Sangre de Amor.

Parte 7 ~ Indefensión.

Las gotas de lluvia sonaban contra mi ventana, había faltado esa semana entera al instituto y justo el día que decidí volver, estaba lloviendo. Me senté en la cama, observando mi camisón blanco con manchas de ketchup y otras manchas de grasa. Mi pelea con Ruth me hacía sentir tan triste que había recurrido a la comida chatarra. Ruth era de las pocas amigas que tenía y Michael no se podía considerar tan cercano a mi como  Ruth.

Me quité el camisón y lo lancé en la ropa sucia. Miré el calendario cuando caminé hacia el baño. ''Viernes''. Esbocé una gran sonrisa y me encerré en el baño. El agua aliviaba mi dolor, era como un tipo de analgésico para mi realidad. Salí de la ducha envuelta en una toalla, mi cabello mojado se forzaba a si mismo a ondularse, las puntas me llegaban a la cintura cual fuente carmesí en primavera. Una vez estuve vestida, me miré al espejo por unos minutos. Peiné mi cabello con los dedos mientras en mi rostro se posaba una mirada perdida.

— Aún tengo a Logan... — Pensé antes de empezar a correr hacia el Arts for Teens Cathedral, las riñas con mamá se habían intensificado así que ahora simplemente evitaba desayunar en casa, no quería más roces innecesarios. 

Hoy compartía una sola clase con Ruth y otra con Logan, pero aún así el día fue bastante aburrido. Ruth no hacía nada más que darme la espalda, así que yo me enfoqué en escribir redacciones para el periódico escolar. Compartí mesa con Logan en clase de Química. No paraba de coquetearme y la verdad es que pude sentir algo más que ''química'', (Sí que ironía), entre nosotros dos.

— Oye preciosa... ¿Irás esta noche  al maratón de terror que te mencioné? — El peinaba mi cabello con sus dedos y me miraba justo a los ojos cuando lo mencionó. Por un momento pensé quedar hipnotizada por sus cautivantes ojos, pero al final reaccioné.

¡DEMONIOS! ¡LO HABÍA OLVIDADO POR COMPLETO! Mañana es el maratón de películas de terror y no tengo idea de qué ponerme.  Al final asentí ante su pregunta y me perdí una vez más en su aroma.

— Me tenías preocupado Scarlet... — Me susurró antes de que la campana sonara. El salió primero que yo, así que me quedé recogiendo todos los útiles que usamos para nuestro trabajo.

— Hasta pronto Logan... — Le dije con un hilo de voz tímido a pesar de que el ya se había ido del aula y me había dejado completamente sola. Su ausencia era notable. Se sentía como las tardes de invierno en los que nunca pude jugar con la nieve como los demás. Mi piel no resistía tanto el frío como la de otros.

Caminé hasta mi casillero abrazando mis libros, tenía que preguntarle a Logan qué tipo de ropa debería de utilizar para el maratón, sería verdaderamente incómodo que yo vistiera algo muy diferente a los demás... A lo lejos divisé la figura de Logan, tenía a una chica rubia con el cabello corto, de estatura baja y unos increíbles ojos avellana frente a él. Me acerqué disimuladamente para escuchar su conversación, ella en ocasiones reía de sus chistes y el parecía pegarla más y más de su casillero; justo como solía hacerme a mi. 

— ¿Sabes preciosa...? — Olió su cabello corto, mientras ella esbozaba una sonrisa de lado totalmente pícara. Escuché con atención mientras fingía beber agua de mi botella. Supongo que es una de las ventajas de no ser notada por todos. — Me gusta el cabello corto.

Me quedé en total shock...  No puedo creer que Logan se atreva a coquetear con otra chica. Digo... No es que sea mi novio pero... ¡NO! ¡LOGAN ES MÍO Y SÓLO MÍO, MALDICIÓN! 

Corrí hasta la salida sin importarme que me faltara una clase más para terminar el día, entré a mi casa una hora más temprano de lo que debería por esta razón. Subí los escalones a mi habitación, tomé una tijera y me detuve frente al espejo.

— Lo que sea por su amor. — Murmuré para mi misma, colocando mi largo cabello carmesí hacia delante para que cayera como una fuente sobre mi muslo. Con la tijera recorté mi cabello por los hombros, no me quedaba muy recto al haberlo cortado yo misma pero no importaba, eso apenas se notaba. Una vez terminé, el piso de mi habitación estaba lleno de mechones carmesí. Revolví mi cabello, la verdad que odiaba tenerlo así... Pero por Logan debía acostumbrarme. Salí del baño con un cálido olor a jabón.  Me quedaban varias horas para la fiesta de Logan...

Luego de una hora de ardúa búsqueda por ropa decente, encontré el conjunto perfecto para una noche de terror con Logan. Me puse unos jeans cortos y apretados, estaban algo desgastados pero eso le hacía lucir más a la moda. Me coloqué mi abrigo negro, ocultaba mis pechos pero hacía relucir más a mi trasero gracias al pantalón. Me miré de espaldas al espejo, mi cabello corto me asqueaba pero me permitía lucir como quería. Me puse los converse negros que tanto me encantan y salí de mi habitación. Cuando bajé las escaleras, me encontré con mamá. Me miró en shock al observar mi cabello carmesí ahora corto.

— ¿QUÉ DEMONIOS TE HICISTE EN EL CABELLO? — Me gritó, dejando caer sus cosas en el suelo al estar sorprendida y a la vez enojada. — ¿Qué rayos te está pasando últimamente Rose Scarlet?

— Nada, mamá... Sólo... — Le dije claramente cuando me acerqué a la puerta de salida, el sol se ocultaba a la lejanía. — Tengo que irme.

Mamá me miró algo desconcertada, observando como salía de la puerta. Me arriesgué caminando por las sombras, asegurándome de tener mi pijama en mi mochila. Anhelaba los momentos que compartía con Logan. Eran los momentos que me hacían sentir notada. Los momentos en los que por fin, yo no era invisible. Tenía quince minutos caminando para cuando llegué a la casa de mi amado. La luz del atardecer irradiaba una melancolía admirable, por lo que me llené de confianza para tocar el timbre. Debajo de la alfombra de azul oscuro, descansaba un simple papel de color amarillento. Cuando tomé el papel, se podía notar la letra que en mi interior significaba miedo. La letra que ha llenado mis noches de pesadillas durante los últimos meses. 

Anonimo:

—  La persona que más quieres, te aleja de las personas que aprecias. ¿De verdad crees que vale la pena? Te demostraré lo contrario.

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¡Lamento haberme tardado tanto~! He estado mucho más que ocupado con mis clases, aunque nunca me olvido de mi historia.

¡Vamos creciendo en votos *Q*! Muchísimas gracias a todos los que han votado hasta ahora y los que se han tomado el tiempo de leerme y esperar por cada capítulo <3. Recuerden votar por este también por favor. ¡Hasta el próximo capítulo ;)!