DIRTY DIRTY. ➸yoonmin

Be my Daddy

Jungkook se sentía mal. A pesar de que las cosas en su grupo de amigos ya estaban menos tensas que antes, él no se sentía bien. Yoongi al fin había decidido formalizar algo con Jimin. 

Se sentía alegre, sí, porque ambos eran sus amigos y le alegraba la idea de pensar que ellos se sentían felices y podían expresar sus sentimientos sin miedo. Pero, también le entristecía el hecho de cómo sus sentimientos hacia Jimin parecían no terminar nunca. 

¿Por qué su corazón no podía entender que el chico bonito ya era feliz? ¿Qué tan difícil era olvidarse de él? Se sentía frustrado y enojado consigo mismo, se había obligado por miles de medios a olvidarlo pero era casi imposible.

Y aunque era claro que solo estaba interesado en Jimin, eso no evitaba que se fijase en las miradas que le echaba de vez en cuando Taehyung. Si bien ellos no habían tenido un roce fuera de lo amistoso (a excepción de cuando fingieron ser novios), eso no evitaba que una creciente tensión se formara entre ellos. 

—¿Qué opinas? ¿Debería ponerme esta? —señaló el menor la camisa blanca con unas letras estampadas que decían "Send nudes". 

Taehyung, que actualmente lucía un bonito rubio en su cabello, se rió.

—¡Yah! No te rías y ayúdame, tonto. —se quejó el de cabellos negros haciendo un puchero, lanzándose a la cama.

—No entiendo por qué te esfuerzas tanto en parecer lindo... —comentó fugazmente el rubio, acercándose a su amigo, tocando su mejilla— si naturalmente eres precioso. 

Las mejillas de Jungkook se tiñeron de un escarlata fuerte, luciendo avergonzado por dicho comentario.

Allí fue cuando la cuestionante volvió a su cabeza: estaba frente a Taehyung; él era interesante, millonario, y muy atractivo, ¿qué le impedía aceptar la clara demostración de sentimientos? No había nada que lo detuviera esta vez.

Jungkook tendría que buscar un medio para entretenerse, ¿no crees? 

—Quiero agradarle en nuestra primera cita.

Aunque de una noche eso no pasaría.

—Eso suena tan superficial —rodó sus ojos—. Mejor podrías quedarte conmigo y vemos películas.

El menor sonrió; no fue una sonrisa inocente como las que siempre daba, esta traía un rastro de coqueteo. Se acercó a su rubio amigo, gateando, quedando así sentado en su regazo.

—¿Y cómo podría divertirme esta noche? —dijo dando a entender el doble sentido de aquella frase—. Salir era mi único plan por hoy, si me quedo contigo, ¿qué podríamos hacer?

Taehyung también sonrió sosteniendo las caderas del menor para ponerlo mejor en su posición, sacándoles un jadeo a ambos. 

—No sé qué tanto ibas a hacer con ese tipo hoy, ni tampoco sus intenciones contigo. Pero ahora estás conmigo y nos vamos a divertir. 

—Entonces, Taehyung, ¿podrías ser mi Daddy esta noche?

Y ante esa frase, con solo la hermosa luna como testigo iluminando la habitación, sus labios se unieron en un apasionado beso.

Y el resto, ya todos lo saben.