cerillo encendido en cualquier momento podía hacerlo explotar; kaigaku afirmaba que zenitsu era el favorito de sus padres siempre que podía, por el momento no podía comprender por que derrepente alguien mas llegó, estaban bastante bien los 4, el, su papá, mamá y el abuelo, ¿Por que tendría que llegar alguien más?, era una pregunta que el pelinegro se hacía constantemente, no necesitaban a nadie más, el rubio era solo intruso, se tenía que ir.

Con el tiempo eso fue cambiando y esas preguntas fueron cambiadas por otras.

Aquel bebe rechoncho y tierno poco a poco fue creciendo, siguiendo las huellas que dejaban sus pasos, ¿por que tenía que hacer todo lo que yo hago? ¿Por que siempre me sigue a todas partes? es un pequeño martirio, el rubio lo perseguía por toda la casa, se vestía como el, actuaba como el y tomaba sus cosas sin permiso para ser como el. Digamos que era su modelo a seguir (en lo que le conviene), el pelinegro decía que odiaba que copiará todo lo que hacía, sin embargo la realidad era otra, aveces al ver como el rubio lo admiraba de esa forma se sentía halagado, era como un mini Kaigaku pero rubio y fastidioso; hubo un tiempo donde zenitsu fue demasiado juguetón, lo único que quería era jugar con su Aniki lo jalaba de la mano constantemente el rubio admiraba todo lo que hacía su hermano mayor y esto el lo sabía y se dio cuenta de que no solo era su hermano, era su mejor amigo y compañero.

Cuando eres el hermano mayor te conviertes en el mejor consejero, zenitsu siempre acudió a Kaigaku en absolutamente todo lo que no lograba entender, este solo se dedicaba a aconsejar y enseñarle todo lo que sabía, el pequeño rubio siempre que llegaba del jardín de niños lo primero que hacía era esperar a su hermano con bastante emoción siempre lo recibía con un gran abrazo, por fin esté se dió de que lo único que pretendes es lo mejor para él, el pelinegro correspondió cada abrazo, y respondió cada pregunta que podía, el mayor no lo supo desde un inicio pero realmente amaba a ese niño, era bueno tener a alguien en tu vida que siempre te dirá las cosas como son y será humilde contigo de corazón.

Zenitsu siempre tuvo una gran confianza a kaigaku, en especial cuando esté empezó a tener cambios en la pubertad, a zenitsu le apenaba pedir ayuda o consejos si no era su hermano mayor, de el lo aprendio todo.

El mayor se encargo de pulir la mejor parte el para que el rubio fuera una gran persona, empezaba a esforzarse mas de lo común, cada etapa aue el había tenido su hermanito la pasaría y quería que el fuera feliz.

Cuando sus padres murieron, los sentimientos de kaigaku solo se reforzaron mas, pensaba en suplantar la ausencia de sus padres, el rubio se veía en ocasiones deprimido, a pesar de ello sacaba sus mejores sonrisas al pasar el tiempo con el.

Kaigaku observo en primera fila como Zenitsu crecía cada vez mas ¿por que tenía aue crecer tan rápido? quisiera regresar en el tiempo y poder aprovechar el tiempo perdido, el rubio dejo de ser un niño hace tiempo, pronto tuvo su primera cita, un fracaso a decir verdad, Zenitsu llegó llorando a los brazos del mayor mientras balbuceaba cosas que ni el entendía, su rubio nunca fue popular, su personalidad era un poco rara, los demás no lograban ver como era realmente solo veían sus defectos ¿Por que lo demás no podían apreciarlo de la misma forma en la que lo hace?.

Pasaba el tiempo y pudo observar como su hermanito ya no se veía tan atraído por las mujeres, es decír, antes era un completo acosador, siempre buscaba salir con cualquier chica linda que viera e incluso se enojaba con su amigos si salían con una chica sin presentarsela antes.

Cómo aquella vez que llevo a uno de sus amigos, Douma a cenar, zenitsu actuaba de forma nerviosa y siempre se sonrojaba, esa no era su forma habitual de actuar, le pareció bastante extraño ver un cambio tan repentino, lo paso y creyo que solo era una etapa, pero se equivocó.

Mas tarde mientras intentaban dormir el rubio le confesó que le gustaban tanto mujeres como hombres, kaigaku se sorprendió aunque lo hubiera sospechado, el rubio se veía un poco tímido y ansioso por esperar su respuesta, el pelinegro simplemente lo acepto, no hiba a dejar que una diferencia acabará con la relación que habían formado, solo quería que Zenitsu fuera feliz.

Después de algunos días el abuelo les dió la noticia de que deberían de mudarse fue un gran cambio para todos, en especial para el rubio le costaba mucho hacer amigos y no quería separarse de ellos. Aún así kaigaku se encargaría de hacerlo feliz en su nuevo hogar.

Unos días después zenitsu le comentó sobre cierto chico extravagante con el que saldría, kaigaku en ese momento se sintió feliz, tal vez por fin su hermanito se sentiría mejor, o eso pensó.

Se encargo de hacer la cena con normalidad, pasaban poco de las 9 y se extraño de no saber nada de Zenitsu, se empezaba a preocupar, así que decidió comentarle a su abuelo, este obviamente también se preocupó, comenzaba el viento a soplar con un poco mas de fuerza, era un aire húmedo, asi que supuso que pronto comenzaría a llover, le dijo a el mayor que el iría a buscarlo y este acepto, Kaigaku ya era una adulto asi que no habría mayor problema por dejarlo ir, el pelinegro tomo las llaves colgadas en la sala principal y fue directamente a encender el auto, comenzó a conducir mientras llamaba a su hermano, este lo mandaba directamente a buzón igual con los mensajes que no llevaron, al llegar al lugar donde lo había dejado se dispuso a buscarlo y a preguntar a las personas si lo habían visto pero no había señales de el.

Kaigaku lo busco por toda la cuidad e incluso tocaba en las puertas de las casas para preguntar por el, estaba completamente desesperado, el no quería que le pasará nada, el único lugar que quedaba era el bosque, el pelinegro rezaba por que estuviera sano y salvo al mismo tiempo que tomaba su celular para alusar el camino.

No tardó en comenzar a llover, algunos truenos comenzaban a sonar, las lágrimas se derramaron en su rostro, no quería perder a nadie más.

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Capitulo 5 terminado :D creo que hoy mismo estrenaré el 6 con las perspectiva de Tanjiro.

Muchas gracias por su apoyo la historia ya tiene 200 lecturas, enserio me ayudarían mucho comentando y votando por la historia para que siga haciendo contenido como este.

En este capítulo me base mucho en mi experiencia como hermana mayor, espero y les haya gustado, aquí traté de explicar un poco mas la relación de Kaigaku y Zenitsu para que entiendan mejor su comportamiento. UwU