I never should have trusted him (Traducción)

Capítulo 18

{TW: Ataque}

"Nunca debí haber confiado en él."

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Tropecé por los pasillos, tratando de evitar a la gente a toda costa. No había forma de que volviera a mi dormitorio, tanto Oliver como Scarlett estaban allí. No me gusta cuando la gente me ve llorar, me hace sentir débil.

Di giros y escaleras al azar, dejando que mis pies me guiaran. En este punto, mi visión estaba completamente borrosa, mis lágrimas ardían mientras continuaban corriendo por mis mejillas.

El pasillo me resultaba desconocido mientras seguía caminando, mi cuerpo temblaba con mis sollozos. Solo quería alejarme de todos, un lugar donde nadie me encontraría. Me deslicé contra una fría pared de piedra, sollozando en mis manos.

A mi derecha, escuché un ruido que se desmoronaba, llamando mi atención. Giré la cabeza para ver una enorme puerta de madera con detalles de latón y manijas que habían aparecido de repente.

Lo miré con asombro antes de ponerme de pie, había oído hablar de esto antes. Para ser honesta, pensé que era un mito, pero aquí estaba frente a mí, La Sala de los Menesteres.

La manija de latón de la puerta estaba fría en mi mano caliente cuando la giré y abrí la puerta. El interior era como mi habitación en casa, hasta el último detalle. Una ola de alivio se apoderó de mí cuando me derrumbé en la cama.

Podrían haber pasado varias horas, o tal vez fueron minutos, no importó mientras lloraba hasta que no me quedaron lágrimas. Antes, todo lo que quería era estar sola, pero ahora, la soledad era abrumadora. Lo único que quería era Cedric; para que me abrazara, me consolara y me dijera que todo estaría bien.

Estaba acurrucada debajo del edredón, de cara a la pared mientras trataba de dormir para quitarme la sensación de ardor en la garganta.

"¿Rora?" Inmediatamente abrí mis ojos.

"¿Ced?" Mi voz estaba ronca por el llanto y el cansancio. No me moví de mi lugar en la cama. "¿Cómo me encontraste?"

"Te estaba buscando cuando apareció una puerta en la pared." Rápidamente se alejó de la puerta y se dirigió a mi cama.

"¿Qué pasa, querida? Son casi las 9 pm." Se sentó en el borde de mi cama mientras hablaba. Sentí que se me llenaban los ojos de lágrimas mientras hablaba. Se sentó en la cama y tiró de mí para que me tumbara sobre su pecho.

"Está bien, estás bien, estoy aquí". Frotó mi espalda mientras yo sollozaba en su pecho. Continuó consolándome hasta que no pude llorar más. Odiaba a Theo, odiaba todo lo que me había hecho pasar. Pero sobre todo, odiaba dejarlo hacerlo.

Pero amaba a Cedric. Ni siquiera estoy segura de cómo sucedió. Pasé de odiarlo a amarlo en un abrir y cerrar de ojos.

Finalmente, me senté y lo miré a los ojos, sus manos subieron para tomar mi rostro. Cuando estaba a punto de responder, sus ojos una vez tranquilos de color gris azulado y llenos de preocupación se volvieron una furiosa nube de tormenta gris oscuro.