-Entonces que coño hacemos?- maldijo Malfoy en voz baja.
-Nada, pezado de idiota! Tenemos que esperar a que no haya nadie para poder marcharnos sin ser vistos.- dijo Pansy en susurro que parecia más bien un grito.
-Quién fue el genio al que se le occurió este plan de mierda?- dice Theo con una mueca en la cara.
-Eso no es importante.- le respondo yo. -Además que cuando se me occurió el plan no contaba con todos estos contratiempos.-
Nace un silencio entre nosotros que esta cargado de tensión. Nadie se mueve, pero el cuerpo de Theo estaba pegado al mío, y ya empezaba a sudar del calor.
Era una situación un poco embarazosa. Pero estabamos yo, Malfoy, Pansy y Theo dentro de un armario pequeño y aun encima estabamos apretujados los unos contra los otros. El calor que hacía dentro de ese lugar oscuro era sofocante. Y todo por que queríamos robarle unos ingredientes de pociones a Snape.
Si Blaise nos hubiera visto en esa situación, nos lo recordaría hasta el día de nuestra muerte, eso seguro.
-Joder pero cuando se va a ir!? No aguanto más en este sitio!- se quejó otra vez Theo en voz alta.
Theo se retoricio un poco, pero en el momento en que lo hizo, el armario curjio, y Snape se giró hacia nuestro escondite.
-Mierda- sussuramos todos a la vez.
Ya está, Snape nos iba a pillar a todos y nos iba a poner un castigo grave, y aun encima no podríamos conseguir los ingredientes de pocciones.
Mi plan habia sido un fracaso y nos iban a pillar por mi culpa.
Snape se acercó lentamente al armario y cuando estuvo a punto de abrirlo, apareció alguien.
