Ahí estaba la Cata tratando de sacarse de la cabeza al Gabo le salió fleto su enamorado al igual que el de su amiga, pero de pronto llega otro loco, feo si, pero tenía una personalidad genial, ella lo vio y se dijo así misma, este cree que me va a conquistar, se acerca a ella, le dije que linda estás belleza, ella le dice hola tímidamente, cuando se acerca un amigo del hombre, que si estaba bueno, y le dice sí está linda la niña, este si le gusto, el joven se dio cuenta de inmediato de que esa no era su mina y miro para otro lado encontró otra niña a quien enamorar, y los dejo solos.
La Cata es de las que se engancha pronto, lo vio y cómo decía su abuelo, de forma rápida le quería pegar el porrazo, pero se contuvo, su mamá decía que a los hombres no les gustaban las chicas fáciles, y su amiga le decía que tenía que aflojarlo a las segunda cita por último, que era último de ordinario hacer eso.
Continuaron hablando, se reían el joven se llamaba Esteban, y al parecer era hombre, pero no de esos que les gustan los hombres como del que estaba enganchada su amiga, si no de esos que eran de verdad, le decía a la Cata de que ella era muy bonita, que estaba soltera, y que cuando la cita, ella de inmediato lo pensó lo dudo pero finalmente acepto, y recordó de que se podía pegar el porrazo la segunda cita, así que luego asintió con la cabeza, claro esto claro que lo iba a contar como segunda cita, ya que ganas tenia y muchas.
Se despidió tímidamente del joven, que no le paraba de dar vueltas en la cabeza, si ese extrovertido hombre de ojos color marrón, pelo enrulado, y ese divertido bigote la Iban a satisfacer en la cama, y llamó a la Fran y le dijo textualmente oye amiga parece que me salió movida.
YOU ARE READING
No es un típico libro de amor
HumorNo eran las personas perfectas ni precisas, tampoco eran perfectas, mucho menos adonis, pero se querían harto y eran bastante felices.